Gestalt
| ||||||||
Sumario
Historia
Definición
Aportes
Junto al concepto de "Gestalt", se incluyeron el concepto de "equilibrio" y "campo", tomados en buena parte de la Física. Por equilibrio, los gestaltistas entendían la tendencia de la experiencia inmediata a mantener un sistema dinámico relativamente equilibrado, a anticipar en la propia percepción el movimiento del sistema real hacia un punto de equilibrio. La idea del equilibrio supone también el efecto de tensión en un sistema no equilibrado, concepto que se utilizará por los continuadores del movimiento. El concepto de campo identifica muy bien la idea de sistema de relaciones entre estímulos más que los estímulos físicos tomados aisladamente. Los seres humanos no vivimos en un mundo de estímulos físicos como lo asumían los conductistas: se vive en campos de relaciones entre estímulos, que generan tensiones reducibles solo cuando se busca el equilibrio implícito y dinámico del sistema. Kölher citaba una investigación realizada por él: se condicionaba un grupo de animales (escogió gallinas, animales notoriamente estúpidos) a recibir el alimento en un comedero de color gris claro por oposición a uno gris oscuro; una vez logrado el condicionamiento exacto, varió los colores de los comederos convirtiendo el antiguo gris oscuro en un gris más claro que el segundo. Las gallinas sin dudarlo prefirieron el comedero más claro, independientemente del gris al que habían sido condicionadas. Era evidente que se habían condicionado no a un color, sino a una relación entre colores. Un problema abordado por todas las corrientes psicológicas era la pregunta psicofisiológica, la relación entre el fenómeno psicológico y su correlato fisiológico. Los gestaltistas eran antirreduccionistas; no aceptaban que el sistema fisiológico fuera el factor causal de la subjetividad. Para afirmar esta posición recurrieron al principio del Isomorfismo: existe un paralelo entre los procesos que ocurren en la percepción y los procesos del Sistema Nervioso Central. Uno de los errores de la Psicología experimental elementalista era precisamente considerar el Sistema Nervioso como una máquina rígida, compuesta de elementos que se asociaban para producir efectos de sumatoria y acumulación; los gestaltistas imaginaron una máquina diferente, flexible, que funcionaba por unidades complejas correspondientes a la gestalt de la realidad. Las mismas gestalten que aparecían en la realidad (la estructura del mundo), aparecían nuevamente en el fenómeno experiencial (como presentación inmediata del sujeto) y como proceso fisiológico en el Sistema Nervioso. Por supuesto, esto fue apenas una suposición sin evidencia experimental, pero coincidía bien con los descubrimientos de la Fisiología de la época que comenzaba a comprender que los elementos anatómicos del Sistema Nervioso no permitían comprender sus funciones, sino que era necesario hablar de sistemas como unidades no aditivas, basadas en funciones integrales y no en sumatorias de elementos. Por último, se rechazaba la hipótesis de la constancia, entendida como la acción de ordenadores a posteriori de la experiencia sobre la imagen sensorial, sino que actuaban antes de cualquier experiencia en tanto se correspondían con la gestalt no visible pero actuante. Sin embargo, el rechazo del aprendizaje como base para el efecto de constancia solo significó identificar los ordenadores a un nivel más bajo de la experiencia subjetiva. De hecho, seguían existiendo "ordenadores" de la realidad en el mismo sentido que le dio Kant,
pero estos a su vez suponían un paralelismo con la realidad. La omnipresente "gestalt" estaba simultáneamente en la realidad y en la percepción, y no era un reflejo en ningún sentido. Al final la tesis era innatista como en la mejor tradición racionalista, y no se podía hablar de conocimiento como reflejo del mundo, sino como correspondencia en paralelo.
