Caoba centroamericana

Caoba Centroamericana
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Caoba arbol.jpg
Nombre Científico:'
Reino:Plantae
Subreino:Tracheobionta
División:Magnoliophyta
Clase:Magnoliopsida
Subclase:Rosidae
Orden:Sapindales
Familia:Meliaceae
Género:Swietenia

Caoba Centroamericana (Swietenia macrophylla King). El género Swietenia fue establecido por Nikolaus Joseph Jacquin en 1760, con el tipo Swietenia mahagoni. Jacquin dio nombre a este género en honor al famoso naturalista barón General L. B. Swieten.

Generalidades

El género Swietenia pertenece a la familia meliaceae y consta de tres especies siguientes, reconocidas universalmente en los medios científicos: Swietenia mahagoni (L.) Jacq., Swietenia macrophylla King. Y Swietenia humilis Zucc. Existen otros 5 táxones con caracteres morfológicos menos definidos, que según botánicos calificados se pueden asimilar a las 3 especies citadas. Los táxones S. candollei pittier, S. tessamannii Harms, S. Krukovii Gleason y Panshin y S. belizensis Lundell, son sinónimos de S. macrophylla se conoce con los nombres comunes de: caoba de Honduras y caoba centroamericana (Cuba); caoba hondureña, caoba de Honduras y Honduras mahogany (Puerto Rico); Central American mahogany (Islas Vírgenes); caobo, chiculte, cubano, venadillo, zopilote, gateado y rosadillo (México); caoba (Nicaragua y Honduras); chacalte (Guatemala); caoba, Oruro y orura (Venezuela); aguano (Perú); caoba americana (Colombia); mara (Bolivia); mogno (Brasil); acajou du Honduras (Guadalupe); mahogany Honduras (Martinico y Guadalupe); acajou amerique (Guyana Francesa); Honduras mahogany y British Honduras mahagany (Estados Unidos). En la mayoría de los países latinoamericanos designan con el nombre de caoba, tanto a S. macrophylla como a S. mahagoni.

Distribución geográfica

S. macrophylla es la especie del género que tiene el área de dispersión más extensa. Esta área se extiende desde el paralelo 22º N, en Veracruz (vertiente del Golfo), México, hasta 17º 55 S, en Bolivia. Se le encuentra en los bosques de México, América Central, Venezuela, Colombia, Perú, Ecuador, Brasil y Bolivia. En Ecuador sólo habita en una pequeña zona limítrofe con Perú. No alcanza la vertiente del Pacífico, donde tiene su área de dispersión S. humilis, en una faja costera que se extiende desde Sinaloa, en México, hasta Guanacaste, en Costa Rica.

Condiciones del hábitat

Tipo de bosque

La caoba centroamericana es una especie del bosque semicaducifolio, aunque también habita en el tropical húmedo. En las selvas se halla en forma esporádica, nunca formando grandes rodales puros. Por regla general, sólo se localizan (Bascopé y otros, (1957) de 4 a 8 caobas grandes por hectárea, excepcionalmente 12 o más. En Bolivia, Irmay (1949) dice que tampoco se distribuye en forma regular, que en ciertos lugares sólo se encuentra 1 árbol cada 2 ó 3 ha, mientras que en otros se localizan 10 ó 12/ha. En contados sitios, existen hasta 27 árboles adultos/ha.

Esta especie es heliófila, aunque en su juventud tolera ligera sombra. En los lugares donde hay poca luz, las plantas jóvenes crecen lentamente, pero cuando se abre el dosel y reciben suficiente iluminación, se produce un rápido crecimiento como producto de la intensificación de la fotosíntesis. Si las plantas reciben intensa luz en sus copas y tienen protección lateral, pueden crecer rápidamente. En condiciones óptimas, las copas de los árboles de S. macrophylla forman parte del estrato superior del bosque y están expuestas a la luz solar intensa.

