Guillermo González Arocha
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Guillermo González Arocha. Sacerdote patriota quien tuvo su integración a la historia de Artemisa. Desde el comienzo de la Guerra del 95 se vincula con las fuerzas insurrectas y es designado Sub Delegado. Después de su muerte se le brindaron honores militares de acuerdo con la jerarquía ganada en la guerra
Sumario
Infancia
Nace el 25 de junio de 1868 en la Villa de Regla.Hijo de Don Antonio González Galvez, Practicante de Primera del Cuerpo de la Armada Española y de la Sra Josefa Arocha Castillo, Siendo muy niño, sus padres se trasladaron para Guanajay y allí cursó sus primeras letras con el afamado pedagogo Francisco Valdés Ramos.
Estudios de Sarcedote
En el Seminario de La Habana estudia el bachillerato. Cursa estudios de Teología y de Derecho Canónico. Se ordena de Sacerdote. En 1891 es nombrado Capellán de los Hospitales de Matanzas, pero en 1892, tiene un rozamiento político con el Gobernador Militar de dicha Plaza y dado su espíritu de justicia y sentimientos de cubanía, abandona aquella misión.
Integración a la historia de Artemisa
En ese mismo año se le designa como Teniente - cura de la Villa de San Antonio de los Baños y seguidamente se le asciende a párroco del pueblo de Ceiba del Agua. En 1893 obtiene, en propiedad, la Parroquia de Artemisa. Desde el mismo momento en que toma posesión de esta, comienza a laborar por el progreso de su iglesia y por su propia integración a la historia de Artemisa.
Las visitas a sus feligreses y su participación en los actos sociales y culturales, eran cotidianas. En estos se relacionaba con las personas que después lo ayudarían a crear múltiples obras, entre ellas la ampliación de la iglesia y la construcción del primer parque, el que más tarde destrozarían los militares españoles antes de retirarse de Artemisa en 1898.
Labor patriótica
Desde el comienzo de la Guerra del 95, González Arocha, se vincula con las fuerzas insurrectas y es designado Sub Delegado de la provincia de Pinar del Río, en representación del Jefe del Cuartel General del 6to Cuerpo.
Con la llegada de columna invasora a la provincia pinareña, González Arocha, en unión a la Patriota Magdalena Peñarredonda, incrementa su lucha en apoyo de las tropas mambisas, transportando medicinas, otros útiles y correspondencia desde la Habana hasta la manigua, tarea en la que exponía diariamente la vida.
Merece destacarse la actitud del Padre Guillermo González Arocha ante los horrores de la criminal reconcentración de campesinos que fuera ordenada por el déspota Valeriano Weyler, Capitán General Español en Cuba y donde por gestión personal suya, se construyeron en Artemisa, en un camino adyacente al perímetro urbano del poblado, unos barracones que sirvieron para que los reconcentrados, arrojados a las calles del pueblo, pudieran guarecerse y aliviar los padecimientos e injusticias que sufrían.
Relación con Manuel Valdés
También son memorables sus posiciones y sus acciones para evitar el fusilamiento del joven mártir artemiseño Manuel Valdés, al que los Españoles ejecutaron el 6 de octubre de 1896, en uno de los muros del antiguo cementerio, donde actualmente se encuentra la ESBUC que se honra con su nombre.
En 1927 renunció a su parroquia de Artemisa para ocupar otros cargos, como el de Rector del Seminario de la Habana.
Condecoraciones
Al terminar la guerra le fue concebido el título de Veterano, considerado como un alto oficial del Ejército Libertador y años después poco antes de su fallecimiento fue condecorado con la gran Cruz de Carlos Manuel de Céspedes.
Muerte
Al fallecer el 1 de abril de 1939, ocupaba el cargo de administrador de la Catedral de la Habana y les fueron rendidos honores militares de acuerdo con la jerarquía ganada en la guerra.
Fuente
- Asociación de Combatientes de Artemisa.
- Biblioteca Municipal de Artemisa.
- Biografía de Monseñor Guillermo González Arocha, por José Pérez Gomez. Febrero 24 de 1943. Artemisa.
