Arturo de Carricarte

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Arturo de Carricarte
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Arturo de Carricarte
NombreArturo R. de Carricarte
Nacimiento6 de noviembre de 1880
La Habana Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento8 de noviembre de 1948
La Habana, Bandera de Cuba Cuba
NacionalidadCubana
CiudadaníaCubana
OcupaciónPeriodista
Escritor
Diplomático
Conocido porBlas Gil
Segundo Valbuena
A. R. de Castro
Arracerit

Arturo R. de Carricarte. Periodista, escritor y diplomático cubano. Estudioso de la vida y obra del Héroe Nacional cubano José Martí Pérez. A lo largo de su vida utilizó los seudónimos de "Blas Gil", "Segundo Valbuena", "A. R. de Castro" y "Arracerit".

Su múltiple acción literaria la desplegó en La Habana y Marianao sin desvincularse de instituciones, periódicos y amistades de ambas densidades culturales y de los países que visitó.

Se distinguió como periodista dentro y fuera de Cuba. En Veracruz, México trabajó en la Revista Martiniana y en El Mundo Artístico. Fue editor en idioma español de The Havana Post y escribió y colaboró en El Fígaro, Bohemia y el periódico El Mundo.

Síntesis biográfica

Nació en La Habana, 6 de noviembre de 1880. Desde temprana edad mostró inclinación por la escritura a la que dedicó gran parte de su vida. Sus primeros estudios los realizó en su ciudad natal, donde se graduó de bachiller en 1894.

En 1909 ingresó en el servicio diplomático y ocupó el cargo de cónsul de Cuba en Montevideo y también trabajó como profesor en la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana. En 1920 fundó la Biblioteca Municipal de La Habana, la cual dirigió hasta 1931.

Residió en La Habana, antes de instalarse en Marianao donde fundó una familia de la cual nunca se separó. A una cuadra del antiguo Ayuntamiento de ese municipio, hizo levantar un "bungalow" de madera de dos plantas, adonde acudían los jóvenes intelectuales de la ciudad, no sólo a compartir su conversación, sino también su biblioteca.

Contribuyó al desarrollo de la identidad de la nación desde su visión de contradictorias confluencias. En La Habana formó parte del notable grupo de literatos y académicos en el que sobresalieron, entre otras, figuras como José María Chacón y Calvo, Antonio Sánchez de Bustamante, Rafael Montoro, Mario Guiral Moreno, Raimundo Lazo, José Manuel Carbonell, Miguel Ángel Carbonell y José Silverio Jarrín.

En Marianao mantuvo estrechas relaciones con César San Pedro y Romero, director del periódico El Sol; Rubén Alfonso Quintero, fundador de la Biblioteca Municipal Enrique José Varona, el historiador Fernando Inclán Lavastida y los jóvenes miembros del "Grupo Ariel".

Defensa de la casa natal de José Martí

Al inaugurarse la República de Cuba en 1902, Carricarte defendió los derechos de la madre del héroe de la independencia, José Martí sobre la casa natal de éste. Al fallecer Doña Leonor Pérez un 9 de junio de 1907, se decide mantener alquilada la casa y no declararla propiedad del pueblo para socorrer a los cinco nietos (sobrinos de Martí) hasta que finalizaran su educación; no siendo hasta 11 años después de la muerte de la madre del Apóstol cubano, en que el inmueble fue inscrito al nombre del pueblo cubano; antes no se había considerado oportuno por hallarse la República bajo gobierno provisional de Estados Unidos.

Lamentablemente con el tiempo la casa se convirtió en casa de vecindad deviniendo en un completo deterioro y abandono; por lo que a partir de su declaración como patrimonio del pueblo cubano, se comenzaron las gestiones para lograr que se convirtiera en lo adelante en el santuario de veneración de todos los cubanos hacia el Héroe de Dos Ríos.

Tuvo un protagonismo esencial en estas gestiones Arturo de Carricarte de Armas, periodista quien comenzó por inquirir del notario público e historiador Emeterio Santovenia un dictamen que diera fe del avanzado estado de deterioro de la casa e inició gestiones con el Alcalde de La Habana, Marcelino de Villegas, también masón, para su reparación, previo desalojo de los ocupantes, pues se corría el riesgo de su completa destrucción; este desalojo al fin se ejecutó.

Para el respaldo de todas estas gestiones, Carricarte concibió la idea con otros seis integrantes de la logia Guáimaro y uno de la real logia Humildad de Guantánamo, de crear una Logia que denominaron HABANA y cuya fundación se realizó en la significativa fecha del 28 de enero de 1921, eligiéndose a Carricarte como su primer Venerable Maestro, con el objetivo principal, además del respaldo institucional, lograr el apoyo y contribuciones de la Fraternidad, ya que no se disponía de presupuesto estatal alguno. Todas estas acciones lograron que el 12 de mayo de 1921 se materializara la entrega de la casa a la Logia HABANA, por parte del Alcalde de La Habana ya referido.

Con sus ulteriores acciones la Logia Habana, además de depositaría de ese legado oficial y público del cuidado de la casa; logró que con la participación de toda la masonería cubana que respondió con sus contribuciones y apoyo a los requerimientos del momento; a los 24 años de adquirirse y con más de 5 años de incansable esfuerzo, se inaugura la casa como Museo un 28 de enero de 1925.

En todo este período Carricarte desarrolló una febril actividad en su acondicionamiento, donando incluso objetos y documentos originales de su propiedad que habían pertenecido a José Martí o sus familiares en vida; asumiendo además desde la fecha de inauguración en 1925, la dirección del Museo, cargo que ocupó hasta su muerte en 1943.

Carrera literaria

Su múltiple acción literaria la desplegó en La Habana y Marianao sin desvincularse de instituciones, periódicos y amistades de ambas densidades culturales y de los países que visitó.

Por años se desempeñó también como editorialista de El Triunfo. En 1913 escribió la novela Historia de un vencido y La Academia Nacional de Artes y Letras lo galardonó con el "Gran Premio de Literatura".

Escribió otros textos narrativos Noche trágica y Azul, así como numerosos ensayos de interés, entre los que se destacan: Por qué es del pueblo cubano la casa en que nació Martí; El Dictador, (sobre el desarrollo de la enseñanza en América); Lo que dice y lo que no dice el Manifiesto de Montecristi; Cubanas inmortales, Bernarda Toro de Gómez.

Sus textos sobre José Martí son numerosos. Además del antes citado, publicó trabajos que permiten ahondar en los complejos matices de sus valoraciones, entre ellos: Honremos a Martí (1922), Martí en Isla de Pinos (1923), Iconografía del Apóstol José Martí (1925), La cubanidad negativa apóstol Martí (1934) y Martí y el leonismo (1939).

Muerte

Falleció el día 8 de noviembre de 1948, en Marianao, a los 68 años de edad, en plena vitalidad creadora, pues ocupaba, los cargos de Presidente de la Asociación de Periodistas y Escritores, Historiador Oficial de la Ciudad y Presidente de la Sección de Cultura de la Logia Estrada Palma.

Fuentes