Aberdeen angus
|
Aberdeen angus. Raza que en el actual mundo ganadero es conocida como Angus, se caracteriza por su sobresaliente fertilidad y aptitud materna, gran precocidad sexual y productiva, alta capacidad de crecimiento y excelente rendimiento al gancho con carne de insuperable calidad.
Sumario
Origen
Alrededor del año 1500, en los condados escoceses de Aberdeen y Forfar -parte del cual era conocido como Angus-, se comprobó la existencia de un tipo de ganado vacuno rústico, mocho y de pelajes negro y colorado, que debido a sus notables atributos productivos se difundió rápidamente en Gran Bretaña, Irlanda, Estados Unidos, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Argentina y en el resto de los países ganaderos del mundo.
En 1862 se publicó por primera vez el Polled Cattle Herd Book, es decir el registro genealógico para la hacienda mocha. Los primeros cuatro tomos incluían, conjuntamente y sin distinción de negro o colorado, a los animales Aberdeen angus -reconocida oficialmente como raza en 1867- y Galloway, pero más tarde, los criadores de esta última raza adquirieron la sección correspondiente a sus animales, separándose ambos registros.
Las cualidades carniceras del Aberdeen angus fueron reconocidas en exposiciones y concursos. Así, por ejemplo, participó en el prestigioso Smithfield Show desde 1891 hasta 1955. De los 333 campeones en distintas categorías, 158 fueron Aberdeen angus puros y 107 cruza, mientras que Shorthorn ganó 40, Galloway 14, Hereford 9, Devon 4 y Welsh Black. A esto hay que sumarle que los criadores preferían las vacas Aberdeen angus con manchas blancas en las ubres, pues las consideraban buenas lecheras. Prueba de ello fue que la raza participó en la Exposición Lechera de Londres hasta 1914.
Adaptabilidad
Como raza dura se adapta a zonas donde la altura sobre el nivel del mar supere los 5.500 metros, y cruzándola con razas cebuínas tipo Brahman tiene un mayor rango de adaptación, es decir desde el nivel del mar.
Características generales
El Angus es una raza productora de carne, reconocida por su precocidad reproductiva, facilidad de parto, aptitud materna y longevidad. Los ejemplares de la raza deben poseer ser voluminosos, de buena profundidad, con buenas masas musculares y producir carne de buena calidad (veteada, tierna, jugosa, sabrosa, etc.). El temperamento debe ser activo, no agresivo, y ágil en sus desplazamientos, demostrando aplomos correctos y articulaciones fuertes. La piel debe ser medianamente fina, elástica, cubierta de un pelaje suave, corto y tupido de color negro o colorado.
Tamaño
Alejado de los extremos. Este tamaño intermedio le da equilibrio, funcionalidad y facilidad de terminación a pasto, así como también le permite ser muy eficiente en engorde a corral.
Masa muscular
La musculatura debe ser suficientemente desarrollada y adecuada; su volumen muscular no debe ser excesivo para no afectar la fertilidad en las hembras, una de las principales características de la raza. Al decir masas musculares, significa que cuando se observa un animal terminado, se observe un conjunto de músculos indiferenciados formando su cuarto, su lomo, etc., sin notarse excesiva diferenciación intermuscular. El lomo debe ser bien ancho (buen ojo de bife) y los cuartos largos, con músculos bien descendidos hacia los garrones. En las hembras, las masas musculares de la paleta no deben ser prominentes y los cuartos musculosos pero en su expresión justa, es decir no excesiva para no desmerecer su función reproductiva.
La corrección de sus aplomos es esencial para su funcionalidad. El sistema pastoril exige grandes desplazamientos. Teniendo en cuenta que la cría está ubicada en zonas de restringida oferta forrajera, de baja receptibilidad ganadera o en campos extensos, el buen desplazamiento es indispensable.
Profundidad corporal
La raza debe tener como biotipo una buena profundidad corporal, dada por el largo y buen arco costal, permitiéndole una mayor capacidad ruminal. La buena capacidad ruminal le permite incorporar importante cantidad de pasto que luego lo utilizará en su engorde o, en el caso de las madres, para optimizar su eficiencia reproductiva y producción lechera.
Expresión
En el macho, la expresión de masculinidad está ligada al buen tamaño de sus testículos, fuerte masa muscular a nivel del cogote y peleche bien temprano. En la hembra, la expresión debe ser de gran feminidad, de cabeza pequeña y cogote suave bien insertado al cuerpo.
Cabeza
En las hembras debe ser chica y afinada y con orejas medianas levemente inclinadas hacia arriba y con buena pilosidad. La del macho debe ser con morro fuerte y buena expresión en las mandíbulas. El ancho debe ser orientativamente dos tercios respecto del largo, más redondeada y ancha que la de la hembra y con orejas más chicas. En ambos, mocha y con poll bien marcado.
Cogote
En la hembra, de buen largo y fino y con suave inserción en la cabeza y cuerpo, mientras que en el macho, más ancho y con mayor prominencia superior (testuz).
Cuerpo
Bien profundo, con gran arco costal, largo y con lomo ancho.
Cadera
En las hembras, ancha y con buena apertura de ísquiones (canal de parto). En el macho, sólida y plana a nivel del cuadril. Para ambos, sin polizones en la inserción de la cola.
Pecho
Tanto en machos como en hembras se acepta cierta adiposidad no excesiva. Este leve engrasamiento está ligado a una mejor funcionalidad.
Cuartos y nalgas
Anchos, profundos, de musculatura sólida no exagerada (sobre todo en las hembras), largos y lo más descendidos posibles a nivel de la babilla (tercio distal).
Garrones
Sólidos, netos y bien angulados. En el macho, además, fuertes.
Manos y patas
Medianas, bien aplomadas con hueso fuerte, y separadas indican buena aptitud carnicera.
Paletas
Con tendencia a paralelas y no angulosas (vistas de arriba), indicando buen ancho de lomo. La musculatura exterior debe ser sólida, no exagerada, de lo contrario comprometería su facilidad de parto.
Piel
De espesor fino, y pelo suave y corto.
Testículos
Bien descendidos y sin exceso de grasa escrotal.
Ubre
De tamaño intermedio, no excesivamente cubierta de pelos, correctamente conformada e implantada, con cuartos bien desarrollados y simétricos y con pezones finos de tamaño medio.