Principio de la Pregnancia
A pesar de un comienzo tan modesto, la corriente no se detuvo en los fenómenos de la percepción. En 1913 Kölher inició experimentos con monos en la Isla de Tenerife donde debió permanecer durante la Primera Guerra Mundial. Estudió el aprendizaje, el pensamiento como solución de problemas y las variantes del condicionamiento. Sus resultados fueron significativos. La solución de problemas en los monos no seguía el patrón definido de ensayo-error de sus colegas norteamericanos: solo una observación superficial y poco atenta podía aceptar tal conclusión. En realidad ante un obstáculo en la consecución del alimento, los monos se detenían ante el bloqueo, inhibían su acción externa y parecían concentrarse en una acción perceptual sobre el campo de estímulos; de pronto, súbitamente, ejecutaban una acción diferente que rodeaba el obstáculo y permitía alcanzar el alimento. Esta detención y el comienzo súbito de otra acción Kölher la llamó "insight", palabra inglesa que significa "vista interior", "revelación" o "discernimiento", y que el lenguaje popular acuña como "iluminación". Esa toma brusca de conciencia de la solución parecía el factor clave para comprender el pensamiento, que obraba como reestructuración del campo perceptual inmediato en la búsqueda de otra Gestalt más fructífera. Por supuesto, existe el ensayo-error ciego, pero como pensamiento de bajo nivel, limitado a hábitos y automatismos; el verdadero pensamiento productivo requiere el "insight" como resultado de un proceso de reestructuración del campo y una nueva Gestalt mejor adecuada a la finalidad. Semejante explicación permitía entender también la existencia de errores "buenos", que permitían el descubrimiento de nuevos ordenamientos del campo y constituían por tanto, ocasiones para aprender. Un ejemplo por demás elegante como experimento de esta posición se realizó con monos: se colocaba un racimo de plátanos en una jaula, pero a una altura que el mono no pudiera alcanzar; en el suelo de la ja
ula se hallaban esparcidos diferentes objetos -varas de diferentes longitudes, cajas de diferentes alturas- ninguno de los cuales por sí solos permitían alcanzar el objeto. El mono se desplazaba por la jaula, tanteando los objetos, realizando acciones aparentemente desconectadas del problema hasta que súbitamente armaba una torre de cajas o articulaba una vara con otra para llegar a los plátanos. Este efecto lo revelaba también Tolman en experimento con ratas reseñado en el capítulo anterior, y es de notar que este autor conductista elaboró su propia teoría incluyendo elementos de la corriente gestaltista. Por último, llegaron a la conclusión de que el refuerzo final de los conductistas no era obligatorio para el aprendizaje, ni era constitutivo del proceso: este siempre procedía por insight, no necesitando el refuerzo para su realización.
Aciertos y desaciertos
Variaciones contemporáneas
Lewin es un caso típico de inconformidad con la nueva corriente, fundamentalmente por el énfasis dado a los procesos cognoscitivos. Al principio participó de los experimentos y las conclusiones teóricas pero en poco tiempo comenzó a mostrar su insatisfacción con las explicaciones a medias de los gestaltistas. Su condición de judío en la Alemania nazi lo obligó a exilarse en Estados Unidos de América en la década de los años treinta donde su trabajo es considerado hoy en día como uno de los referentes fundacionales de la Psicología Social. Para Lewin el rechazo a la Gestalt en su formulación inicial se centraba en algunos puntos: el énfasis exclusivo en la percepción y los procesos cognoscitivos, el paralelismo psicofísico (isomorfismo) y la falta de aplicación (después de todo, los gestaltistas siguieron siendo académicos). Prefirió los nuevos modelos de la Física cuántica como analogías mentales, en especial los de campo y fuerzas, un lenguaje más próximo a la matemática (aunque sin la necesidad de cuantificación) y un enfoque antirreduccionista radical que no tuviera en cuenta el correlato neurofisiológico en sus producciones. Su foco, el objeto de estudio de la Psicología, era el campo psicológico individual, marcando simultáneamente al individuo y el sistema de relaciones en que estaba insertado. Esta posición era resultado de profundas reflexiones acerca de la constitución de las ciencias y de la situación de la Psicología en el sistema científico de su época. Su enfoque científico es