Retrato de Nicolás II (cuadro)
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Retrato de Nicolás II es un cuadro del pintor ruso post impresionista de Valentín Serov. La pintura representa a la nobleza rusa, al emperador Nikolai II como un hombre de cualidades ordinarias y no como un emperador celestial.
Sumario
Historia de Nicolás II
Nicolás II era descendiente de una antigua dinastía, los Romanov, que gobernaron Rusia desde 1613, heredando los dominios de sus antepasados Pedro el Grande y Catalina la Grande.
Nació el 18 de mayo de 1868, su padre trató de enseñarle las labores del gobierno, sin demasiado éxito, en aquellos momentos Rusia era el imperio más extenso del mundo, desde el mar Báltico hasta el Pacífico, con más de 130 millones de súbditos.
Cuenta la leyenda que Nicolás II no estaba preparado para regir un país con unas profundas desigualdades sociales y un inmovilismo suicida en las élites.
Sin embargo era un autócrata convencido: lo que significa que tenía una fe ciega en el poder absoluto de los zares, no así la fortaleza del dominio de un país.
Lo que trajo como consecuencia que terminara sus días fusilado por los bolcheviques en Ekaterimburgo el 17 de julio de 1918.
Características del cuadro
A finales del siglo XIX, Valentin Serov se convirtió en un artista famoso y de moda en San Peterburgo.
Sus clientes que deseaban ser retratados, fueron grabados en su cola. Entre ellos se podían encontrar miembros de la familia imperial: como los Grandes Duques Mikhail Alexandrovich y Pavel Alexandrovich , los emperadores Alejandor III y Nicolás II.
Pa 1900, el artista completó un retrato casero Nicolás II, el rey quería dárselo a la emperatriz Alexandra Fedorovna, fue pintado en solo dos sesiones.
La pintura
La primera versión de la pintura no salió bien y el pintor no pudo hacer un boceto exitoso. Entonces fue cuando Nikolai, cansado, se sentó a la mesa, y el pintor agarró este momento, para crear una copia de la pintura, en estas sesiones participó la emperatriz a la cual no le gustó el retrato y le dio unos consejos al pintor, el mismo invitó a la emperatriz Alexandra a terminar la imagen.
Los retratos ceremoniales en aquella época estaban llenos de atributos de lujos: elegantes túnicas, insignias, interiores solemnes.
Sin embargo Nikolai se representa con su ropa cotidiana: la chaqueta del Regimiento Preobrazhensky de los Guardias de la Vida.
Este retrato parece más un boceto ya que está pintado con grandes trazos, las transiciones de color son ásperas, la figura del emperador está rodeada por un contorno y el fondo está marcado condicionalmente, una oscura superficie gris.
La idea del pintor era representar no una imagen elevada de un emperador celestial, sino un hombre que se caracteriza por cualidades ordinarias.
Datos del autor
Valentín Serov. Nació en San Petersburgo el 19 de enero de 1865, hijo del compositor ruso Aleksandr Serov y su mujer Valentina Bergman, compositora de raíces germano-judías e inglesas. Durante su infancia estudió en París y Moscú con Iliá Repin y en la Academia Imperial de las Artes de San Petersburgo (1880-1885) con Pável Chistiakov.
La temprana creatividad de Seróv fue oscurecida por el realismo artístico de Repin y el estricto sistema pedagógico de Chistiakóv. Las siguientes influencias que Seróv recibiría fueron de las obras de los antiguos maestros que vio en los museos de Rusia y Europa del Este, las amistades con Mijaíl Vrúbel y (más tarde) con Konstantín Korovin y la creativa atmósfera de la Colonia de Abrámtsevo, a la cual estaba muy unido.
Serov llegó a ser el más exitoso y brillante retratista de Rusia en los años 1890 y la primera década del siglo XX.
Las mejores obras de Seróv en su primer periodo fueron retratos: "Niña con melocotones" (1887), y "La muchacha iluminada por el sol" (1888), ambas en la galería Tretyakov. En estas pinturas Serov se concentra en la espontánea percepción del modelo y la naturaleza. En el desarrollo de la luz y el color, la compleja armonía de los reflejos, el sentido de la saturación de la atmósfera, y la fresca y pintoresca percepción del mundo, son características del impresionismo ruso.
A partir de 1890, el retrato se convertiría en el género por excelencia de Seróv. Fue en este campo que su estilo se volvería pronto más claro, siendo las pinturas notables por las características psicológicas de sus temas. Sus modelos favoritos eran personajes de la cultura, actores, escritores, músicos y la familia imperial.
En 1903 fue elegido académico de la Academia de Artes de San Petersburgo.
Falleció en Moscú el 5 de diciembre de 1911.
