Balrogs
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Balrogs. (Del Sindarin Bal / Poder y Raun, rog / Demonio). Eran espíritus Maiar en el universo de Tolkien que se convirtieron en demonios durante las Edades de las Lámparas. Estos eran de la misma raza que Gandalf y Sauron; luego se corrompieron por Melkor (Morgoth) y se tornaron en los seres más terroríficos y poderosos entre las fuerzas de la oscuridad.
Sumario
Etimología
Balrog es una palabra que proviene del idioma élfico Sindarin (idioma creado por Tolkien) que significaba Demonios de Poder o de terror, de las partículas bal, “poder” y rog, “demonio”. En el idioma de los Altos Elfos, en el Quenya, eran conocidos por Valarauko.
Historia
Balrogs, también llamados Valaraukar, eran originalmente espíritus Maiar, del mismo orden que Sauron y Olórin (Gandalf), pero fueron seducidos por Morgoth, que los corrompió antes del surgimiento de los Elfos en Cuiviénen. Fueron recogidos por él, originalmente en su antigua fortaleza de Utumno, durante las Edades de las Lámparas. Cuando esta fortaleza fue destruida por los Valar al final de la Primera Edad, huyeron y acecharon en los hoyos de Angband.
Cuando Melkor y Ungoliant se escaparon de Valinor muchos años después con los Silmarils, los Balrogs todavía se encontraban en estos hoyos. Luego, Ungoliant atrapó a Melkor en sus telarañas, exigiendo los Silmarils para sí, pero los Balrogs salieron de sus escondites y rescataron a su señor.
La primera vez que estos se enfrentaron a los Elfos fue durante el Dagor - nuin - Giliath (la Batalla bajo las Estrellas) en La Primera Edad del Sol, en los campos grises de Mithrim. Después de la victoria de los elfos Noldor sobre los Orcos de Morgoth, Fëanor enceguecido por la venganza e incitado por la victoria marchó hacia Angband sin conocer nada sobre sus defensas. Allí, los Balrogs se opusieron con ferocidad contra él, fue rodeado por ellos y el propio Fëanor resultó mortalmente herido por el líder de ellos, Gothmog. Aunque sus hijos pusieron en fuga a los Balrogs, Fëanor murió poco después y su espíritu partió hacia los salones de Mandos.
Cuando la fortaleza de Angband de Morgoth fue destruida por el Valar en La Primera Edad del Sol, la mayoría de los Balrogs fueron destruidos, pero algunos huyeron y acecharon en los hoyos de Angband o se escaparon al otro lado de las montañas azules a medio - tierra oriental. En Las baladas de Beleriand, La balada de Leithian, se menciona que los Balrogs capitaneaban orco. Tolkien dice que como mínimo dos Balrogs fueron abatidos en la caída de Gondolin. Durante el asalto a la ciudad, Ecthelion de la Fuente luchó contra Gothmog y ambos murieron, mientras que Glorfindel se enfrentó a otro Balrog con el mismo resultado cuando intentaban escapar del sitio, cayendo Glorfindel y él en un abismo.
En la Guerra de la Cólera con la que finalizó la Primera Edad, la mayoría de los Balrogs fueron destruidos, aunque al menos uno, el conocido como Daño de Durin, consiguió escapar y refugiarse en las profundidades de la tierra. En el año 1980 de la Tercera Edad los Enanos de Khazad-dûm cavaron tan profundamente que despertaron a la criatura, que mató a Durin VI y su hijo Náin I y forzó a los Enanos a abandonar Moria. El año 3019, la Comunidad del Anillo se aventuró en Moria y fueron atacados por orcos y el Balrog en la Cámara de Mazarbul. Gandalf se enfrentó al balrog en el Puente Khazad-dûm, el cual colapsó con ambos encima y cayeron a una profunda sima.
Descripción
Eran espíritus Maiar, poderosos y temibles. Sus corazones eran de fuego y una gran sombra los cubría. Eran más grande que un hombre y su velocidad era significativa. Utilizaban unos látigos de llamas de muchas colas que amedrentaban a sus enemigos, aunque también utilizaron hachas y espadas ígneas. Además eran capaces de utilizar conjuros muy poderosos como bien aseguró Gandalf:
¿Eran criaturas aladas?
Este es un tema polémico entre los críticos y seguidores del universo de Tolkien. Algunos aseveran que si poseían alas mientras que otros lo niegan.
Argumentos de que tenían alas
Los que aseguran que estos tenían alas consideran las siguientes citas como pruebas de su afirmación:
Argumentos de sus carencias de alas
Aquellos que rehúsan la idea de un Balrog con alas consideran las citas anteriores como metáforas. Ellos afirman que los Balrogs no volaban, que aun cuando esto podía suponer una ventaja para ellos no lo hacían. Un ejemplo fue en el mismo Khazad-Dûm donde el Balrog se precipitó hacia al abismo y no utilizó sus supuestas alas para salvarse.
Fuentes
- Tolkien, J. R. R. (1993). El Señor de los Anillos. il. Alan Lee, trad. Luis Domènech y Matilde Horne. Barcelona: Minotauro. ISBN 978-84-450-7179-3.
- Tolkien, J. R. R. (1984). El Silmarillion. Tolkien, Christopher. ed. trad. Rubén Masera y Luis Domènech. Capellades: Minotauro. ISBN 84-450-7038-X.
- Tolkien, J. R. R. Cuentos inconclusos de Númenor y la Tierra Media. editado por: Christopher Tolkien, trad. Rubén Masera: Minotauro. ISBN 84-450-7164-5
- Tolkien
- Scrib
- Lavocediedoras
- Enciclopedia Tolkien GateWay
- Glyph Web