Clima

Según Lamb, B. (1966), S. macrophylla alcanza su óptimo desarrollo en las condiciones climaticas del bosque tropical seco de la clasificación de Holdridge, que corresponde al semicaducifolio de la clasificación que se usa en Cuba. Esta formación vegetal está limitada por el parámetro de una temperatura media anual (biotemperatura) de 24 ºC, ó más alta, y por una precipitación anual promedio de 1 000 mm a 2 000 mm. Bajo ciertas condiciones ecológicas, esta especie se encuentra en las formaciones del bosque tropical húmedo, con temperatura por encima de 24 ºC y un promedio anual de precipitación entre 2 000 mm 4 000 mm. Bascopé y entre otros (1957) dicen que crece bien en lugares donde la precipitaciones son del rango de 1 200 mm a 2 000 mm anuales y que soportan bien sequías estaciónales bastante prolongadas, a lo menos sobre suelos con una capa freática al alcance de las raíces durante todo el año.

Tipografía y suelos

La caoba centroamericana prefiere suelos ricos, profundos y bien drenados, donde el manto freático no esté muy distante de la superficie y las raíces de los árboles puedan alcanzar zonas húmedas durante todo el año. Los árboles adquieren siempre su mejor y mayor desarrollo en las tupidas selvas, las cuales se encuentran en ciertas elevaciones y alturas, con un suelo permeable y firme, fuera de los cursos de agua, pero en sus inmediaciones.

Dendrología

Árboles

Los árboles de S. macrophylla son de tamaño grande, fuste recto y cilíndrico, copa ancha de forma hemisférica, ramificación robusta y bien distribuida, follaje tupido; la corteza es áspera con ciertas escamas separadas por grietas más o menos profundas, de color marrón grisáceo en árboles viejos y gris claro en los jóvenes; en las ramitas es de color marrón avellana, sin fisuras y con lenticelas poco distinguibles. Interiormente la corteza es color rojizo y su sabor amargo; su grueso es, por lo común, de 1cm a 1.5 cm en árboles jóvenes; en los viejos es mayor el grosor. El sistema radial es profundo y bien desarrollado.

Hojas

Las hojas son dispuestas en espiral, parinnadas (a veces imparipinnadas), de 15 cm de largo a 45 cm de largo (en los árboles jóvenes, aún más largos) incluyendo el raquis, entre 3 y 6 pares de folíolos opuestos (en ciertos casos subopuestos); raquis redondo de color verde amarillento, el cual termina en un estrecho punto muerto. Folíolos asimétricos, lanceolados u ovados, subcoriáceos, glabros en ambas caras, con el margen entero, el ápice agudo acuminado, la base asimétrica, generalmente aguda y, raras veces, obtusa; de color verde amarillento brillante en la haz, verde pálido en el envés; con 9 ó 10 pares de nervios, alternos. Los folíolos miden entre 9 cm y 15 cm de largo y 4 cm a 5 cm de ancho; los peciólulos entre 5 mm y 10 mm de largo. Los árboles de esta especie son caducifolios en las zonas más secas de su área geográfica.

Flores

Esta especie es monoica, comúnmente las flores masculinas son más abundante que la femeninas. A pesar de ser una especie monoica, algunos árboles solo producen flores masculinas y de ellos nunca se obtienen frutos. Estos árboles se distinguen por su mayor vitalidad y desarrollo. Flores masculinas actinomorfas, de 6 a8 mm de diámetro; cáliz verde amarillento muy pequeño, cortamente capular, con 5 lóbulos redondeados; pétalos verde amarillentos, 5 pétalos de 4 a 5 mm de largo, oblongos u oblongo-obovados, con el ápice redondeado; estambre de 4 mm de largo, los filamentos unidos en un tubo estaminal campunulado, con el margen agudamente 10-lobado; anteras incluidas en el cuelo del tubo; nectario anaranjado, pateliforme lobado, rodeando la base del ovario; ovario rudimentario, 5 a 6 locular, cada lóculo con numerosos óvulos muy pequeños; estilo grueso, llegando al ápice del tubo estaminal, terminado por un gran estigma peltado.

