Rata de túnel

Rata de túnel
Información sobre la plantilla
Concepto:Soldados que se especializaron, durante la guerra de Vietnam, para introducirse en los túneles subterráneos usados por las fuerzas del Vietcong.

Rata de túnel. Grupo de especialistas que se formó durante la guerra del Vietnam entre los soldados de EUA, Australia y Nueva Zelanda cuya misión era introducirse en los túneles subterráneos usados por las fuerzas del Vietcong, eliminar a los enemigos, obtener información y posteriormente destruirlos mediante explosivos.

El Vietcong llegó a crear una extensa red de complejos subterráneos, algunos auténticas ciudades, ya que contaban con almacenes, polvorines, cocinas, dormitorios e incluso pequeños espacios destinados a enfermerías y puestos de mando.

Fortaleza subterránea de Cu Chi

Un ejemplo es la fortaleza subterránea de Cu Chi, una red de túneles que cubría unos 250 kilómetros y unía la frontera oeste de Camboya con las afueras de Saigón y que albergó a hasta 10.000 personas… En estos túneles se planeó por ejemplo la Operación de la ofensiva del Tet (1968) en el más absoluto de los secretos.

Características de los soldados de esta unidad

Los soldados que conformaban esta unidad tenían que ser de pequeña envergadura para poder arrastrarse sin dificultad por el interior de los estrechos pasadizos; tremendamente valientes y decididos para afrontar día a día los peligros que les esperaban en el interior (muchos hispanos cumplían ambas características).

Debían estar listos para luchar a oscuras con los norvietnamitas, y en múltiples ocasiones eran objeto de trampas que se tendían mediante la colocación de minas, estacas de bambú, ingenios explosivos, y otras más macabras como la inundación de curvas para dejar atrapado un gas letal o la liberación de serpientes, escorpiones, hormigas, murciélagos y arañas venenosas.

Los Ratas bajaban a los complejos de túneles equipados con un cuchillo, una pistola como la Browning M1911, las alemanas Luger o Walther o revólveres y una linterna de codo. En ocasiones portaban máscaras antigas, granadas, explosivos y equipos de transmisiones. Algunos morían en su misión, y su cuerpo debía ser extraído a la superficie por sus compañeros para que no taponara los estrechos pasadizos y poder realizar una posterior incursión.

Iniciaron cuando la guerra con los franceses

Estas infraestructuras comenzaron a construirse durante la guerra contra los franceses (1945-54) pero se extendieron de forma muy rápida cuando llegaron los americanos. Los construyeron los agricultores con herramientas manuales y usando arcilla a modo de hormigón.

Cuando el nivel de la capa freática lo permitía, se construían varios niveles separados por compartimentos estancos que aislaban el resto frente a la acción de gases o explosivos. Las trampillas que separaban los niveles eran difíciles de detectar, y hacían creer a los americanos que el túnel era corto, cuando en realidad daba acceso a una amplia red de galerías.

Había también túneles falsos y otros muy estrechos y cavados en zigzag para que sólo los mas ágiles pudieran pasar y dificultar la línea de tiro de posibles intrusos. Las entradas estaban muy bien camufladas y eran tremendamente estrechas. El Vietcong solía colocar minas y trampas explosivas cerca de las entradas a complejos importantes a modo de disuasión.

Vida dura

Para los hombres del Vietcong la vida en los túneles era increíblemente dura, el aire estaba viciado y la comida ya de por si escasa y se echaba a perder con rapidez. Los insectos y la suciedad hacían que se propagaban enfermedades como la malaria y otras infecciones. Pero a pesar de ello, la vida continuaba y todo lo que no se podía desarrollar en la superficie se hacía allí (se celebraban bodas, se fabricaba armamento a partir de piezas americanas sin detonar, allí nacían los niños…etc)

Descubiertos durante la Operación Crimp

Los túneles fueron descubiertos durante la Operación Crimp. La misma comenzó el 7 de enero de 1966 y terminó seis días después. Formaron parte en ella unos 8.000 hombres de la 1 ª División de Infantería, de la 173 Brigada Aerotransportada, y el Regimiento Real Australiano. En ese momento fue la mayor operación militar llevada a cabo en el sur de Vietnam.

A pesar de contar con la ayuda de los helicópteros para agilizar los movimientos, los soldados americanos y australianos eran objetivos de constantes de emboscadas y para total confusión y desesperación, los enemigos parecían posteriormente volatilizarse. Eso hizo suponer la existencia de túneles.

