Parque del Buen Retiro

Parque del Buen Retiro
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Obra Arquitectónica  |  (Parque)
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Descripción
Tipo:Parque
Localización:Madrid, Bandera de España España
Uso inicial:Lugar de retiro
Uso actual:Parque Histórico Cultural
Datos de su construcción
Inauguración:1630
Otros datos
Premios:Patrimonio mundial de la UNESCO

Parque del Buen Retiro. Es conocido popularmente como Parque del Retiro, es el parque más conocido de la ciudad de Madrid. Su origen se remonta a tiempos de Felipe IV, hacia 1630.

Orígenes

Una de las puertas originales del parque

El parque debe su nombre a que en los inicios existía un cuarto junto al Monasterio de San Jerónimo el Real en el que los reyes se retiraban para guardar luto, preparar entradas solemnes en la corte o pasar los momentos previos a los juramentos que recibían los príncipes. Con el tiempo, el parque se fue reduciendo, y de hecho elementos que hoy en día se encuentran fuera, como el Casón del Buen Retiro o el Museo del Ejército, antes se encontraban dentro del recinto del parque.

A lo largo de su historia, el Parque del Retiro fue maltratado especialmente en dos momentos:

  • Durante la Guerra de la Independencia, cuando las tropas francesas lo utilizaron a modo de fortaleza frente al acoso de las tropas inglesas, lo que provocó que se destruyeran la mayoría de los palacios y jardines.

Flora

El Retiro tiene una variada vegetación, en la que confluyen los tres grandes niveles de estratificación vegetal: el herbáceo, el arbustivo y el arbóreo.

La mayor parte de los árboles del parque son castaños de Indias, con más de 6500 individuos, que suponen el 34,5% de la masa forestal. A gran distancia se sitúan los plátanos de sombra (956, el 5%), los ciclamores (781, el 4,1%) y las palmeras excelsas (651, el 3,4%). También son abundantes los arces silvestres, los cedros atlánticos, los almeces, los cipreses mediterráneos, las acacias de tres espinas, los aligustres, los pinos piñoneros, los almendros, las encinas, las falsas acacias, las sóforas, los olmos comunes y los olmos de Siberia, especies que superan, cada una de ellas, las 300 unidades.

Las plantaciones con las que cuenta el Retiro son resultado de las intervenciones realizadas entre los siglos XVIII y XXI, cada una adscrita a un estilo paisajístico determinado, que condiciona la composición y distribución de las especies vegetales de cada sector. Así, los árboles caducifolios tienen una presencia muy relevante en ciertos jardines decimonónicos, al encajar con el ideal romántico de paisaje. En cambio, en el Parterre, de trazado barroco, prevalecen los arbustos y árboles recortados de hoja perenne, que permiten la creación de grandes áreas abiertas, sin apenas sombras, en línea con los gustos del siglo XVIII.

Cabe destacar que durante el siglo XX fueron concebidos como pequeños jardines botánicos; es el caso de la Rosaleda, con una colección de unos 4.000 rosales, de diferentes especies; el Huerto del francés, formado por unos 300 almendros; y el Jardín de plantas vivaces y alpinas, con ejemplares de secuoya gigante, naranjo de los Osages y araucaria

En 2021 a consecuencia de la Borrasca Filomena, la nevada caída sobre Madrid los días 8 y 9 de enero, causaron el mayor destrozo a la flora arbórea del parque por un evento meteorológico de su historia reciente. En conjunto, un 70% de los árboles del parque resultaron dañados por la rotura de ramas a consecuencia del peso de la nieve. Los operarios fijaron en 400 la toneladas de ramas caídas y fijaron en dos meses el tiempo mínimo para la reapertura del lugar.

Fauna

La variedad de plantaciones y la presencia de zonas boscosas de cierta magnitud favorecen la diversidad de la fauna. Las zonas húmedas existentes, tales como estanques, fuentes y rías artificiales, que no solo actúan como corredores biológicos, sino que, en sí mismas, constituyen ecosistemas.

El Retiro reúne numerosas especies de insectos como las mariquitas, los escarabajos unicornio, los ciempiés, los mosquitos gigantes, los abejorros carpinteros, los grillos o las mariposas limoneras.

En cuanto a los mamíferos existen diversas poblaciones de topillos, murciélagos, gatos comunes y ardillas rojas. Estas últimas fueron introducidas en el año 1997, cuando fueron soltados 145 ejemplares, a partir de una iniciativa municipal. En 2008 tuvo lugar una nueva suelta, esta vez de cinco individuos, al constatarse su práctica desaparición del parque.

