El mañana nunca muere

El mañana nunca muere
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Espionaje | Bandera del Reino Unido Reino Unido
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"El mañana nunca muere" es la décimo octava película de la serie de James Bond y segunda participación de Pierce Brosnan en el papel del agente 007.
NombreTomorrow Never Dies
Otro(s) nombre(s)Tomorrow Never Dies
Estreno1997
GuiónBruce Feirstein
DirectorRoger Spottiswoode
Producción GeneralBarbara Broccoli, Michael G. Wilson
Dirección de FotografíaRobert Elswit
RepartoPierce Brosnan, Jonathan Pryce, Michelle Yeoh, Teri Hatcher, Ricky Jay, Götz Otto, Joe Don Baker, Judi Dench
PaisBandera del Reino Unido Reino Unido

' El mañana nunca muere. Décimo octava película de la serie de James Bond y segunda participación de Pierce Brosnan en el papel del agente 007.

Argumento

En la secuencia precréditos, el MI6 y el almirantazgo británico vigilan un mercado negro de armas estacionado en Siberia, Rusia. Desde una base observan cómo el llamado "tecnoterrorista" Henry Gupta compra un decodificador satelital robado al gobierno norteamericano. El Almirante Roebuck (Geoffrey Palmer) contradiciendo las órdenes de M (Judi Dench) ordena a la Fragata de guerra Chester lanzar un misil al mercado negro, pero al darse cuenta de que habían misiles atómicos, ordena abortar la operación pero está fuera de su alcance. James Bond destruye el mercado y huye con el avión que contenía los misiles atómicos pero es perseguido por otro piloto, al cual Bond lanza al vacío desde el asiento expulsor hasta destruir el avión que lo perseguía, pero sin darse cuenta Gupta escapa.

Mas tarde la fragata Devonshire hace su recorrido en aguas cercanas al mar de China siendo hostigado por aviones MIG chinos. Henry Gupta usa el codificador para usar el satélite del Carver Media Globar Network (CMGN) y manipular el satélite americano para modificar el rumbo del barco. El hundimiento de la fragata británica Devonshire por un misil de taladro lanzado por un barco invisible al radar, la destrucción de uno de los MIG chinos en aguas próximas a China así como el asesinato de los sobrevivientes del naufragio por parte del ejército privado del señor Elliot Carver (Jonathan Pryce), crea un estado de tensión entre Gran Bretaña y China, que están próximas a declararse la guerra.

Carver busca crear noticias él mismo para que su nueva cadena de noticias sea la primera en "documentar" el hecho y así ganar audiencia. Carver al enterarse que su ejército privado cumplió su tarea le pide a sus demás secuaces seguir manipulando medios para seguir ganando popularidad: por ejemplo vender software con virus para que así el público compre el antivirus del mismo Carver; o la divulgación de un video del Presidente de Estados Unidos con su amante, si éste no derogaba la ley que subía las tarifas de TV por cable.

Para Carver "no hay mejor noticia que una mala noticia". Bond estando en Oxford es alertado de la situación y llega al Ministerio de Defensa donde muestra que el periódico Tomorrow, propiedad de Carver, había documentado los hechos en su primera plana. El ministro de defensa da la orden a M de investigar el asunto por 48 horas antes de la llegada de la flota británica para responder ante el supuesto ataque chino. M envía a 007 a Hamburgo, Alemania, para investigar a Carver en una fiesta dada por la inauguración de su cadena de noticias, a la vez que le pide seducir a Paris Carver (Teri Hatcher), esposa del magnate, que una vez tuvo un romance con Bond.

Una vez llegado a Hamburgo Q (Desmond Llewelyn) da nuevos gadgets a nuestro héroe; un automóvil BMW y un celular Ericsson que posee control remoto para el automóvil, detector de huellas digitales, llave maestra y un destructor de cerraduras. Bond llega a la fiesta haciéndose pasar por banquero. Luego de darle una buena impresión al villano, 007 busca a Paris, quien lo recibe mal pero deciden hacer las paces. En la misma fiesta conoce a Wai Lin (Michelle Yeoh), agente del servicio secreto chino pero que se hacía pasar por periodista. Carver, al sospechar de Bond, ordena a su mano derecha Stamper (Götz Otto) que se deshaga del agente secreto. Este logra neutralizar a los sicarios de Carver y le corta la luz interrumpiendo su discurso inaugural televisado. Paris sabia que fue Bond pero lo niega ante su esposo, y afirma que conoce al agente pero como viejo amigo. Ella va al hotel Athlantic, donde se hospeda 007 y tiene sexo con él, enterrando su antiguo rencor hacia el agente. Paris le dice sobre un sótano secreto que su esposo tiene en su imprenta para que lo investigue, mientras Gutpa -quien trabajaba para Carver- descubre junto a su jefe que Bond es un agente británico y al saber de la antigua relación de Paris el villano ordena la muerte de su esposa.

