Lucha contra bandidos en el municipio Elia (provincia de Las Tunas)
Lucha contra bandidos en el municipio Elia  | |
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La lucha contra bandidos en el municipio Elia actual municipio Colombia fue seguido por la hostilidad del imperialismo y la reacción interna, quienes organizaron la contrarrevolución; así surgieron organizaciones y bandas contrarrevolucionarias a lo largo y ancho del país.
Sumario
Antecedentes
El imperialismo estadounidense, con la esperanza de dañar la Revolución cubana trató de privar a Cuba de técnicos y profesionales. Para ello estimuló la salida legal o ilegal del país, ofertándole grandes sumas de dinero, mejores salarios y de todos tipos de comodidades. Desde el municipio Elia marcharon hacia Estados Unidos, Guillermo Alemán (jefe de fabricación del central azucarero) y el personal calificado de las oficinas de dicha fábrica, Engelberto Bolaño (ingeniero agrónomo, y jefe de campo en la localidad), y otros innovadores, médicos y maestros.
La Revolución adoptó como medidas para la sustitución de aquel personal, la preparación inmediata de la población y la promoción del personal calificado que asumieran las responsabilidades abandonadas.
Inicios
En diciembre de 1961, el ex soldado rebelde José Manuel Calica Otero Corrías, a través del excasquito Noel Escalante estableció contacto con los elementos de la organización contrarrevolucionaria Resistencia Agramante, y comenzó a conspirar dentro de la misma, siendo nombrado sargento de primera.
Esta agrupación tenía entre sus planes crear un grupo armado como oposición activa al desarrollo revolucionario, y con ese objetivo orientaba el acopio de armas. En el municipio Elia estaba dirigida por Felo Romero Rafael Cabrera Palma, quien intentaba nuclear a elementos desafectos de los poblados y las zonas campesinas en los municipios de Guáimaro y Santa Cruz del Sur (ambos en la provincia de Camagüey).
Al poco tiempo, Calica se vinculó a sujetos que respondían a las organizaciones contrarrevolucionarias FND (Frente Nacional Democrático) y FAL (Frente Anticomunista de Liberación), siendo nombrado coordinador militar de esta última en la zona de Elia. Con este grupúsculo planeaba abandonar clandestinamente el país, plan que no materializó por carecer de medios apropiados.
A principio de 1962 el FAC le ordenó viajar a La Habana, donde se entrevistó con el contrarrevolucionario Evelio Duque, quien le orientó organizar focos guerrilleros en la zona donde radicaba. A su regreso al municipio Elia, Calica se enteró de que era buscado por el DSE (Departamento de Seguridad del Estado), por lo que decidió pasar a la clandestinidad. Recogió en su casa una ametralladora San Cristóbal que le había entregado el contrarrevolucionario Marcelino Megueravy Rey, y se marcha hasta la casa del agente Armando Ramos Viamonte en la Casimba (Central Francisco). Este sujeto acepto esconderle el arma mientras Calica se trasladó a Guayabal, escondiéndose en casa del suegro.
Composición de las bandas
Durante su permanencia en Guayabal fue visitado por el contrarrevolucionario Ramiro Bacallao, de la organización FAL (Frente Anticomunista de Liberación), quien le comunicó que el conspirador Antonio Alburquerque tenía dos ametralladoras San Cristóbal y estaba dispuesto a entregarlas al movimiento, por lo que días más tarde Calica José Manuel Otero ―en el vehículo de Noel Escalante― se trasladó hasta la casa del miembro del FAL Antonio Conde González, en Berrocal (municipio Colombia). De aquí envió a sus primos Adolfo y Carlos Romero, acompañados de Noel Escalante, a buscar las armas. Ambos cumplieron el encargo y les trajeron dos ametralladoras San Cristóbal, que se encontraban en mal estado de conservación. Calica, que era armero, las arregló y limpió, trasladándolas posteriormente para la casa de Armando Ramos en Las Casimbas.
En abril de 1962, el DSE conoció que Calita había decidido alzarse y formar una banda compuesta por Armando Ramos, Manuel Candía y él. Días más tarde se unieron a la banda Beto Birella y Juan Víctor Rodríguez Reyes que antes habían sido colaboradores y contactos entre Calica y los miembros del FAI.
La banda adoptó una estructura similar a la utilizada por el Ejército Rebelde, Calica (José Manuel Otero Corría) se nombró jefe de la misma con los grados de capitán siendo su segundo Armando Ramos Viamontes con los grados de teniente, se movieron en una extensa zona campesina, donde contaban con un nutrido grupo de familiares y elementos contrarios al proceso revolucionarios que le brindaban colaboración, pero a pesar de contar con una gran ayuda por parte de la contrarrevolución de la zona donde operaba la banda no emprendió ningún tipo de acción aunque en sus planes estaba la eliminación física de militante revolucionario, nunca intentaron materializar sus proyectos al respecto, más bien evitaron todo encuentro con la oposición revolucionaria.