Predominan las aves que van desde las más comunes como el gorrión , la paloma bravía, el carbonero, la urraca, el verdecillo o el mirlo hasta las rapaces como el halcón peregrino, el autillo o el cárabo. Asimismo, existen poblaciones permanentes de herrerillos, carboneros garrapinos, agateadores, palomas torcaces, estorninos, petirrojos, pitos reales y verderones. Dentro de las especies invasoras se halla la cotorra argentina.

En los meses cálidos el parque se puebla de vencejos, aviones, ruiseñores y abubillas, mientras que en los fríos llegan los mosquiteros comunes, los chochines, los reyezuelos listados y los picogordos. En otoño y primavera, cuando se producen los pasos migratorios, se pueden observar las currucas capirotadas, los colirrojos tizones, los jilgueros, los mosquiteros musicales, los papamoscas grises y los zorzales comunes.

Existen también importantes poblaciones de ocas, pavos reales, patos y cisnes. En los estanques pueden observase garzas reales y cormoranes, que acuden al reclamo de las especies piscícolas que ahí habitan, principalmente carpas, aunque también se han detectado peces gato y percasoles. Junto a ellas, habitan anfibios y reptiles como el galápago

Arquitectura

El Buen Retiro se construyó en el siglo XVII alrededor de un palacio real. Actualmente solo se conservan el Salón de Reinos y el llamado Casón, enclavados fuera de los límites del parque, como consecuencia de la segregación de terrenos que tuvo lugar en 1865. Dentro del perímetro actual, se encuentran destacadas obras de la arquitectura española de los siglos XVIII y XIX, además de las ruinas de una ermita románica.

Reservorios hidrahulicos

Durante la constitución del Real Sitio una de las prioridades fue la creación de una red de infraestructuras hidráulicas, que no solo garantizase el suministro de agua a las plantaciones y al propio palacio, sino que también permitiera desarrollar elementos ornamentales y recreativos. De las actuaciones llevadas a cabo entonces, consideradas como las más vanguardistas entre las realizadas hasta ese momento en las Cortes europeas, solamente se conservan dos estanques:

  • Estanque Ochavado (o de las Campanillas) cuya planta está configurada por ocho lados polibulados y tiene en el centro una isleta, adornada con una formación de rocalla, aunque en sus orígenes albergó un templete, reemplazado en el siglo XIX por un motivo chinesco, del que colgaban campanillas, que sonaban con el viento. Presidía uno de los ángulos del Jardín Ochavado, un espacio que, al levantarse el Parterre a principios del siglo XVIII, fue eliminado.
  • Estanque Grande. Fue proyectado en 1634 por Cristóbal de Aguilera, que fue también el máximo responsable del sistema hidráulico del Buen Retiro. Aunque técnicamente fue concebido como un gran depósito, del que se extraía agua para abastecer al Real Sitio, desarrolló una función lúdica de primer orden, no solo porque en él se practicaba la navegación recreativa y la pesca, sino también como escenario de naumaquias y representaciones teatrales.

Fuentes

El Retiro no conserva ninguna de las fuentes que albergó durante el siglo XVII, cuando se constituyó como Real Sitio. Entre los conjuntos perdidos se encuentran la Fuente de Narciso, cuya escultura central se hizo posiblemente a partir de un vaciado traído por Velázquez (1599-1660) desde Italia, y la Fuente del Tritón, conformada por un grupo escultórico de Giovanni Battista Lorenzi (1527-1583) y un pedestal de Juan de Bolonia (1529-1608).

La mayor parte de las fuentes que lo adornan en la actualidad proceden del siglo XIX, aunque también se mantienen en pie algunas del siglo anterior, como la Fuente de la Alcachofa, una de las de mayor interés histórico y artístico de todo el parque.

Paseos y jardines

El Buen Retiro cuenta con un número importante de jardines diferentes entre sí , además de paseos y plazas, pertenecientes a distintas épocas y estilos. El más antiguo que se conserva es el Parterre, levantado en las primeras décadas del siglo XVIII, existen vestigios de trazados anteriores en algunos recintos, como el Paseo de Fernán Núñez y la Glorieta del Ángel Caído.

