Total War Saga: Thrones of Britannia

Total War Saga: Thrones of Britannia
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Duodécimo juego de la serie de videojuegos Total War
Desarrollador(es):The Creative Assembly
Distribuidor(es):Sega
Serie:Total War
Anterior:Total War: Warhammer II
Plataforma(s):Microsoft Windows
Lanzamiento:3 de mayo de 2018

Total War Saga: Thrones of Britannia. Videojuego de estrategia desarrollado por The Creative Assembly y publicado por Sega, lanzado el 3 de mayo de 2018 para Microsoft Windows y el 24 de mayo de 2018 para MacOS. Es el duodécimo juego de la serie de videojuegos Total War.

Campaña

El juego se desarrolla en las islas británicas, empezando en el año 878 d. C. Alfredo el Grande, rey de Wessex, ha conseguido frenar, tras la batalla de Edington, las invasiones vikingas, quienes habían levantado un gran ejército con la intención de conquistar Britania y vengar la muerte del legendario señor de la guerra vikingo Ragnar Lodbrok, ejecutado por el rey de Northumbria en 865 d. C. Aunque se firma la paz, los diferentes reyes de las islas se reaprovisionan y preparan, ya que tanto los vikingos, con sus asentamientos al Norte y al Este, como el crisol de reinos anglosajones, galeses y gaélicos, pronto volverán a la guerra.

Este es el momento temporal elegido por Creative Assembly para su primer spin-off. Gracias a la idea que rodea a estos juegos el estudio se permite modificar sustancialmente algunos de los pilares mecánicos propios de su franquicia. No estamos hablando de grandes cambios como los vividos en Total War: Warhammer (y que nos cuestan dejar de lado) sino en cambios sobre los propios pilares fundacionales. Aunque hablamos de un juego menor dentro de la franquicia Total War no debemos pensar que estamos ante un juego pequeño en cuanto a tamaño o duración. De hecho estamos ante uno de los mapas más densos y complejos de los creados por la compañía sin contar con los experimentos dentro de Total War: Warhammer.

Las islas británicas están divididas en decenas de pequeñas provincias controladas por decenas de pequeñas naciones (sólo podremos controlar las 10 más importantes) y cada pequeño asentamiento o ciudad tiene su propia característica. Thrones Of Britannia modifica ligeramente la organización regional de los Total War al dividir cada provincia en una gran ciudad y pequeños asentamientos; la capital tendrá muchos espacios de construcción y crecerá a medida que ampliamos la ciudad pero los asentamientos quedan relegados a ser pequeños emplazamientos donde construir granjas, minas o edificios que sirvan de apoyo a la provincia. Esto los convierte en objetivos fáciles para los ejércitos enemigos ya que no cuentan con guarniciones propias y serán fácilmente conquistables.

Thrones of Britannia nos pone al frente de 10 naciones divididas entre los Reyes Vikingos, llegados del norte, los pueblos nórdicos ya asentados en las islas, los galeses, los reinos anglosajones o los jefes gaélicos… cada una de estas naciones tendrá su principal líder con el que comenzaremos y su propia agenda oculta con sus objetivos de victoria. De manera similar a lo que hemos visto en las iteraciones de fantasía de Total War en Thrones of Britannia nuestros objetivos para vencer van más allá de conquistar o eliminar a naciones enemigas permitiendo incluso la victoria por “fama” a través de la investigación, tecnología, la construcción y, en general, el buen hacer político de nuestra nación.

Gracias a este pequeño cambio de nuestro objetivo Creative Assembly también se permite trastear con otros pilares fundamentales de Total War; los personajes y lo hace mirando a Crusader Kings en cuanto a gestión de personajes, política y familia. Nuestro líder, el inicial, deberá mantener también su linaje en pie y eso no siempre es tarea fácil. Cada turno nos acercará a la muerte por vejez (o en combate) y nuestros herederos y consortes tendrán que gestionar nuestro reino. Esto hace que nuestros generales y gobernadores deban ser leales si no queremos que nos monten una guerra civil en nuestros momentos de debilidad y debemos asegurar que nuestro primogénito llegue a heredar si no queremos perder el reino a manos de nuestro sobrino. Podemos concertar matrimonios políticos de nuestros descendientes, castigar a vasallos insumisos o premiar a los leales con títulos nobiliarios.

Sin llegar a la profundidad de los títulos de Paradox se agradece la inclusión de un aspecto más político en el desarrollo de los personajes. Creative Assembly también ha aprovechado este ligero cambio político para juguetear con su clásico sistema de evolución de personajes; ya no hay puntos de habilidad al subir niveles y en su lugar iremos añadiendo diferentes figuras al séquito de nuestro personaje. Cada uno de estos ayudantes modificará nuestras capacidades en combate, de movimiento, lealtad o habilidad a la hora de gobernar. Esto nos permite modificar el séquito en función de la misión de cada personaje; si estamos hablando de un gobernador necesitará más escribas y sacerdotes para aumentar la recaudación y la lealtad que ingenieros de asedio y especialistas en intendencia.

Recepción y crítica

El juego ha recibido críticas mixtas a positivas. Tiene un puntaje agregado de 76 en Metacritic, lo que indica "revisiones generalmente favorables". Ha sido criticado por su campaña eliminada y el combate roto en comparación con los juegos anteriores, y por la falta de variación entre las facciones.

Fuentes