Orlando Ramírez Leal
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Orlando Ramírez Leal. También conocido como Ñato es un ex beisbolista de Grandes Ligas de Béisbol que jugó para el Angelinos de California entre 1974 y 1979.
Sumario
Síntesis biográfica
Nació el 18 de diciembre de 1951 (edad 71 años), Cartagena, Colombia Era el primer jugador colombiano reconocido en la historia en llegar a grandes ligas, hasta la revelación de Luis Castro como colombiano, que jugó 42 partidos para el Philadelphia Athletics en la temporada de 1902. En su carrera de 143 partidos de Grandes Ligas, Ramírez bateó .189 con 16 Carreras impulsadas (RBI), 24 carreras anotadas, cinco dobles, un triple y 16 bases robadas.
Ramírez comenzó su carrera con el club Willard de Barranquilla en 1966, que fue reconocido como el nivel superior del béisbol colombiano.
A la edad de 17 años, Ramírez llegó a la Selección de béisbol de Colombia y debutó en su primer juego en la Serie Mundial Amateur celebrada en Santo Domingo.
A los 22 años de edad, se convirtió un sábado 6 de julio de 1974 en el segundo colombiano en llegar a las Ligas Mayores, el pionero fue Luis Castro, con los Atléticos de Filadelfia en 1902.
En las Copas Mundiales de 1970 (cuarto lugar), Ramírez jugó como Campocorto y fue líder en bases robadas. Dirigió a la Selección de béisbol de Colombia a una medalla de plata en la Copa Mundial de Béisbol de 1971.
Vida
El Ñato tuvo el arrojo necesario para irse a jugar béisbol y comenzar a labrar su proyecto de vida como pelotero inicialmente en la novena Caribesa, después pasó a jugar en Cauchosol, luego en Willard y llegar al Kola Román.
Cuando fue despedido por los directivos de Kola Román por considerarlo un sport stop que no tenía fuego en el corazón nunca pasó por sus mentes que ese mismo muchacho más tarde se convertiría en el segundo colombiano en jugar en el béisbol de las Grandes Ligas.
Fue un camino largo, lleno de tropiezos, pero la constancia del Ñato, su fe le permitieron mantenerse en un medio tan difícil donde muchos colombianos fracasaron por diversos factores.
La llegada de Orlando Ñato Ramírez Leal al béisbol más importante del mundo quebró una sequía de 72 años sin que un colombiano pisara la Gran Carpa, desde que el antioqueño Luis Castro lo hiciera el 23 de abril de 1902 con la Novena de los Atléticos de Filadelfia.
Sin duda que sus dos participaciones del Ñato Ramírez en la selección Colombia fueron fundamentales para que scouts de los Angelinos lo tuvieran en sus papales.
En la selección Colombia, Orlando siempre fue abridor gracias, más que todo, por su excelente velocidad para correr las bases. En las dos series mundiales donde participó en Santo Domingo, República Dominicana y Cartagena.
Cuando llegó a los Angelinos comenzó jugando en Triple A. Cuando llegó lo mandaron a Triple A y una semana después a Doble A. En esa liga tuvo un gran desempeño. Jugaba en ‘Texas League’. Al año siguiente estaba en Triple A con la sucursal del equipo (Salt Lake City) y ahí también tuvo una gran campaña. Tuvo .305 de promedio.
Debut MLB
Debutó en Grandes Ligas el 6 de julio de 1974 con Angelinos ante los indios de Cleveland. En su debut fue colocado de noveno en el orden al bate. En el primer año Ñato Ramírez en Grandes Ligas, jugó 31 partidos, de los cuales 21 fueron seguidos. Dio el primer hit en el segundo juego de la serie ante los indios de Cleveland, se lo conectó al lanzador Jim Perry. Con ese hit empujó una carrera, aunque perdieron 6 a 2. En las Grandes Ligas, con Angelinos de Filadelfia, luego de una brillante carrera en el béisbol aficionado representando a Bolívar y Colombia.
Resultados en MLB
Estuvo 5 temporadas con Angelinos de Anaheim (1974-75-76-77-78 y 79), promedio ofensivo de 189, 53 imparables en 281 turnos oficiales, 5 dobles, 1 triple, 0 jonrones, 24 anotadas, 16 carreras impulsadas, 24 bases por bolas recibidas, 16 bases robadas, 9 veces cogido robando (CS), promedio defensivo de .931, 290 outs, 144 asistencias, 32 errores, en 143 juegos.
Debut con Angelinos de Anaheim
En su debut con Angelinos de Anaheim fue colocado de noveno en el orden al bate, se fue de 2-0 con una base por bolas recibida, mostrando buenas manos en el campo corto, la posición que siempre jugó con solvencia, prestancia y categoría.