Hermann Esser

Hermann Esser
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Segundo Vicepresidente del Reichstag
12 de diciembre de 1933 - 8 de mayo de 1945
PredecesorWalther Graef
Datos Personales
NombreHermann Esser
Nacimiento29 de julio 1900
Rohrmoos,Baviera, Bandera de Alemania Alemania
Fallecimiento7 de febrero de 1981
Baviera,Bandera de Alemania Alemania
OcupaciónPolítico
Partido políticoPartido Nazi

Hermann Esser. Fue un ministro de economía local, editor e ilustrador periodístico, propagandista político, subsecretario de turismo y gran orador del NSDAP perteneciente a la vieja guardia de Adolf Hitler.

Síntesis biográfica

Nació en Rohrmoos en Baviera el 29 de julio de 1900. Su padre era un funcionario y Esser recibió su educación secundaria en la escuela secundaria en Kempten. Se unió al ejército alemán durante la Primera Guerra Mundial. Cuando Esser regresó de la guerra, había desarrollado ideas socialistas radicales y creó un consejo estudiantil revolucionario. Sin embargo, este habría sido solo uno de los cientos de nuevos movimientos políticos que se desarrollaron después del Armisticio y habría tenido poca importancia política.

Esser se convirtió en periodista y fue en esta capacidad que conoció a Anton Drexler. A Esser se le reconoce el mérito de haber ayudado a fundar el nuevo NSADP, pero la verdadera fuerza impulsora del nuevo partido provino de Drexler, Gottfried Feder y Dietrich Eckart. Sin embargo, Esser tenía la tarjeta de miembro del partido nº 2 y puede afirmar que es uno de los miembros originales del partido.

Orador

Esser era un orador público muy bueno y era hábil para incitar a la chusma y animar a los hombres a atacar las reuniones políticas de grupos y partidos que él veía mal. Sus discursos públicos se convirtieron en el núcleo de las futuras políticas nazis: nacionalismo extremo, un apoyo a la creencia de 'puñalada en la espalda', antisemita, etc.

Carrera política

Como hombre del partido, era muy valioso para Hitler. Esser no solo se convirtió en el líder adjunto de facto del Partido Nazi, sino que también fue su primer jefe de propaganda. Sus carteles que atacaban al Partido Comunista Alemán eran visualmente brutales y abogaban por la violencia contra ellos. No hay duda de que su enfoque atrajo a un buen número de hombres nuevos al partido. Pero parece que Esser fue un oportunista político. En una ocasión, al no haber sido pagado por su trabajo, Esser amenazó con dejar el Partido Nazi y unirse al Partido Comunista. El daño que esto le habría hecho al grupo incipiente habría sido grave, y Esser lo sabía. Esser también sabía que Hitler sabía que conocía la mayoría de los secretos del partido y que, como líder del partido, Hilter no podía arriesgarse a que se hicieran públicos. Esser se salió con la suya y le pagaron.

“Sé que Hermann Esser es un bribón, pero debo usarlo mientras sea de alguna utilidad. Debo mantenerlo cerca de mí para poder vigilarlo. Puedo usarlo como orador para cierto tipo de público. Pero nunca le daré responsabilidad política ”. (Adolf Hitler)

Si bien Esser pudo haber sido un “sinvergüenza”, Hitler prefirió la compañía de la Vieja Guardia a los nuevos intelectuales que se habían unido al partido, hombres como Otto y Gregor Strasser. Sin embargo, Hitler cumplió su palabra y se negó a darle un trabajo significativo.

En 1920, fue nombrado director del “Volkischer Beobachter”, que entonces era un periódico relativamente desconocido con una circulación limitada. De 1923 a 1925 fue jefe de propaganda.

Curiosamente para un hombre asociado con una gran cantidad de comportamiento ilegal, Esser no participó en el Beer Hall Putsch de 1923. Le dijo a Hitler que estaba enfermo y se quedó en cama mientras se producía el intento de golpe. Hitler estaba furioso y llamó a Esser "un cobarde engreído". Inmediatamente después del fallido golpe de Estado, Esser huyó a Austria. Sin embargo, regresó y visitó a Hitler en la prisión de Landsberg en un esfuerzo por reconstruir algún tipo de relación.

Mientras Hitler estaba en prisión, el Partido Nazi casi se dividió en dos: aquellos que querían cultivar un enfoque más urbano para el apoyo del partido liderado por los hermanos Strasser y aquellos que creían que el partido debería permanecer asociado con la vida rural y la pureza del suelo. . Esser estaba con el último grupo. Cuando Hitler fue liberado, tuvo que hacer todo lo posible para reconstruir el partido antes de que se dividiera en dos grupos. En esto tuvo éxito, pero no erradicó las diferencias en el enfoque ideológico, que surgieron en la conferencia del partido de 1926 en Bamberg. Sin embargo, Hitler sabía dónde estaba Esser y estaba de su lado.

Esser luego se peleó con Julius Streicher. Hitler se puso del lado de Streicher. Esto llevó a Esser a mostrar su verdadero yo cuando amenazó con dejar el partido y difundir sus secretos más profundos, algo que Hitler no podía permitir. Esser fue comprada al convertirse en editor del nuevo "Illustrierter Beobachter". Esser ocupó este cargo durante seis años y parecía haber saciado su deseo de reconocimiento y lo que calificó como poder. El periódico destacó con frecuencia escándalos sociales que lo hicieron popular entre el público. También puso nerviosa a la jerarquía nazi, ya que no estaban interesados ​​en que ninguno de sus escándalos se destacara en público.

A Esser todavía le gustaba el lado excitante de la membresía del partido. En 1928, con solo 28 años, condujo a 500 hombres de las SA a un discurso pronunciado por el ministro de Relaciones Exteriores, Gustav Stressemann, y procedió a romperlo mientras gritaba obscenidades antisemitas. De 1928 a 1932, Esser sirvió en el ayuntamiento de Munich y en el Landtag de Baviera. Cuando Hitler fue nombrado canciller el 30 de enero de 1933, otorgó a Esser varios puestos administrativos en Baviera. Al hacer esto, mantuvo a Esser alejado de Berlín.

En marzo de 1935, Esser fue destituido de estos cargos como parte de las "reformas administrativas". Sin embargo, es casi seguro que se debió a una acusación de que Esser había agredido sexualmente a la hija menor de edad de un importante empresario de Munich. Después de lo que se consideró una cantidad de tiempo adecuada, Esser fue nombrado vicepresidente del Reichstag (diciembre de 1939). Ya ocupaba el puesto sin importancia de Subsecretario de Tráfico Turístico; era poco probable que se esperaran muchos turistas en la Alemania nazi cuando estalló la Segunda Guerra Mundial en Europa.

Arresto

Dentro de la nueva Alemania Occidental, existía un gran deseo de que fuera juzgado como "delincuente mayor". Fue declarado culpable y condenado a cinco años de trabajos forzados con pérdida de los derechos civiles de por vida, cumplió dos años.

Muerte

Falleció en Baviera el 7 de febrero de 1981

Fuentes