Frutos

Fruto

Los frutos son capsulas leñosas, de color gris claro y corteza lisa; de forma piriforme u ovoide; de 10 cm a 18 cm de largo y entre 8 cm y 10 cm de diámetro. El pedúnculo es leñoso, de 10 cm a 20 cm de longitud y, aproximadamente, 1 cm de diámetro; algo encorvado para sostener el fruto en posición vertical. La dehiscencia es basal, o sea, se abre la capsula en la base hacia el ápice a lo largo de las 5 suturas carpelares. En Cuba durante los meses de febrero a abril y, a veces, se prolonga hasta mayo.

Semillas

Cada cápsula contiene, normalmente, 45 y 70 semillas esponjosas, frágiles, de color castaño; las cuales miden, incluyendo el ala, de 8 cm a 10 cm de largo y 2 cm a 2,5 cm de ancho. El endospermo tiene entre 1,5 cm y 1,8 cm de largo y está alojado en la masa esponjosa. Las semillas son amargas y astringentes.

Silvicultura

Regeneración natural

La apertura del techo de copas estimula la regeneración natural de la caoba, al recibir los brinzales la luz desde arriba, indispensable para lograr su desarrollo. En Cuba, se ha observado muy poca regeneración natural de esta especie y solo en sitios donde las condiciones del suelo han sido muy favorables.

Recolección y procedimiento de la semilla

Los frutos de la caoba hondureña se deben cosechar desde que alcancen su maduración en febrero o marzo, en ocasiones algo más avanzado del año. En el lugar de procedimiento, se colocan los frutos al sol sobre mantas de lona o de arpillera, o bien en caja de base amplia y poca altura. Cuando se produce la dehiscencia, se separan las semillas de las impurezas y se envasan en recipientes metálicos de sierre hermético, los cuáles se colocan en cámara fría a temperatura que fluctúen entre 3 ºC y 7 ºC. La semilla recién recolectada tiene elevado poder germinativo, entre 70% y 90%, pero éste desciende rápidamente si se almacena en condiciones climáticas ordinarias. Sin embargo, si se almacena en latas con carbón en polvo y éstas se entierran a 40 cm bajo el suelo, la viabilidad dura hasta 132 días, con 70 a 72% de germinación.

Prácticas de vivero

En Cuba, las posturas de S. macrophylla se cultivan en envases para ser plantadas con cepellón; las plantaciones a raíz desnuda no han dado buenos resultados. En otros países usan ambos procedimientos y, en ciertos casos, prefieren plantar a raíz desnuda. Las semilla se siembran en embase previamente llenos con tierra areno-arcillosa, rica en materia orgánica, colocándolas hasta unos 3 cm o 4 cm de profundidad, con la parte donde está alojado el embrión hacia abajo y el ala hacia arriba.

Para arrancar las posturas que se harán de plantar a raíz desnuda, es necesario aprovechar la oportunidad en que estén en reposo vegetativo, con la yema Terminal dura; si se plantan en plena actividad vegetativa, la yema Terminal se marchita y se dobla después del trasplante, acabando por secarse y provocando la emisión de renuevos laterales.

Preparación del sitio y plantación

La preparación del sitio para plantar la caoba centroamericana, es la normal según los requerimientos del lugar. Para plantarla en campo abierto: aradura total o en fajas, en sitios llanos, y en terrazas u hoyos de plantación, en lugares montañosos. Para enriquecimiento de bosques de segundo crecimiento: tala del arbolado en corredores para plantar en hileras, o desmonte de pequeñas superficies para plantar en grupo. También se pudiera experimentar con plantaciones individuales, en las ventanas o claros de un bosque secundario bien raleado.

Cultivo de plantaciones

Las principales atenciones del cultivo que requiere estas plantaciones son: reposición inmediata de las fallas que se produzcan; limpieza de las malas hierbas durante los primeros años; mantener abierto el dosel, mediante la supresión de las ramas y, en caso necesario, de los árboles que impidan a los brinzales recibir suficiente luz para su normal desarrollo, es recomendable hacer limpiezas a las plantaciones, por lo menos 2 o 3 veces en el primer año 3 en el segundo, 2 o 3 en el tercero y, en caso necesario, 1 o 2 en el cuarto.