Principales acciones
A los pocos días de estar alzado, Manuel Candía deserto de la banda que ve reducida su composición a cuatro elementos así se mantuvieron hasta 15 de septiembre de 1962 en que fueron localizados por el DSE en las Casimbas, donde después de un encuentro a tiro con las fuerzas revolucionarias caen en combate dos bandidos.
Los sobrevivientes Calica José Manuel Otero y Ramos se dedicaron a evadir la persecución se movieron constantemente por la Federal, El Bagá y Berrocal, siendo suministrado por colaboradores en estos lugares.
El 23 de enero de 1964 abordó una embarcación controlada por el Departamento de Seguridad del Estado, siendo capturado momentos después, ocupándosele una pistola calibre 45. Este hecho se produjo en Santa Cruz del Sur. Calica fue condenado por los tribunales revolucionarios a 30 años de privación de libertad.
El 8 de septiembre de 1962 se fundó el sector de la Lucha Contra Bandidos (LCB) en la provincia de Camagüey encabezado por el capitán del ejército regular Francisco González Puig.
En el territorio camagüeyano se constituyeron 8 subsectores ―entre ellos el número 4, ubicado en Elia, con una compañía y su jefatura compuesta por 87 y 16 milicianos respectivamente―. Nelson Hernández Betancourt era el responsable de este subsector quien ostentaba los grados de segundo teniente de las Milicias Nacionales Revolucionarias (MNR), mientras que Luis Armero Velásquez era el jefe de información. El jefe de la seguridad de la provincia situó en cada subsector a uno de sus combatientes en ella le asignó la tarea a Fermín Soler Camejo.
Plan de captura
En horas de la noche del 7 de noviembre de 1962, Benigno Patato Domínguez desertor del Ejército Rebelde y el exsoldado rebelde Mario Chiquitico Leal se dirigieron al cuartel de milicia de San Rafael, y con el pretexto de llevarle café, con el cuchillo lograron sorprender y desarmar a los milicianos de guardia Saturnino González y Sabino Ramos, apoderándose de un fusil R-2 con dos cargadores y 20 cápsulas y una escopeta calibre 44. Esa misma noche se trasladaron hasta la tienda de la ANAP, en las Gordas y desarmaron, con ayuda de los fusiles que habían obtenido a los milicianos de la guardia Luis Lemes Lemes y Francisco Caballero Pérez. Con esta acción se apoderaron de dos revólveres calibre 38 con 6 cápsulas cada uno. Ya logrado sus fines de armarse, se internaron en los cañaverales de Berrocal, zona donde tenían pleno dominio.
Allí establecieron contacto con el pequeño agricultor Alberto Santiesteban Frontella, quien les suministró víveres y los encaminó hasta la finca El .Senegal, en Elia, donde residía el pequeño agricultor Francisco del Sol García, elemento no integrado al proceso revolucionario, quien les proporcionó alberge y suministró productos a los bandidos. Además los escondió en una cueva cercana a su casa.
Estos dos contrarrevolucionarios alzados tenían planes de unirse a la banda de Calica José Manuel Otero Corría y empleando las tácticas guerrilleras utilizadas por el Ejército Rebelde establecieron una amplia red de colaboradores como fuerza de sustentación al desarrollo de la lucha armada contra la Revolución, a tales efectos hicieron contacto con Dioscorides Corín Pintado Sánchez, inspector de hacienda en el municipio de Guáimaro, que residía en Elia, y que pertenecía a la organización contrarrevolucionaria FAL (Frente Anticomunista de Liberación), la que le envió dinero y suministros. El 8 de diciembre de 1962, en la finca de Francisco del Sol dentro de un escaparate de la casa del colaborador de Del .Sol, fueron capturados por fuerzas de la LCB (Lucha contra bandidos) los elementos Patato y Chiquitico, ocupándosele las armas que portaban.
El 10 de diciembre de 1962, ambos fueron puestos a disposición del Tribunal Revolucionario, que los condenó a la pena de muerte mediante fusilamiento, ejecutándose la misma el propio día. Posteriormente fueron juzgados y sancionados sus colaboradores.
Fuentes
- Batista, Germán (2011): «Acontecimiento histórico de la lucha contra bandidos en Elia» (curso 2010-2011).
- http://www.granma.cu/cuba/2015-08-17/la-lucha-contra-bandidos-una-leccion-inolvidable