constructivo: en oposición a la lógica de la ciencia clasificatoria de Aristóteles, consideraba que las ciencias modernas nacían de Galileo Galilei, con una lógica deductiva y teórica que procedía a través de la construcción de modelos de la realidad. De hecho, gran parte de su propuesta descansa en la selección y prueba de modelos de comprensión del fenómeno psicológico, descritos con una matemática topológica, relativa al espacio y sus posiciones. El individuo es un caso único, no generalizable en tanto es un sistema de relaciones interdependientes con el ambiente que cambia continuamente. La condición de cualquier persona es dinámica, no estable, y depende en un momento dado de la región en la que se encuentre. Por región se comprende el tipo de actividades que la persona realiza y los objetos y personas con las que se relaciona en este momento, y por locomoción, el movimiento en la región que la persona realiza mentalmente. El espacio vital de la persona incluye diferentes regiones a través de las cuale s se mueve psicológicamente. Las regiones y sus áreas no son neutrales en términos de valores para el sujeto que las vive: sus objetos están cargadas de fuerzas y tensiones, algunas positivas (efecto de atracción), otras negativas (efecto de repulsión) y con mucha frecuencia ambivalentes o cambiantes según sea la posición del sujeto con respecto al objeto. Es posible describir el estado psicológico de una persona identificando su campo individual, sus regiones (por ejemplo, familia, trabajo, diversión), los objetos (entendiendo también otras personas) que pueblan estas regiones, las fuerzas y los tipos de valencia que poseen, las formas de locomoción a través del campo, los cambios de valencia que se producen al moverse y los estados de equilibrio relativo de tensiones, que pueden ser momentos estables de la dinámica personal.
Entiéndase bien: ninguna de estas descripciones se refieren a la realidad objetiva sino a la realidad de un sujeto dado, tal y como la vive, en un momento dado de su devenir. La realidad vivenciada puede entrar en fuertes contradicciones con la realidad objetiva, en cuyo caso las acciones del sujeto pueden ser inadecuadas y vivirse como conflictos. Una persona en la vivencia del sujeto puede poseer simultáneamente valencias positivas y negativas; en este caso el sujeto siente el efecto doble de atracción-repulsión y se enfrenta a un conflicto que puede paralizarlo o llevarlo a acciones inadecuadas. Escapar a otra región puede disminuir la tensión momentáneamente, pero se mantiene latente todo el tiempo hasta que encuentre una solución. Una buena parte de la enseñanza contemporánea de los llamados procesos dinámicos utiliza con frecuencia este modelo de descripción, que tiene la ventaja de incluir en la comprensión de la subjetividad la visión dinámica del mundo.
Enfoque dinámico
En rigor, K. Lewin no fundó una escuela. Dejó en libertad a sus discípulos para que crearan libremente sus propias ideas (algunos de ellos con notable influencia en la Psicología Social y la Sociología contemporáneas), inició la práctica de los grupos de entrenamiento en las empresas (T-groups) y produjo metodologías de investigación apropiados para los temas que abordaba, como la actual metodología de investigación-acción.
Sus propuestas no están exentas de críticas. Comparte con la Gestalt la falta de consideración del desarrollo y sobre todo, de la historia como principio explicativo. El énfasis en la comprensión del momento como elemento clave de una persona deja fuera del análisis la propia historia de su vida, factor sin el cual puede resultar incomprensible el presente. Otra crítica se refiere a su propia posición epistemológica: la relación teoría-empiria-método focalizada en la propuesta de constructos como modelos comprensivos resultaba limitada e insatisfactoria para los que preferían una Psicología más científica, más orientada a descubrir leyes y no solo descripciones del fenómeno psicológico en el caso único; la preferencia por los temas de motivación daban un sesgo teleológico a su teoría, con posibles deslices a descripciones metafísicas, tan rechazadas por la tendencia determinista sobre todo en los Estados Unidos. De todas formas, su propuesta trascendió las críticas aunque a través de la incorporación a otros esquemas de pensamiento y acción diferentes a su origen. Constituye un modelo que no ha agotado sus posibilidades para el futuro.
