Asma intrínseca

Asma intrínseca
Información sobre la plantilla
Asma intrínseca.jpg
Clasificación:Enfermedad del sistema respiratorio
Región de origen:vías aéreas

Asma intrínseca. El asma intrínseca o no alérgico es aquella forma de asma en que no se encuentran alergenos como desencadenantes del mismo, y corresponde al 19% de los asmas que se ve en las consultas de alergia, actualmente se reconoce que la etiopatogenia es desconocida siendo por tanto un asma criptogenético. Las infecciones del árbol bronquial son una causa frecuente de agudizaciones en este tipo de asma aunque no se ha demostrado el mecanismo por el cual actúa la infección.

Historia

En otras formas de AB no es posible determinar su origen por lo que se les denomina idiopática, esencial, de origen no demostrable o asma bronquial intrínseca (ABI), o criptogenética de la clasificación de Rackeman de 1918. En la actualidad este término es aplicable a los casos donde las reacciones en las vías aéreas IgE-mediadas a alergenos comunes no pueden ser detectadas.

Tampoco aparece claro si el asma intrínseca es debido a reacciones inmunológicas frente a agentes infecciosos, o si éstos actúan como factores inflamatorios inespecíficos. No obstante, éstos pueden actuar exacerbando mecánicamente al asma, aumentando la obstrucción bronquial, debido al edema e infiltración leucocitaria, unido a la hipersecreción de moco. En su mayoría son de origen viral aunque las bacterias ocasionalmente pueden ser responsables de infecciones secundarias. No hay evidencia de que se produzca respuesta alérgica mediada por IgE frente a alergenos bacterianos.

Manifestaciones Clínicas

Suele afectar a adultos (> 35 años) con predominio en mujeres (76%) sin antecedentes respiratorios previos serios. Frecuentemente el primer episodio de asma puede relacionarse con una infección respiratoria aguda, tal como bronconeumonía, bronquitis aguda o infección importante del tracto respiratorio superior.

La enfermedad una vez iniciada tiende a persistir de forma crónica y con gravedad variable una vez que aparecen los primeros síntomas. Estos ocurren con mayor frecuencia durante la noche o al levantarse por la mañana y consisten en episodios de tos, opresión torácica, sibilancias y disnea en cualquier combinación. Es frecuente un esputo claro y espeso como clara de huevo .

La duración de los episodios es variable (desde minutos a días) y en general muchos de los pacientes no llegan a estar asintomáticos (sin tratamiento) en las intercrisis. Los síntomas son perennes aunque es frecuente un empeoramiento invernal (viriasis respiratorias). Muchos refieren anosmia e hidrorrea (consultar Rinitis Intrínseca en la opción Enfermedades) y un subgrupo poliposis nasal (12%) y/o intolerancia a AINE (7%) (consultar Asma por AINE en la opción Enfermedades).

Suele haber empeoramiento premenstrual, durante los embarazos y con el climaterio. Los irritantes inespecíficos (contaminación, humos de tabaco o aceites, olores penetrantes, etc.) así como la medicación ß-bloqueante (oral y/o tópica "colirios") también pueden producir exacerbaciones. En general, la respuesta al CGDS es insuficiente (para valorar su eficacia debe ensayarse durante 1-2 meses), limitada a los broncodilatadores y buena a los esteroides (en aerosol y/o sistémicos). La historia familiar de atopia suele ser negativa. El examen físico no difiere del de otros tipos de asma, aunque en éste es más común la poliposis nasal.

Diagnóstico

Un test de broncodilatadores positivo, una eosinofilia en esputo (> 20%) y/o una determinación de FENO > 25 ppb y unas pruebas cutáneas negativas (o no compatibles con la historia clínica) suele ser suficiente para llegar al diagnóstico. Otros datos de apoyo son una IgE total dentro de la normalidad, una eosinofilia periférica, una sinopatía hiperplásica (59% de los casos) y una poliposis naso-sinusal (12%). Puede ser útil valorar la presencia de hiperreactividad bronquial inespecífica HBI (test de metacolina). Un test de metacolina negativo en general excluye la enfermedad, por el contrario un test de metacolina positivo no la confirma, ya que éste puede darse también en muchas enfermedades e incluso en población sana.

El diagnóstico diferencial debe hacerse principalmente con el asma extrínseca (consultar también Disnea Sibilante en Adultos en la opción Manifestaciones Cardinales).

Caracterización clínica

Cuenta con una morbilidad no muy común (entre 8 y 11 % de los pacientes con AB), pero sin embargo tiene una caracterización clínica bastante bien definida, ya que:

  • Aparece tardíamente en la vida del paciente (hasta la mediana edad), cuando factores complicantes como las infecciones respiratorias o la bronquitis crónica la ponen al descubierto.
  • No es posible demostrar por medios auxiliares de diagnóstico (incluyendo los inmunoalérgicos y los clínicos) una relación causal con factores extrínsecos.
  • Aparentemente no se relaciona con la IgE (posee valores normales), ni con los eosinófilos.
  • Puede asociarse con rinosinusitis, poliposis nasal, intolerancia al ácido acetilsalicílico y otros analgé-sicos antiinflamatorios.
  • Hay mala respuesta a tratamientos habituales.
  • Tiene, en general, un mal pronóstico, convirtiéndose, perse o por las complicaciones que surgen durante su evolución, en una amenaza para la vida de estos pacientes.
  • Otros: El fumar es frecuentemente un factor agravante. Es perenne. Tiene test cutáneos negativos.

Fuentes

  • Libro Asma Bronquial. Autor: José A Negrin Villavicencio, Página 11 – 12