Chirla a la marinera

Chirlas a la Marinera
Información sobre la plantilla
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Descripción de la receta
Molusco con alto valor nutricional
Género
Primer plato
Ingredientes
chirlas, maicena, aceite, ajo, vinagre, laurel, vino blanco, pimentón, pimienta blanca, perejil.


Chirlas a la Marinera

Chirla: beneficios y propiedades

La chirla es un molusco bivalvo, los cuales pertenecen a la familia de los Veneridae del orden de los Eulamelibranchia. Son realmente parecidos a los berberechos y a las almejas, precisamente porque su concha presenta una forma avalada realmente característica. Tienden a vivir en zonas poco profundas en mares de agua salada, aunque también es posible encontrarla en zonas de fango y fondos arenosos. Aunque es posible encontrarla todo el año, lo cierto es que con mayor habitualidad las chirlas se comercializan sobretodo durante los meses más calurosos del año (durante el verano, para ser precisos, aunque se puede encontrar desde el mes de mayo, hasta julio).

Propiedades nutricionales de la chirla

Desde un punto de vista nutricional, la chirla es un marisco que aporta la mayoría de los beneficios nutricionales y nutrientes esenciales que aportan la mayoría de moluscos, como es el caso de los berberechos y las almejas. Esto se traduce en que es un molusco bajo en grasas y calorías. De hecho, 100 gramos de chirla aportan sólo 1,3 gramos de grasa y apenas 54 kilocalorías. También es rica en proteínas de alto valor biológico, lo que significa que aporta la mayoría de aminoácidos esenciales. Su contenido en colesterol es algo alto (113 mg), de forma que su consumo debe ser puntual en aquellas personas que presentan altos niveles de colesterol alto. Respecto a su contenido en vitaminas, aporta sobretodo vitaminas del complejo B (B1, B2, B3, B6 y B12), así como vitamina A. También es un marisco muy rico en minerales, entre los que podemos destacar el potasio, sodio, fósforo, magnesio y en menores cantidades calcio y hierro.

Ingredientes

  • 1 kilo de chirlas
  • 30 g de aceite de oliva virgen extra = 3 cucharadas soperas
  • 40 g de ajo picado = 13 dientes
  • 15 g de maicena = 1 cucharada sopera
  • 100 ml de vino blanco = 10 cucharadas
  • 1 hoja de laurel
  • Pimienta blanca recién molida y sal si hace falta
  • 2 cucharadas soperas de perejil picado

Modo de preparación

Elaborado en Microondas

Lavar abundantemente con agua fría las almejas o las chirlas para retirar la posible suciedad, volcarlas en un recipiente amplio y cubrirlas de agua con sal. Mantenerlas así unos 30 minutos para que expulsen la arena que pueden llevar en su interior.

Poner en un recipiente (amplio, redondo, bajito y con buena tapa) el aceite y los ajos picados, mezclar todo bien y programar 1 ó 2 minutos a la máxima potencia. No deben dorarse demasiado porque se endurecen y se pueden quemar.

Escurrir las almejas o las chirlas y ponerlas en el recipiente con los ajos, añadiendo una hoja de laurel. Remover de nuevo, tapar y programar 5 minutos a potencia máxima.

Disolver mientras tanto la maicena en el vino blanco.

Cuando el tiempo programado haya terminado, añadir el perejil picado, un poquito de pimienta blanca recién molida y maicena disuelta. Remover y programar 2 minutos a la misma potencia para que la maicena no sepa a crudo.

Comprobar el punto de sal, puede que no sea necesario añadir, puesto que los moluscos cocinados en el microondas conservan su sabor a mar.


Fuentes

  • Villapol, Nitza: Colección. Cocina al minuto. Editorial científico- Técnica, La Habana, 2004. ISBN 959-05-0369-1.
  • Artículo [http//:natursan.net/chirla-beneficios-y-propiedades/