Fábrica siderúrgica de Völklingen

Fábrica siderúrgica de Völklingen
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Nombre descrito en la Lista del Patrimonio de la Humanidad.
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Fábrica siderúrgica de Völklingen
Coordenadas49°14′39.984″N 6°50′60″E
PaísBandera de Alemania Alemania
TipoHistórico-Cultural
RegiónEuropa
Año de inscripción1994 (XVIII sesión)

La fábrica siderúrgica de Völklingen se encuentra en la ciudad del mismo nombre, en la región de la Sarre, en Alemania, muy cerca de la frontera con Francia, es el único complejo industrial de Europa occidental y América, dedicado a la fundición y tratamiento de acero, que se conserva en su estado original, prácticamente intacta desde que cesó operaciones en 1986. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1994.

Descripción

La fábrica domina toda la ciudad, ocupando seis hectáreas, unos 600 000 m² de superficie. Cuenta con seis grandes altos hornos, una sala de enfriamiento de más de 6000 m² de superficie, una planta de alimentación de casi 30 m de altura, recuperadores de aire caliente de 45 m de alto, y un ascensor en pendiente.

Una vista de la siderúrgica.

La historia de la fábrica

Fundada por el ingeniero Julius Bruch en 1876, originalmente estaba destinada a la producción de vigas y rieles de acero para el ferrocarril, recibiendo el mineral de hierro de las minas de Luxemburgo.

Debido a los altos impuestos de aquel momento, se cierra por un tiempo la fábrica y más tarde es vendida a Carl Röchling quien construye el primer alto horno e introdujo un grupo de innovaciones, como el empleo de la gasolina como combustible. A partir de esas inversiones, en 1911 la fábrica se convierte en la primera productora de vigas de acero de toda Alemania, fabricando también fertilizantes, amoniaco, y bencina, entre otros subproductos de la combustión.

Durante la Segunda Guerra Mundial, trabajadores de Bélgica, Italia, Luxemburgo, Países Bajos y Rusia, entre otros países, laboran en la siderurgia, muchos en pésimas condiciones de trabajo.

Al finalizar la guerra los franceses asumieron la administración de las fábricas, y unos 17000 obreros trabajaban en la fundición, lo que fue un récord de la historia de la industria.

Una vista de la magestuosidad de la fábrica.

Después de su clausura en el año 1986, se decide la conservación de toda la maquinaria de la fábrica debido a su gran valor histórico; es museo industrial y sirve como centro de investigación y conocimiento sobre la fabricación del hierro y el acero.

En la actualidad, la fábrica de Völklingen se conserva como un parque y museo industrial que atrae a miles de visitantes anualmente (sólo en el año 2000, se estimó que unas 104 mil personas visitaron el lugar), que vienen a impresionarse con las gigantescas instalaciones. Es más un monumento, recuerdo del gran auge de la industria siderúrgica y metalúrgica en el mundo. Se considerada la fábrica mejor conservada del mundo que data de finales del siglo XIX y principios del XX

Fuentes