Pepas de membrillo
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Pepas de membrillo es un exquisito plato argentino para disfrutar con un café con leche por las mañanas, o un mate por las tardes.
Origen
En 1994, José Saia producía alimentos en un horno que tenía en su casa; Julio Tereñes también trabajaba en el rubro alimenticio y hace poco tiempo se había independizado y vendía harina para panaderías. Un día se encontraron y charlando se dieron cuenta que compartían el mismo sueño, entonces decidieron emprender para crear la galleta pepa de membrillo
de la calidad artesanal de una panadería pero que se pudiera hacer de forma industrial. De esta manera crearon Terepin.
El nombre surgió de la unión de Tere (por el apellido de Tereñes) y Pin (por el apodo de Saia). El logotipo es un muñeco, que personifica a un panadero que está degustando el membrillo que se usa para hacer las pepas. Comenzaron a producir en la firma Capri donde se conocieron años anteriores pero en ese momento estaba disponible porque había dejado de producir.
Durante la crisis económica de 2001, al no tener deudas e incrementar la producción llegar a estar por encima de la competencia.
Este emprendimiento que comenzó con dos personas, después de casi 20 años tenia 150 empleados y producían 32 toneladas diarias y se ampliaron los sabores de las pepas a frutos del bosque, mango y batata, aunque, según la empresa, el que más prefieren los argentinos es el clásico de membrillo.
Ingredientes
- 1 cucharada sopera de esencia de vainilla.
- 125 gramos de manteca.
- ½ ralladura de limón.
- 1 huevo.
- 125 gramos de azúcar.
- 1 yema.
- 200 gramos de dulce de membrillo.
- 270 gramos de harina.
- 1 cucharadita de polvo de hornear.
Pasos a seguir:
- Corta la manteca en cubos y colócala en un bol junto al azúcar, la ralladura de limón y la esencia de vainilla. Bate todos los ingredientes hasta integrar.
- Agrega el huevo y la yema al bol. Añade la harina tamizada junto con el polvo de hornear y une todo hasta formar una masa tierna.
- Una vez consigas la masa tierna, envuélvela en un papel film y déjala reposar en el refrigerador por unos 30 minutos.
- Saca la masa del refrigerador, córtala y haz cilindros del diámetro que quieras que tengan tus pepitas de membrillo. Luego, corta esos cilindros en rodajas de 1 cm de espesor aproximadamente y coloca cada porción en una placa para horno engrasada o cubierta con papel antiadherente.
- Cuando tengas todas las masitas en la placa, hazle un hueco en el centro con tu dedo pulgar a cada una y colócales un trocito de dulce de membrillo.
- Hornea las pepitas de membrillo en un horno a 180 °C por 10-15 minutos, aproximadamente, hasta que veas que la masa está levemente dorada y el membrillo derretido. Déjalas enfriar (¡aunque tibias son una delicia!) y disfruta con un rico té o café.
