Capilla del Pilar de Zaragoza

Capilla del Pilar de Zaragoza
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Obra Arquitectónica  |  (Iglesia)
Basilica de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza.jpg.jpg
Vista de la Basílica
Descripción
Tipo:Iglesia
Estilo:Barroco
Localización:Zaragoza, España Bandera de España
Uso inicial:Iglesia
Uso actual:Iglesia


La Basílica de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza es un importante templo barroco de España. La Basílica del Pilar es uno de los santuarios marianos más importante del mundo católico, al que llegan anualmente miles de peregrinos. Es también un centro artístico de primer orden que reúne obras de gran valor y de diferentes épocas, especialmente los frescos pintados por Goya.

Historia

Hasta que el templo del Pilar es la Basílica actual, han pasado muchos siglos, muchas actuaciones y muchas edificaciones. Según las investigaciones actuales, en el siglo I hubo una capilla dedicada a la Virgen María, a orillas del río y que con toda probabilidad se encontraba en el interior de una casa romana. En el siglo IV pasó a ser un templo de veneración pública. Después fue una iglesia visigótica. Finalmente, el templo barroco de la actualidad sustituyó a un templo gótico anterior en los siglos XVI y XVII. La tradición afirma que hubo una capilla primitiva, respetada durante la dominación musulmana. Tras la conquista de Zaragoza por Alfonso I (1118), fue sustituida por un templo románico. Este templo románico, fue construido durante el pontificado del Obispo Don Pedro de Librana. De este templo aún se conserva un tímpano (hoy colocado en el muro sur junto a la puerta baja del templo); es un tímpano centrado por gran crismón rodado que se decora con cierta ingenuidad y monotonía, con rosetas inscritas en círculos unas, más naturalistas otras y recortadas las e la parte baja por las mordeduras del tiempo.

Basilica del Pilar

En 1434 un incendio dañó de tal manera al conjunto que se impuso la construcción de una nueva iglesia. Comienza entonces la construcción de un nuevo templo gotico-mudejar que sustituye la iglesia románica. El año 1515, siendo arzobispo de Zaragoza don Alonso de Aragón, se concluyó la construcción. La iglesia gótica era de una cierta amplitud, y estaba constituida por la iglesia propiamente dicha, de una y amplia nave únicamente, y de un claustro pequeño y recargado donde estaba emplazada la Capilla del Pilar. Iglesia que continuó dedicada a la Asunción, pero que era llamada habitualmente de Santa María la Mayor.

La iglesia de Santa María ocupaba un espacio, indudablemente mucho más pequeño que el actual, y se situaba de una manera notablemente diferente con respecto al templo de ahora. Este templo se enriquecía con importantísimas piezas de carpintería mudéjar (de la que puede ser un ejemplo el conjunto de contraventanas conservadas en la Sacristía Mayor); y en los pies de la nave se emplazaba la monumental sillería de coro que aún se puede admirar en el Templo actual. Pero lo más relevante de aquel conjunto iba a ser el monumental retablo de alabastro cuyo encargo se inicia en 1434, pero que se contrata definitivamente con Forment en 1509.

Como la devoción a la Sagrada Imagen iba en aumento, el zaragozano Juan de Marca, antes de 1638, planteó la necesidad de una construcción más importante y que tuviera una adecuación con la intensidad de esa creciente devoción. Comprendiéndolo bien el Cabildo decidió convocar un concurso para la nueva y más monumental construcción. En la mente de los devotos, y también en la del Cabildo, se estableció un afán de emulación con respecto a la más grande de las iglesias zaragozanas del momento: la Catedral de El Salvador. Esta catedral tenía una planta de salón amplísima y se trataba también de que el Templo del Pilar tuviese ese mismo aspecto. Pero por otra parte, la Catedral era de estilo gótico mientras que parecía oportuno que para el nuevo Templo del Pilar se buscase un estilo más actual, siendo clara la presencia del modelo de San Pedro de Roma que se quería transparentar, con intención de modernidad absoluta, en algunos de los proyectos.