Por su parte, Un capricho es un elemento paisajístico y recreativo mediante modelos arquitectónicos singulares e ingenios mecánicos mezclando lo exótico y lo rústico.

El templete del Estanque Ochavado, es una muestra de la rehabilitación tras los destrozos provocados por la Guerra de la Independencia (1808-1814).

Otras obras maestras que integraron el parque fueron la Fuente Egipcia, la Casa de Fieras, la Casita del Pescador, la Montaña Artificial, la Casa de Vacas, la Casa del Contrabandista, el Castillete Medieval, la Casa Persa (o Rústica) y la Casa del Pobre, estos dos últimos perdidos. En su inmensa mayoría fueron levantados en el Reservado, una zona del Retiro que el rey acotó para uso y disfrute de la familia real.

Conjuntos escultóricos

A lo largo del siglo XVII el Buen Retiro fue adornado con numerosos conjuntos escultóricos, que no solo desarrollaban una función artística y ornamental, sino que, también tenían un carácter conmemorativo, como símbolo de poder de la monarquía española. Entre los cuales hay que destacar la colección de esculturas renacentistas del desaparecido jardín de la Ermita de San Pablo, que estaba situado cerca del tramo meridional del Jardín Ochavado, donde hoy día se encuentra el Parterre. Aquí estaban los grupos El emperador Carlos V y el Furor, Felipe II y María de Hungría, todos ellos realizados por Leone Leoni (1509-1590) y Pompeo Leoni (1533-1609), que desde el siglo XIX se exponen en el Museo del Prado.

Otra de las esculturas conmemorativas del Real Sitio fue la erigida en honor de Felipe IV, conocida en su momento como El caballo de bronce, que en la actualidad preside la Plaza de Oriente de la capital española. Fue empezada por Juan de Bolonia (1529-1608) y terminada por Pietro Tacca (1577-1640) en el año 1640. Considerada como una creación cumbre de la estatuaria ecuestre, permaneció en el Retiro desde 1642 hasta 1843, aunque también estuvo temporalmente en el Real Alcázar de Madrid.

Del siglo XVIII se conserva la serie de reyes españoles del Paseo de la Argentina (o de las Estatuas), proyectada inicialmente para el Palacio Real, que, al igual que los anteriores conjuntos, responde al mismo propósito de exaltación monárquica. Hay un total de trece figuras, así como un pedestal vacío, al perderse el grupo escultórico al que iba servir de base.

Durante el siglo XX se pretendió convertir el Retiro en un lugar de homenaje de figuras ilustres, mediante la creación de conjuntos monumentales que les rindiesen tributo. Ordenados cronológicamente según su fecha de construcción se relacionan a continuación:

  • Monumento al General Martínez Campos. Inaugurado el 28 de enero de 1907 en la Plaza de Guatemala, a espaldas del Monumento a Alfonso XII, con el que comparte eje. Está formado por una estatua ecuestre de bronce, obra de Mariano Benlliure (1862-1947), en la que el militar aparece en posición de observación.
  • Monumento a Benito Pérez Galdós. Realizado por Victorio Macho (1887-1966), está situado en la pequeña glorieta que lleva el nombre del homenajeado, junto al Paseo de Fernán Núñez. Está hecho en piedra blanca de Lérida y mide 2,10 metros de alto, 1,13 de ancho y 2,20 de fondo. Sufragado por suscripción pública, la inauguración tuvo lugar el 20 de enero de 1919, con la asistencia del propio autor, ya inválido y ciego.
  • Monumento a Alfonso XII. Fue concluido en 1922 por José López Sallaberry (1858-1927) y Teodoro de Anasagasti (1880-1938), tras el fallecimiento de aquel. El monumento preside la orilla oriental del Estanque Grande y, considerando sus puntos más extremos, mide 30 metros de alto, 86 de largo y 58 de ancho.
  • Monumento a Santiago Ramón y Cajal. Terminado en el año 1926. Se encuentra en el Paseo de Venezuela y está realizado en piedra granítica y bronce. Su autor, el escultor Victorio Macho (1887-1966), situó a Ramón y Cajal en el centro de un estanque, reclinado al modo de las figuras de los sarcófagos etruscos, con manto y torso desnudo, como un héroe clásico.
  • Monumento a Jacinto Benavente. Se inauguró en 1962. Creado también por Victorio Macho (1887-1966), se encuentra en el jardín del Parterre, formando eje con la Puerta de Felipe IV y el Casón del Buen Retiro. Consiste en una figura femenina de inspiración griega, que mantiene los brazos elevados mostrando una máscara, en clara referencia al teatro. Fue costeado gracias a la recaudación de un millón de pesetas por suscripción popular.