Aportes de Piaget
Los conceptos claves son "estructura" y "equilibrio", coincidentes con los términos de Gestalt y equilibrio de los gestaltistas. Sin embargo, su propia descripción añade matices diferenciados: la gestalt no se refiere solo a una composición perceptual o una organización de campo; es en primer lugar una organización de acciones reales con objetos reales, que se caracteriza por propiedades bien definidas e identificables; el equilibrio no es un estado de inmovilidad, sino una situación dinámica en continuo movimiento. Esta visión dinámica, genética y evolutiva es un trazo definitorio de la elaboración piagetiana, junto a la búsqueda de un lenguaje matemático para la descripción de las acciones que en su caso es la Lógica Matemática. Resumir las ideas básicas de su propuesta en algunos puntos es una tarea complicada, porque ningún resumen puede hacer justicia a la brillantez de su obra. No obstante para los fines de este texto, pudiera quedar como sigue:
- Todo conocimiento tiene su génesis en una acción real con objetos reales. Toda acción del sujeto en su ambiente tiene un propósito adaptativo, de búsqueda del equilibrio dinámico, pero se describen dos tipos de acciones: acomodación, en que el organismo se adapta, modela su estado para acoplarlo a la realidad del objeto; y asimilación, en la que el sujeto obliga al objeto a amoldarse a su acción. Ambas acciones se complementan para perfilar la adaptación final y el equilibrio resultante.
- Pero la acción no es el conocimiento mismo. A partir de la repetición de acciones con el entorno, el sujeto va construyendo una estructura, un modelo ideal de las acciones posibles sobre el objeto. La construcción de la estructura no requiere la realización de todas las acciones posibles (idea que subyace en el conductismo); solo las necesarias para completarse. Su completamiento o cierre supone el cumplimiento de determinadas exigencias del sistema de acciones que garantizan la ejecución de cualquier tipo de acción sobre el objeto con dominio de sus consecuencias y la posibilidad de reversión. La repetición mantenida de una acción parcial puede producir un entrenamiento, pero no es un verdadero conocimiento ya que queda limitado a un objeto o una situación, y por tanto, no es generalizable.
- La función de las estructuras es doble: toda estructura es anticipatoria -permite prever las consecuencias de la acción antes de realizarla-, y generalizadora -extiende la posibilidad de aplicación de las acciones a toda la clase de objetos semejantes en alguna cualidad.
- Las estructuras se pueden describir con formulaciones lógico-matemáticas, y a partir de un conjunto de estructuras iniciales es posible comprender por generación la génesis de todos los conocimientos humanos, incluyendo los relacionados a contenidos morales, afectivos y motivacionales.
- El desarrollo humano en términos de construcción de conocimientos (estructuras) procede por estadios y periodos definidos por el cierre paulatino de las estructuras correspondientes a una clase de acciones. No es posible construir estructuras complejas si las precedentes no están cerradas. El cierre garantiza el equilibrio hacia el pasado del desarrollo, pero al mismo tiempo genera un desequilibrio hacia el futuro. Por esta razón, el desarrollo se describe en etapas relativamente fijas, que se corresponden con rangos de edades cronológicas y que culminan alrededor del final de la adolescencia con el manejo de las operaciones lógico-simbólicas (acciones ideales), que para Piaget constituyen la versión última del conocimiento como estructuras.
Críticas a las teorías
Fuentes
- COLECTIVO DE AUTORES. Historia de la Psicología. Colectivo de Autores. Editorial Félix Varela. La Habana, Cuba. 2005.

