Enidio Díaz Machado

Revisión del 11:09 4 may 2018 de Viltre (discusión | contribuciones)
(dif) ← Revisión anterior | Revisión actual (dif) | Revisión siguiente → (dif)


Enidio Díaz Machado
Información sobre la plantilla
NombreEnidio Díaz Machado
Nacimiento22 de Agosto de 1934
Florida, provincia de Camaguey, Bandera de Cuba Cuba
NacionalidadCubana

Enidio Díaz Machado mártir de la revolución cubana, nacido el 22 de Agosto de 1934 en la ciudad de Florida de Camagüey, Cuba, hijo de Juan Andrés Díaz Reyes y Ana Luisa Machado Pérez.

Síntesis Biográfica

Cursa sus primeros estudios este émulo de Martí en las escuelas públicas de esta ciudad, pasando posteriormente al Instituto, en el que comienza el bachillerato.

Es precisamente en este centro docente que, junto con otros jóvenes entre los que descuellan Machadito y Manuel Echevarría, actuando él como dirigente de los grupos de acción, se manifiesta su espíritu de lucha tesonera para el logro de las transformaciones que reivindiquen la honestidad en el centro de estudio a fin que este cumpla con su programa pedagógico al que se añaden las tareas de contenido social.

Inicia su participación en las huelgas estudiantiles en el Instituto de Manzanillo. Es en este otro escenario de sus luchas, en el encuentro frontal con la perra policíaca de los gobiernos de Grau San Martín y Prío Socarras, que muestra su entereza y valentía enfrentándose a su represión sin límites en las calles José M. Gómez y Calixto García. En estos encuentros es detenido, bajado y objeto de maltrato. Encarcelado en múltiples ocasiones. Esto da a su carácter de estudiante pobre.

Muchas veces se le ve con las mismas ropas en la lucha tenaz por alcanzar los objetivos por los cuales se enfrenta sin temor a la brutal represión de los enemigos de las libertades por las cuales ellos luchan.

En estas luchas lo sorprenden el funesto golpe del 10 de Marzo. Como militante de la Ortodoxia acrecienta sus actividades, combate sin tregua las claudicaciones, su acción se hace más rotunda y radical y es junto con Andrés Luján Vázquez (Chibas) que comparte la acción, el día 11 de Marzo de colocar una bomba en la oficina de correos de Manzanillo. A este que lo convierte en hombre ya de acción, se suman sus dotes de orador, es un látigo en las denuncias en su tribuna ortodoxa en la que muestra fogosidad y valentía.

La rebeldía de su carácter, su inquietud e inconformidad con la política del 13 de marzo lo exponen al peligro, ya está chequeado y es perseguido, en compañía de Mario Remón y N. Varona se traslada a San Luís, en Oriente, cuando Fidel asalta al cuartel Moncada con la intensión de unirse a los revolucionarios.

Durante los meses que Fidel estuvo preso, no existe para el reposo, la intensa llama en que se ha convertido la vida de Enidio la quiere hacer llegar a todos los lugares y así destruir todo vestigio de la dictadura.

Unido en el propósito con la juventud de Manzanillo se prepara para nuevas acciones, es detenido, esposado y trasladado a Santiago de Cuba en varias ocasiones pero siempre mantiene una febril y activa lucha.

En Ceiba Hueca

Un pasaje de su vida está enmarcado en su permanencia en el entonces Central Santa Regina situado en Ceiba Hueca y que hoy fiel a su recuerdo lleva su nombre, permanece en esta zona durante seis meses en la que firma un contrato de trabajo por dicho tiempo pero continúa realizando sus actividades revolucionarias en la clandestinidad, esto ocurre en los primeros meses del año 1956.

Muerte

Ya los ecos de la sierra repercuten en el llano Enidio se une a los grupos rebeldes en Canabacoa lugar por donde hace contacto con los rebeldes. Regresa a iniciar contactos, repartir proclamas y marcha para la Habana donde continúa su lucha. Allí se le asignó la misión de ajusticiar a un traidor de apellido Reverito para la ejecución del delator asalta conjuntamente con otros compañeros la estación de policía de Marianao el 8 de noviembre de 1958, situado detrás de un poste se bate herido con los sicarios de Ventura, es capturado y posteriormente asesinado. Su cuerpo no fue encontrado jamás.

Hoy aunque no puede llevarse una flor a su tumba para honrar su memoria está presente en cada cubano que ama a su patria. Está vivo en cada una de las realizaciones de su pueblo por las cuales luchó y contribuyó con su acción y vida.

Ver además

Fuente