Labores de mejoramiento genético

Desde 1967 se inicio, en Cuba, la selección masal de S. macrophylla, seleccionando y acondicionando tres masas semilleros: 1 en la provincia de Matanzas y 2 en la de Ciego de Ávila. Al efecto, se hizo la selección de los mejores fenotipos, se eliminaron los árboles de mala conformación y se efectuaron labores de raleos liberadores de las copas, desinfección de los tocones, podas y fertilización. De esas masas se obtiene, anualmente, buena semilla que se utiliza en los planes de reforestación.

Enemigos

Plagas de Insectos

La plaga que hace más daños a S. macrophylla en América, es la larva del lepidóptero Hypsipyla grandella (Zeller), taladrador de los brotes de las meliáceas; pero se han reportado otras, auque de menor importancia. Lamb, B. (1966) informa que atacan la caoba hondureña: Hypsipyla robusta Moore, quien le produce considerables daños en Java y otros lugares de Asia; Egchirites nominus Dyar, defoliador que la afecta en Belice; un escolítido (Scolytidae) que daña los árboles en Trinidad.

Enfermedades

En Filipinas, Chinte (1952) informa que las semillas y los frutos de la caoba hondureña son dañados por Diplodia sp., ocasionándole podredumbre y reducción da la viabilidad y que, en una ocasión, las posturas de un vivero fueron intensamente infectadas por el hongo Sclerotiunm delphiniae. Bascopé y otros (1957) dicen que a veces se observa un cáncer de origen desconocido en el tallo de los árboles medianos y grandes. En Cuba, los fitopatologos del Centro de Investigación Forestal han detectado afectando a la caoba hondureña a los hongos; Pestalotia so., que produce necrosis en las hojas y, a veces, se traslada al hipocótilo de las plántulas donde se asocia a Botrydiplodia sp.; Rhizopus sp.; que descompone los cotiledones de las semillas y afecta la viabilidad de éstas; Alternaria sp., el cual daña las hojas; Fusarium sp., quien causa pudrición en el cuello de las plántulas en los viveros y también afecta las hojas; Phyllachora sp., que daña el follaje.

Madera

Principales características

El duramen de la madera de S. macrophylla es de color que varía del rosado-crema al rojo-marrón oscuro; estas variaciones dependen de factores tales como: la edad del árbol, el medio en que éste se ha desarrollado, la parte de donde se toma la muestra, etc. Cuando el árbol está recién cortado, es de color más claro y se va oscureciendo con el tiempo.

Esta madera es lujosa; de grano comúnmente recto, pero en algunos árboles entrecruzados formando atractivas vetas en la selección radial; textura fina a mediana; anillos visibles, paro no definidos; no tiene olor ni sabor caracteristicos.la albura es angosta, no diferenciada muy claramente del duramen; de color amarillento cuando el árbol está recién cotado, pero con el tiempo se torne de color marrón pálido.

En cuanto a las cualidades de trabajo de esta madera, generalmente se reconoce que es muy fácil de trabajar y que se obtienen superficies muy buenas: la reacción al trabajo de máquinas es como sigue: el cepillado, moldeado, torneado, taladrado, escopleado y la resistencia a las rajaduras por tornillos, son satisfactorios; el lijado es excelente.

Usos

La madera de S. macrophylla se emplea en carpintería fina, ebanistería de lujo, decorado interior, objetos torneados, adornos, instrumentos científico de presión, instrumentos musicales (principalmente pianos), escultura y tallado, yates, botes, construcciones, chapas para madera contrachapada de alta calidad, etc. En tiempos pasados la madera de esta especie fue muy usada para construir hélices de aviones, demostrando con esto su buena resistencia mecánica.

Otros usos

S. macrophylla es también una planta malifera. Ordetx Ros (1978) dice que las abejas acuden frecuentemente a sus flores en busca de néctar. Como especie medicinal, Roig (1974) informa que, según Martínez, la corteza de la caoba Hondureña tiene propiedades astringentes, tóxicas y febrífugas; y que en Nayarit, México, toman una especie de té preparado con sus semillas, contra el dolor del pecho.

Fuentes

  • Silvicultura especial de árboles maderables. Editorial Científico – Técnica, edición 1999.