Selva de Oza

Revisión del 18:06 14 ene 2020 de Yaima06028 jc.ssp (discusión | contribuciones) (Página creada con «{{Ficha territorio |Nombre=Selva de Oza |Mapa= Selva_de_Oza.jpg |Población=<!-- opcional --> |Gentilicio=<!-- opcional --> |Países={{Bandera2|España}} |Dependencias=<!--…»)
(dif) ← Revisión anterior | Revisión actual (dif) | Revisión siguiente → (dif)

Selva de Oza
Información sobre la plantilla

Selva de Oza.jpg
Países Bandera de España España

Selva de Oza es un espacio natural incluido en el Parque Natural de los Valles Occidentales ubicado en el Valle de Hecho, en la parte occidental del Pirineo aragonés.

Síntesis biográfica

En la cabecera del Valle de Hecho (H.), entre los 1.000 y 1.800 m. de alt., se sitúa una de las masas arbóreas más importantes de Aragón y uno de los parajes más insólitos de nuestro Pirineo: la selva de Oza.

Rodeada de macizos rocosos y encrespados, cuyas cumbres oscilan entre los 2.300 y casi 2.700 m., reúne una amplia gama policroma de recursos naturales que constituyen la base económica del valle, y unos valores paisajísticos y agrestes de gran atractivo para excursionistas, montañeros y turistas.

Allí se encuentran los mejores montes de Coníferas de Aragón, entremezclados con Hayedos y pinares, que proporcionan más de 13.000 m.3 anuales de madera a los habitantes del valle. Esta madera es aserrada, transformada y comercializada en la serrería de la «Explotación Forestal», que funciona como servicio municipalizado, dando trabajo a la mayoría de las familias. Existen además Tejo, Arce, Abedulares y otras especies arbóreas variadas. Como complemento de la floresta hay una multiplicidad de arbustos entre los que predomina el Boj y una inmensa variedad de hongos, bayas, frutos y flores que se van alternando a lo largo del año aportando un atractivo misterioso y salvaje. Los grandes pastizales situados entre la selva (llamados camones) y donde ésta termina, alimentan una rica cabaña de ganado vacuno, ovino y caballar, propiedad de los vecinos.

Por la selva pueden encontrarse desde osos hasta urogallos, pasando por sarrios (o rebecos), corzos, jabalíes, tejones, martas, garduñas, zorros, gatos monteses, ardillas e incluso nutrias. Sobrevolando los altos riscos pueden verse quebrantahuesos, buitres, águilas y rapaces de múltiples especies. Las aguas del Río Aragón Subordán, aparte de encerrar una gran belleza por su transparencia y variedad de trazado (cañones, estrechos, cascadas, vados, etc.), hacen la delicia de los pescadores con su trucha asalmonada.

El núcleo central de la selva, dada su configuración abierta y su variedad paisajística, puede considerarse como el centro del turismo, contando con un camping, un campamento fijo para la juventud y algunas instalaciones de hostelería cuya proliferación ha sido frenada en pro del mantenimiento y conservación de los valores ecológicos y naturales.

Al acceder a Oza desde la Villa de Echo y Siresa, la primera curiosidad natural que se encuentra es el camino y desfiladero de la «Boca del Infierno»: una abertura en la roca que, debido a la erosión, ha dado paso al cauce del río dividiendo la cadena montañosa que formaban los macizos de Peña Forca y Agüerri. Al pico de Peña Forca (de 2.390 m.) puede subirse por diversos accesos más o menos difíciles, bien mediante escalada o bien mediante excursiones y travesías por los altos puertos y pedregueras. Agüerri (2.450 m.), tiene magníficos atractivos para escalada de alta montaña, con algunos mallos o agujas que jamás han sido coronados por ningún escalador. La confrontación oriental del valle tiene como fondo los macizos de Acher, Cemagüerri, Costatiza y el Pico de Visaurín (este último con 2.668 m.), terminando en las peñas de Marcantón y Contienda.

Al oeste (y como separación del Valle de Zuriza), se encuentra el puerto de Estriviella con el puntal de Alano y los macizos de Tortiella, Sayéstico y Chipeta.

El norte de la selva confronta con el valle de Guarrinza y tiene como fondo las crestas del Acherito (con el hermoso ibón del mismo nombre) y la cadena divisoria de la frontera con Francia. Esta parte norte permite efectuar maravillosas excursiones, entre las que caben destacarse las del circo francés de Ansaver (y sus famosas agujas), el circo de Aguas Tuertas y el Ibón de Estanés. También hay varios pasos a Zuriza a través de los collados de Petraficha, Anzotiello, Quimboa, Gamueta, Acherito y Petrachema.

En la selva de Oza hay vestigios abundantes de civilizaciones megalíticas tres grandes dólmenes (Dolmen) que continúan hacia el noroeste por Guarrinza y Aguas Tuertas.

Destacan, por último, los restos de una de las Vías romanas citadas en el Itinerario de Antonino Pío que fue utilizada no sólo para invasiones, sino también como uno de los caminos de peregrinación a Santiago de Compostela (Camino de Santiago).

Fuentes