Durante una de estas contradicciones sucedida el día 11 de Enero, el Sargento Stewart Green se sentó sobre el suelo y notó un pinchazo. Pensando que había sido picado por un escorpión o una serpiente comenzó a remover las hojas que cubrían el suelo para buscar qué animal le había mordido. A los pocos segundos vio que se había pinchado con un clavo. Un examen más minucioso permitió descubrir una trampilla de madera que servía de entrada a uno de los túneles que tantos problemas y quebraderos de cabeza les había causado.

Matódos para limpiar los túneles

Inicialmente se usó humo, agentes químicos, y explosivos para limpiar los túneles, así como perros para localizar a los guerrilleros. Pero la dureza de la tierra, las rápidas reparaciones nocturnas del Vietcong y las trampas en que caían los animales, hacían que esas acciones fueran en vano. Así pues, viendo que los resultados no eran satisfactorios, se siguió la táctica de los australianos (que desde un primer momento introdujeron a sus hombres en los túneles).

Se puede afirmar, que como consecuencia de la Operación Crimp, mas tarde renombrada como Operación Buckskin se crearon los equipos de voluntarios para la limpieza de túneles, conocidos posteriormente como Ratas de Túnel y a cuyo mando se situó al Capitán Herbert Thorton, convirtiendo a este grupo en una Unidad de Élite.

Evitando la destrucción de túneles

Se comprendió que la destrucción de túneles no era una política eficaz, ya que en su interior podían encontrarse documentos y mapas que reflejaran los movimientos y tácticas del Vietcong. Los ratas actuaban en equipos reducidos, algunos transmitían información a la superficie a través un cable telefónico, pero otros preferían evitar ese equipo y concentrarse exclusivamente en los posibles movimientos que oyeran dentro del túnel.

Los "Scouts de Kit Carson", (antiguos guerrilleros del Vietcong), acompañaban a los ratas para confundir a lo norvietnamitas que se escondían en los recodos de los túneles. El trabajo, de todos estos hombres era muy estresante, el ambiente era terriblemente angustiante y claustrofóbico, y el constante nerviosismo ponía a prueba el estado mental de los soldados. De vez en cuando alguno se derrumbaba y salía gritando y llorando. Una vez que esto ocurría, no se les permitía bajar de nuevo.

Peligrosa la entrada y la salida

Si entrar a los túneles era peligroso, el salir también lo era. Una vez que se iba a subir, el rata debía hacer sonar un silbato para que los hombres que estaban en la superficie supieran que era uno de ellos, ya que a veces entraban sin la guerrera (a pecho descubierto) y la suciedad podía propiciar una equivocación fatal.

Una de las reglas de oro de estos valientes era el recargar el arma antes de disparar cuatro veces, con el objeto de evitar que los enemigos pudiesen saber cuando se quedaban sin municiones. Estas operaciones, al igual que el cambiar la pila o la bombilla de la linterna eran ensayadas en la superficie tanto a oscuras como en las posiciones que debían adoptar bajo tierra.

El Kit de los hombres rata de túnel

En 1967 se creó un “Kit” especial para estos hombres. El mismo incluía:

  • una pistola del calibre 38 con silenciador (el sonido de un disparo en un túnel era terrible para recuperar con prontitud el sentido del oído)
  • gorra con lámpara (sistema utilizado por los mineros)
  • equipo de comunicaciones con auriculares y micrófono
  • cuchillo

Atracción turística

Hoy en día, estos túneles forman parte del día a día en la vida de los turistas que visitan Vietnam, y son un buen reclamo para que los visitantes ocasionales que acuden a esos “Parques temáticos” que entre tiro y tiro de los M-16 o AK-47 que se alquilan a quien lo desee, pueden recordar a los valientes que dejaron sus vidas unos metros un poco mas abajo.

Bibliografía

  • Arnold, James R. (1994). Ofensiva del Tet, 1968: momento decisivo en Vietnam. Madrid: Ediciones del Prado. p. 96. ISBN 8478384774.
  • Colección NAM EDIT marvel , FICHAS DESCRIPTIVAS.
  • Guerrero, Juan Antonio (1993). Nam: crónica de la guerra de Vietnam, 1965-1975. Barcelona: Planeta-Agostini. p. 640. ISBN 8439507674.
  • Mangold, Tom; John Penycate (2005). The Tunnels of Cu Chi. Presidio Press. ISBN 0-89141-869-5.
  • Rottman, Gordon (2006). Viet Cong and NVA Tunnels and Field Fortifications of the Vietnam War. Osprey Publishing. ISBN 1-84603-003-X.
  • Kirchner, Paul (2009). More of the Deadliest Men Who Ever Lived. Paladin Press. ISBN 978-1-58160-690-4.

Fuentes