Sitios de interés turísticos

El estanque del Retiro

El estanque es uno de los elementos que continuan vivos desde la inauguración del Parque del Retiro. Inaugurado por el rey Felipe IV en la noche de San Juan de 1631, es sin duda uno de los elementos más célebres y concurridos. En sus orillas es posible disfrutar de todo tipo de espectáculos callejeros, además de echadores de cartas, videntes, lectores de manos, masajistas, títeres, espectáculos varios. En esta parte del Retiro disfrutaron personalidades como Faemino y Cansado, Javier Álvarez o la más actual Hanna.También es posible dar un paseo en barca con remos por el estanque.

La estatua del Ángel Caído

Estatua del Ángel Caído

La estatua del Ángel Caído del Retiro es una estatua única en el mundo, ya que es el único monumento del mundo dedicado al diablo. La imagen representa a Lucifer expulsado del paraíso y enroscado por una serpiente. Premiada con la medalla de primera clase en la Exposición Nacional de 1878, la estatua ocupa su lugar desde 1885, en el mismo emplazamiento donde hasta 1813 estaba situada la Fábrica de porcelanas de la China, destruida durante la Guerra de la Independencia.

El Palacio de Cristal

Palacio de Cristal

Situado a orillas de un pequeño estanque, el Palacio de Cristal se levantó en 1887 por Velázquez-Bosco como un invernadero-estufa para albergar una gran muestra de plantas exóticas traídas con motivo de la Exposición General de Filipinas, por aquel entonces colonia española, y una vez acabada la exposición se decidió conservar el edificio, siendo probablemente el edificio más bello del Parque del Retiro. En la actualidad el Palacio de Cristal se utiliza como sede para la realización de exposiciones temporales del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.

La Casa de Vacas

La Casa de Vacas debe su nombre a que cuando se construyó, en 1874, se hizo para su uso como vaquería y despacho de leche. Ya en el siglo XX, la Casa de Vacas se transformó para utilizarlo como sala de fiestas y lugar de alterne, con el nombre de Pavillón, y más tarde, después de un incendio que la destruyó casi por completo, el Ayuntamiento la reconstruyó para utilizarla como sede de exposiciones y celebración de diversos espectáculos y acontecimientos, constituyendo hoy en día uno de los enclaves más importantes del Parque del Retiro.

La Rosaleda

Fue realizada en 1914 por Don Cecilio Rodríguez, jardinero mayor de la villa, por encargo del entonces alcalde, Carlos Prats. Se inspiró para su realización en la rosaleda de la Bagatelle. La Rosaleda o Rosería, nombre con el que se le conocía al principio, es uno de los lugares más bellos del parque, especialmente en primavera-verano, cuando las rosas eclosionan con todo su esplendor.

Vida cultural

Una de las citas más esperadas en el Parque del Retiro es la Feria del Libro, una oportunidad única para conocer las novedades editoriales del año, a relevantes autores y también para llevarnos un ejemplar firmado. Esta feria se suele realizar entre finales de mayo y primeros de junio. Aunque en 2021 cumple su 80ª edición (tras el obligado paréntesis de 2020), este popular evento no siempre se ha realizado en El Retiro. Sus comienzos, en 1933, fueron en el Paseo de Recoletos pero su creciente éxito obligó a los organizadores a buscar una nueva ubicación con un espacio mayor. Desde 1967 las casetas de los libreros no han dejado de crecer, al igual que el número de actividades que se organizan en torno a la feria y el número de asistentes, que llegó a más de dos millones en 2019.

Patrimonio mundial de la UNESCO

Logotipo del Parque

El 25 de julio de 2021, el Parque del Buen Retiro es reconocido como Paisaje Cultural Patrimonio Mundial de la UNESCO. La elección del proyecto madrileño, denominado Paisaje de la Luz, reconoció la relevancia de aunar en un entorno urbano naturaleza, cultura y ciencia, un hecho que convirtió a Madrid ya en el siglo XVI en la primera capital sostenible de Europa. Así se define al Parque como un modelo único de urbanismo singular adelantado a su tiempo, que se extendió más allá de las fronteras madrileñas, reflejo de un ideal sobre una nueva sociedad.

Fuentes