Manuel Brito Morales

Manuel Brito Morales Líder revolucionario Nombre Manuel Brito Morales Nacimiento 28 de noviembre de 1913 Pinar del Río,Cuba Fallecimiento 8 de agosto de 1957 Lomas del Guineo, Escambray

Manuel Brito Morales. Destacado luchador revolucionario.

Síntesis Biográfica

Nació el 28 de noviembre de 1913 en Pinar del Río. Hijo de José y Juana, en una familia de origen campesino. A la edad de 2 años la familia se traslada a la antigua provincia de Las Villas, municipio de Yaguajay, barrio de Bamburanao, en la finca Vegas de Caonao.

A los 7 años de edad comienza a ir a la escuela rural de la zona, pudiendo alcanzar solo hasta el 3er grado, ya que tiene que dedicarse junto con su padre a distintas labores agrícolas para ayudar en la economía familiar. Más tarde pasa a vivir con sus padres en la finca Bella Vista, en el barrio Meneses.

Trayectoria revolucionaria

Desde temprana edad comenzó a demostrar su temperamento rebelde contra los patrones explotadores en las escogidas de tabaco. Siendo casi un niño fue uno de los que encabezaron la primera huelga de despaladores de tabaco contra los patrones José Fragoso y Pedro Lorenzo.

Ya en el año 1933, en las luchas que propiciaron la caída del tirano Machado, se integró a las luchas revolucionarias. Ingresa en 1934 en la Liga Juvenil Comunista y desde entonces participó en todas las acciones que se le encomendaron, sobre todo en apoyo a todas las luchas justas de los obreros y campesinos, manifestándose públicamente y apoyándolos a la vez contra los desalojos campesinos que ejecutaba el terrateniente Francisco Delgado en la zona. También se enfrentó al terrateniente Teodoro Rodríguez en la finca La Fortuna por los desalojos en masa de campesinos.

Viéndose marcado y aislado por los patrones de la zona tuvo que marchar en busca de trabajo a las colonias del Central Violeta en Camagüey como cortador de caña, sosteniendo su primera lucha en esta zona con un comerciante español el cual robaba a los obreros despiadadamente, al que se quejó y hubo de contestarle en mala forma; entonces le rompió la báscula sosteniendo un altercado con el mismo, lo que le costó tener que irse de esa zona. Se trasladó entonces a las colonias de Dionisio Velasco, (que habían pertenecido al demolido Central Velazco donde en poco tiempo también fue separado del trabajo en dicha colonia por sus luchas y enfrentamiento a los abusos y atropellos.

De ahí marchó a la zona de Mayajigua donde sostuvo discusiones con el sargento Graveran, propietario de una colonia de caña de donde tuvo que irse para dedicarse más tarde a labores en una plantación de tomates, donde también tuvo problemas ya que por sus luchas a favor de los trabajadores discutió y le entró a golpes al capataz. Inmediatamente lo acusaron y fue castigado a 60 días de prisión en la cárcel de Remedios donde tuvo dificultades con el alcalde de la cárcel, provocado por los maltratos a los reclusos y lo pésimo de la comida. De ahí lo sacaron castigado a trabajar en las obras de las playas militares de Caibarién donde fue castigado por arengar a los presos para no trabajar por las malas condiciones que allí había, siendo transferido a celda de castigo por varíos días.

Ya en libertad volvió de nuevo a trabajar en tomateras donde tubo, por las mismas causas, riñas con el representante del patrón, resultando dicho individuo lesionado en un pómulo, por lo que fue condenado a varios días de arresto y a cien cuotas de $5.00 a pagar trabajando si lo estimaba conveniente y así lo hizo, pero su pueblo le Jarahueca que lo conocía y estimaba, recaudó por medio de bailes y colectas, casi la totalidad de la multa. Volvió a verse aislado totalmente, por falta de trabajo y decidió marchar junto a su esposa y 4 hijos a la colonia Sabicú en el central Violeta.

Estando en este lugar se enteró de la muerte de Jesús Menéndez, tomó el caballo del Mayoral y recorrió la zona, alentando a los trabajadores a paralizar las laboras en todas las colonias que le fue posible. Al llegar la guardia rural con el interés de detener a los causantes de esta huelga, se hizo único responsable de los hechos. Fue detenido y más tarde oibligado a abandonar el lugar. Se trasladó entonces a la colonia Meneses de dicho central, donde al amparo de un mayoral amigo suyo desde la infancia pudo trabajar varias zafras.

Ya en la zafra de 1957 se le cerraron las puertas definitivamente para conseguir trabajo en toda esa zona y pasó a la zona de Mayajigua, en las Lomas de la Rosa Perdida a hacer carbón por su cuenta. Siguieron las amenazas y de ahí se dirigió a Placetas, finca Echenique, zona de Jarajueca, donde tenía sus 4 hijos y esposa, viéndose amenazado en dicho lugar por no haber votado nunca.

Participación en el movimiento 26 de julio

Ante esa situación decidió trasladarse a la casa de su cuñado en Cabaiguán y allí hizo contacto con los militantes del Movimiento 26 de Julio, uniéndose al grupo que comandaba Félix Hurtado, jefe de acción y sabotaje del MR-26-7 en la zona, en momentos en que en todo el país se efectuaba la huelga general revolucionaria, convocada por el asesinato de Frank País en Santiago de Cuba, siendo Manuel nombrado jefe de una célula de colaboradores.

Al no lograrse la esperada coordinación se dio la orden de abortar los planes de acciones armadas pero un grupo decidió alzarse y partió en dirección al Escambray. El 6 de agosto acamparon en un lugar conocido como Loma de la Llorona donde pasaron la noche. Posteriormente establecieron contacto con el campesino Santos Piñero, vecino de la zona, quien se comprometió a prepararles comida, pero en realidad lo que hizo fue delatarlos a las autoridades batistianas y el grupo fue sorprendido por fuerzas del ejercito, comandadas por el Capitán Mirabal; muy superiores en hombres y armas siendo dispersado en un desigual combate.

A partir de ese momento comenzó una verdadera cacería contra ese grupo de jóvenes, perseguido encarnizadamente y asesinados con saña cuando fueron capturados sus integrantes.

Manuel logró sobrevivir al ataque inicial y al día siguiente siguió rumbo al Escambray donde acosado por el hambre y la sed entró en la casa de unos campesinos en las Lomas del Guineo, donde lo invitaron a comer y al salir de la casa se vió rodeado por decenas de soldados que los venían persiguiendo y que lo asesinaron cobardemente.

Muerte

Fue asesinado el 8 de agosto de 1957. Al día siguiente sus familiares recogieron su cadáver y le dieron sepultura en el Cementerio de Jarahueca.

En el lugar donde cayó asesinado se ha construido un pequeño monumento que perpetúa su gloriosa memoria.

Fuente

Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana de Cabaiguán.