Osvaldo Tarantino
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Osvaldo Tarantino. Pianista, director, compositor y arreglista argentino.
Síntesis biográfica
Osvaldo Tarantino, pianista,director,compositor y arreglista, nace el 6 junio de 1927 en Buenos Aires Argentina.
Trayectoria
Osvaldo Tarantino es uno de los mayores pianistas del tango sin distinción de épocas o de tendencias. Dueño de un sonido profundo y parejo, la gran inventiva y su buen gusto han hecho su personalidad,tanto como solista como en la conducción orquestal. En su estilo se aúnan la magia y la sobriedad de lo milonguero y el vuelo musical.Ha sido arreglador de ideas exquisitas y compositor de bellas melodías.
Su padre José, también músico, tiene un conservatorio, es director de orquesta y toca varios instrumentos. Al cumplir los ocho años ya toca el piano de oído en el conjunto de su papá. Aparte del piano, aprende a tocar el bandoneón y la guitarra. Luego, se va encausando en el estudio académico, cursando armonía y contrapunto con el maestro Bianchi.
Sus ídolos son dos hombres de jazz, Art Tatum y Teddy Wilson,en el tango Orlando Goñi: «Su mano izquierda es una revolución.»,declara alguna vez.
Durante la década de 1940 actúa con el conjunto Los Pregoneros de América,con Amílcar Neira, Castel y su suegro Augusto Vila (Tito), el del dúo Gómez-Vila. Luego se sienta al piano de las orquestas de Pedro Maffia, Edgardo Donato y Argentino Galván. En 1953 esta con Héctor Varela y luego integra la formación de Juan Canaro en la primera embajada Argentina a Japón.Ahí está nueve meses. Más adelante, con varios de los músicos de esa orquesta, actúa en Estados Unidos, para radicarse luego en Caracas y presentarse en Venezuela y en Colombia.
De regreso a su país recala en las filas que dirigía Roberto Caló, en las que da a conocer cuatro de sus composiciones: “En Fa menor” y “Sacale chispa”, instrumentales y con letra “Este fiel corazón” y “Si yo pudiera olvidarla”. Luego, es llamado por Alfredo Gobbi con quien traba gran amistad.
En 1962, forma Los Tres de Buenos Aires, con Ernesto Báez (guitarra) y Juan Miguel Rodríguez Toto (bandoneón). Más adelante integra el quinteto de Astor Piazzolla y vuelve a Norteamérica dirigiendo la orquesta que acompaña al cantor Alberto Marino, años 1968 y 1969. Además, ya en Buenos Aires, cumple las mismas funciones para las voces de Jorge Sobral y Alba Solís.
En 1972, otra vez Piazzolla, ahora con el noneto, ocupando el lugar dejado por Osvaldo Manzi. Hacen una larga gira que comienza en la Argentina, prosigue en Brasil y Venezuela y llega a París y Roma. Dos años después, integra el sexteto de Raúl Garello en El Viejo Almacén y, al poco tiempo, lo nombran director musical del sello Cabal.
Es un creador que se ubica en la escuela rítmica de gran fuerza tanguera de Orlando Goñi, con elementos de Horacio Salgán. Estas son las bases donde se cimenta su estilo. Su obra, lamentablemente, ha quedado dispersa y las grabaciones realizadas no son una muestra acorde a su talento, no ha quedado suficiente material tal como hubiéramos querido los que somos sus admiradores.
En 1964 está en su programa A través del tango de Radio Municipal, ofreciendo una serie casi improvisada de interpretaciones junto al guitarrista Aníbal Arias y que son editadas en un disco que casi no tiene circulación. Ahí quedan “Del bajo fondo” y “Ciudad triste” de su autoría, “Boedo”, “Gallo ciego” y “Un placer”.
Cuando forma Los Tres de Buenos Aires tiene la posibilidad de grabar para el sello Record, otra lamentable edición reducida. Ahí junto a Toto Rodríguez, el guitarrista Héctor Real, más un contrabajo y percusión deja los siguientes títulos: “Punzante”, “Del otro lado”, “Pa’ que bailen los muchachos”, “Clavel del aire”, “Del bajo fondo”, “Adiós Buenos Aires”, “Pichín bar”, “Orgullo criollo”, “Shusheta”, las milongas “La puñalada” y “Milonga de mis amores”, más la canción “Estrellita” en tiempo de tango.
En un plano menos interesante han quedado algunos trabajos donde priva un afán sólo comercial, cuando con el seudónimo de Pierre Montand integra tangos muy conocidos con un estilo europeizado, es para el sello Cabal.
Graba para Disc Jockey, en dúo de pianos con Osvaldo Berlingieri, títulos conocidos sin mayor aporte creativo, el resultado no es interesante. En cambio, en 1977, y para Cabal, registra una larga duración que lo tiene en una de sus caras acompañando al cantor Néstor Fabián y en el reverso, seis temas instrumentales: “Buenos Aires hora cero” y “Adiós Nonino”, de Piazzolla. Y de su autoría “Demoníaco”, “Atávico”, “Para Gracián” y “Calle rara”. Aquí crea un clima especial, bellas imágenes, rodeado por los siguientes músicos: Julio Ahumada (bandoneón), Tito Besprován y Eduardo Walczac (violines), Abraham Seleson (viola), José Bragato (cello), Kicho Díaz (contrabajo), Arturo Schneider (flauta) y Juan José Sandri (guitarra eléctrica), más la intervención en algunos temas de Fernando Suárez Paz.
Otro long-play, éste para el sello APP con orquesta propia y cantores diversos y obras nuevas es otro trabajo no muy interesante. Las voces son de Raúl Fontana, Jorge Rolando, Juan Carlos Jordán, Lucho Rivero y Jorge Hidalgo.
En 1980 para el sello SUT la curiosidad de Música para escuchar y bailar, en dúo de pianos consigo mismo.
Afortunadamente en 1972 integra el Conjunto 9, de Piazzolla, es uno de los acontecimientos más destacados del tango contemporáneo. En el disco donde interviene se incluye “Vardarito”, “Oda para un hippie” y “Onda nueve”, compuesto para su lucimiento. Ahí tiene momentos de libre improvisación.
En 1994,Melopea Discos edita Osvaldo Tarantino. Solo piano tangos en vivo,en el que interpreta 20 versiones de clásicos del género.
Finalmente queda para destacar en cuanto a intervenciones en el disco, su presencia en el Grupo Vanguardia, de Saúl Cosentino y algunas apariciones junto a Néstor Marconi en instrumentales y en otras acompañando a Roberto Goyeneche. Los cassettes que son grabados por su piano acompañando recitados a cargo de Horacio Ferrer.
No nos deja en el disco todo lo que hubiéramos querido, pero sí unas doscientas composiciones. Es un amigo a quien mucho extrañamos.
Muerte
Osvaldo Tarantino fallece en Buenos Aires, Argentina, el 10 de septiembre de 1991.