La nueva construcción, ya de inicio monumental, basándose en las líneas del modelo lejano (o sea San Pedro de Roma) se construyó en el tono de la arquitectura barroca del momento, confiriendo robustez a los pilares y ornamentaciones de los mismos y, dada la monumentalidad de la construcción, una continuidad de bóvedas que debía resultar bastante pesada. La traza general del templo Como la devoción a la Sagrada Imagen iba en aumento, el zaragozano Juan de Marca, antes de 1638, planteó la necesidad de una construcción más importante y que tuviera una adecuación con la intensidad de esa creciente devoción. Comprendiéndolo bien el Cabildo decidió convocar un concurso para la nueva y más monumental construcción. Luego la otra traza general del templo se encargó a Felipe Herrera el Mozo, comenzando las obras en 1681. Lo principal del edificio barroco, incluidas las cúpulas, estaba terminado en 1754. Mientras tanto, en 1725 el Cabildo decidió transformar el aspecto de la Santa Capilla, lo que encomendó a Ventura Rodriguez.

Basílica actual

Quizás al visitante de la Basílica como al de nuestra web le interesen algunos datos que pueden considerarse como curiosos. Por ejemplo, las medidas del templo actual: 130 metros de largo, 76 de ancho, 18 de altura hasta la cornisa general, 28 metros hasta los vértices de los arcos y 80 metros hasta la cruz de la cúpula central. La Basílica cuenta con cuatro torres; la más antigua data de 1715 y se llama la Torre de Santiago, situada en el lado oeste de la fachada principal; la segunda, llamada Nuestra Señora del Pilar es la del lado oriental de la plaza (la más próxima al ayuntamiento), que fue iniciada en 1903 y terminada en 1907; las dos torres de la ribera comenzaron a levantarse en 1949, finalizando la primera en 1959 y la otra en 1961; éstas reciben el nombre de San Francisco de Borja y Santa Leonor, respectivamente, haciendo memoria del matrimonio que las costeó, D. Francisco Urzáiz y Dña. Leonor Sala.

Significación Histórica

Pero la Basílica de Nuestra Señora del Pilar es mucho más que unos datos históricos o que las fechas de construcciones de naves y cúpulas; mucho más que un edificio o que una casa material. El Pilar de Zaragoza es el caso de un santuario mariano situado en medio de una ciudad. Igual que María acompañó a las primeras comunidades cristianas, de la misma manera lo hace desde el centro de Zaragoza con los cristianos de hoy. De hecho, en el Pilar de Zaragoza empiezan no pocos proyectos de los zaragozanos y los aragoneses. Ante la Virgen se presentan en su inicio, y ante la Virgen se regresa para dar gracias.

La construcción de la actual Basílica del Pilar está íntimamente ligada al aumento de la devoción mariana a lo largo del siglo XVII. El anterior edificio gótico-mudéjar se queda pequeño ante el creciente número de fieles y se hace necesario levantar un nuevo templo grandioso y monumental, más acorde con el nuevo espíritu triunfante de la Iglesia de la Contrarreforma y con la recién adquirida categoría de concatedral.

El Pilar de Zaragoza

La Catedral-Basílica de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza es un importante templo barroco de España. Según la tradición, se trata del primer templo mariano de la Cristiandad, puesto que en él se conserva y venera el pilar en realidad, una columna de jaspe que, según la tradición, fue puesto por la Virgen María quien, viviendo aún en Jerusalén, se habría aparecido en carne mortal al apóstol Santiago el día 2 de enero del año 40. Documentalmente no hay pruebas de lo consignado en la tradición, cuyos pormenores datan de 1297 en una bula del papa Bonifacio VIII y 1299 una declaración de los Jurados de Zaragoza, donde por primera vez se atestigua la advocación de «Santa María del Pilar», tras emprender en 1293 el obispo Hugo de Mataplana una rehabilitación del edificio que amenazaba ruina, gracias a las donaciones propiciadas por la mencionada bula papal.

Fuentes