Antonia Palacios

Información sobre la plantilla
200 × 155
NombreAntonia Palacios Caspers
Nacimiento1904
Caracas, Bandera de la República Bolivariana de Venezuela Venezuela
Fallecimiento13 de marzo de 2001
Caracas, Bandera de la República Bolivariana de Venezuela Venezuela
OcupaciónEscritora

Antonia Palacios Caspers Poeta, novelista y ensayista venezolana. Premio Nacional de Literatura, en 1976 y Premio municipal de literatura en 1982.

Síntesis biográfica

Nació en Caracas, Venezuela en 1904. Apenas cursó los primeros años de primaria, pero la madre, como era costumbre en la época, se encargó de cultivar su cultura aproximándola a los libros y al arte.

Su padre fue el ingeniero Andrés Palacios, descendiente directo de Bonifacio Palacios, tío de Simón Bolívar, y su madre, Isabel Caspers, sobrina de Ezequiel Zamora. Los Palacios Caspers, a pesar de sus apellidos ilustres, no tenían medios de fortuna. En su infancia, la familia vivió en La Candelaria, en la Plaza del Panteón y en Maiquetía.

De regreso a Caracas, su vida no fue muy diferente a las de sus compañeras de generación. Luego de los sucesos del 28 participó en muchas actividades. Fue en su casa, en 1929, donde nació el “Grupo Cero de Teoréticos”, que desapareció por la persecución política.

Tiempo después se casó con Carlos Eduardo Frías, director de la revista Élitey excelente cuentista. En 1935, nació su hijo Fernán. En ese tiempo publicó sus primeros trabajos, con seudónimo, en Élite. Durante el gobierno de Eleazar López Contreras, Frías entró al Servicio Exterior y estuvieron en París y Ginebra. De esa experiencia salió la publicación de su ensayo París y tres recuerdos (1944).

En 1941 nació su hija María Antonia, fue una niña prodigio en el piano y moriría en plena juventud a causa de una Diabetes Mellitus I. En 1949, se editó en Buenos Aires su única novela, Ana Isabel una niña decente, gracias a la gestión que ante Gonzalo Losada hizo Arturo Uslar Pietri. Novela que rememora la infancia feliz de la protagonista, la cual recupera en sus recuerdos ciertas zonas del centro de la ciudad de Caracas. En 1954 dio a conocer Crónicas de las horas, en 1955 Viaje al frailejón, un bellísimo relato de un viaje a los Andes hecho poco tiempo antes.

Viajes

Pasó un tiempo en New York, entre 1955 y 1956, por la carrera pianística de su hija. Seguidamente se mudó a Caracas en donde Harriet Serr, una de las mejores profesoras de piano de Estados Unidos apoyaría a la niña prodigio.

En 1957 Antonia y su hija se instalaron en Europa, primero Roma, después Viena, por los estudios musicales de María Antonia, pero la joven decidió inesperadamente dejar su carrera musical y regresaron a Caracas, en donde le fue diagnosticada la Diabetes. Su situación fue agravándose hasta que murió, meses después de haberse casado y tras participar activamente en los movimientos subversivos de la extrema izquierda. Fue un golpe demoledor para Antonia, del que nunca se recuperó.

Vuelve la escritora

En 1972 reanudó su carrera literaria con los cuentos Los insulares en los que realizaba una incursión poética en el devenir de la conciencia y en 1973 publicó Textos del desalojo, poemas en prosa.

Destacada en la ficción venezolana por el cultivo de una prosa artística, dentro de la literatura escrita por mujeres, más ligada a los temas sociales. Fue galardonada con el Premio Nacional de Literatura con El largo día ya seguro (1975).

En 1976 fue Jurado del Premio de Novela Rómulo Gallegos, y, por iniciativa de Oswaldo Trejo, dirigió el taller de narrativa del Celarg (Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos), experiencia que la llevó a abrir su propio taller de narrativa, que llamó, por su casa en Altamira, “Calicanto”. De allí surgió la publicación de Hojas de calicanto, que recogía los trabajos de los talleristas.

Las últimas publicaciones que realizó fueron Una plaza ocupando un espacio desconcertante (relatos, 1981), Multiplicada sombra (1983), La piedra y el espejo (1985), Ficciones y aflicciones (1989), Largo viento de memorias (1989), Ese oscuro animal del sueño (1991), Hondo temblor de lo secreto (1993

Muerte

Murió en Altamira, en la quinta “Calicanto”, el 13 de marzo de 2001, luego de un período de soledades, acentuado por la pérdida de la audición.

Obra

  • Ana Isabel, una niña decente (1949)
  • Crónicas de las horas (1964)
  • Los insulares (1972)
  • París y tres recuerdos (ensayos, 1944)
  • Viaje al frailejón (crónica de viaje, 1955)
  • Los insulares (1964)
  • Textos del desalojo (1973)
  • El largo día ya seguro (relatos, 1975)
  • Una plaza ocupando un espacio desconcertante (relatos, 1981)
  • Multiplicada sombra (1983)
  • La piedra y el espejo (1985)
  • Ficciones y aflicciones (1989)
  • Largo viento de memorias (1989)
  • Ese oscuro animal del sueño (1991)
  • Hondo temblor de lo secreto (1993)

Fuentes