Al día siguiente Bond va al sótano secreto donde roba el codificador que Gupta compró y tras un ameno encuentro con Wai Lin escapa de los secuaces de Carver. Este luego llama a su teléfono diciendo que había robado dos pertenencias: el codificador y su mujer. Bond se dirige al hotel donde le tienen tendida una trampa, nuestro héroe descubre a Paris muerta en su cama y ve que fue asesinada por el Dr. Kaufman (Vincent Schiavelli) quien también intenta asesinar a Bond, a la vez manipulando la información afirmando que Bond había cometido el asesinato y posteriormente se había suicidado. Mientras, los secuaces de Stamper intentan fallidamente recuperar el codificador en el auto de 007 (que estaba blindado). Stamper le pide a Kaufman que obligue a Bond a abrir el carro con el teléfono, Bond le da el teléfono al asesino dándole la codificación para el destructor de cerraduras.

Electrocutado y débil, Kaufman pide piedad a 007 quien luego lo mata. Bond escapa hacia el garage del hotel donde usa todos los gadgets (misiles, tachuelas, llantas reinflables y una minisierra) del auto contra los sicarios de Stamper y logra coger el codificador antes de estrellar el coche a un alquier de vehículos. Al rato, Bond se encuentra con su colega y amigo Jack Wade (Joe Don Baker) quien recibe el codificador confirmando que el barco fue desviado de su ruta y su hundimiento se dio en aguas de Vietnam.

Tras hacer un salto mortal en paracaídas, Bond llega al hundido Devonshire donde descubre que uno de los misiles fue robado y tiene otro encuentro con Wai Lin. Al salir a la superficie son capturados por Stamper.

Más tarde son llevados a un edificio de Carver donde Bond descubre que Carver está detrás del incidente en el sudoeste asiático y ordena a Stamper matarlos a ambos con tortura Chakra, pero Bond aprovecha un descuido y junto con Wai Lin escapan en una gran persecución en moto donde complicadamente esposados cambian de posición al hacerle frente a los sicarios de Carver. Tras liberarse de estos, llegan a un pequeño cuartel que la agente tiene en una humilde casa vietnamita y al lograr una posible ubicación de la nave de Carver, se arman con los mejores gadgets y armas, se dirigen a Saigón, (Vietnam).

Cerca de allí, descubren cómo desde una embarcación capaz de escapar a los radares militares más sofisticados, se pretende lanzar un misil nuclear de propiedad británica sobre Pekín (China), y dar comienzo quizás a la III Guerra Mundial. Al ser descubiertos, Bond se escabulle y Wai Lin es capturada. En una difícil operación Bond destruye parcialmente el navío lo que hace que las armadas china y británica lo descubran a la vez que Carver le dice a Wai Lin que ademas de provocar la guerra lanzaria un misil hacia Pekin para convertir al General Chang (superior de Wai Lin) en un heroe que negociaria la paz con Gran Bretaña y a cambio Carver conseguiria los derechos de transmision en China (unico país donde no tenia tal derecho).

Bond libera a su compañera a la vez que Carver asesina a Gupta. Bond y Wai Lin matan a varios matones de Carver y hacen detener la nave que es bombardeada por la armada británica con el permiso de la armada china (ambas sabiendo de los planes de Carver). Bond asesina a Carver con su propio misil de taladro y Stamper usa a Wai Lin como rehén y al rato intenta matar a Bond como venganza por Kaufman (a quien veía como un padre) y por Carver, pero nuestro héroe hace que el villano se hunda con la nave (con un misil robado del Devonshire y con las cargas explosivas puestas por los agentes en el mismo) mientras rescata a su compañera con quien tiene un tiempo de romance mientras sus respectivas armadas los buscan.

Curiosidades de la película

Antecedentes

MGM/UA empezó los preparativos para El mañana nunca muere incluso antes de que GoldenEye estrenara, con la firme intención de estrenar la película a principios de diciembre de 1997. Esta fecha límite dejó a los productores Michael G. Wilson y Barbara Broccoli con el periodo de tiempo más corto para trabajo de preproducción de cualquier película Bond.

Durante muchos meses pareció que la mala suerte estaba a la orden del día. Por ejemplo, los Leavesden Studios, que EON había construido para GoldenEye, no estaban disponibles debido al trabajo de preproducción en las precuelas de Star Wars y los Pinewood Studios no disponían de suficiente espacio para acomodar toda la producción.

Consecuentemente, EON tuvo que construir otro nuevo estudio desde cero. Los productores decidieron construirlo en un almacén abandonado en Hertfordshire de Inglaterra. y los productores Anthony Waye y Allan Cameron se encargaron de convertirlo en Eon Studios. Algunas escenas clave se rodarían en Pinewood, a 50 kilómetros de distancia, creando una pesadilla logística para los productores.

Los responsables de encontrar lugares para el rodaje sufrieron un fuerte revés cuando en el último minuto el gobierno de Vietnam rescindió el permiso para rodar extensas secuencias dentro del país. El director Roger Spottiswoode y otros miembros del rodaje estaban literalmente a punto de subirse al avión hacia Vietnam cuando recibieron la noticia.

Increiblemente, casi de forma instantánea encontraron otras localizaciones en Tailandia que podían hacerse pasar por Vietnam. Los cambios constantes en el guión del guionista Bruce Feirstein exigieron que también se desplazara hasta allí, donde se encontró en la nada envidiable situación de reescribir rápidamente secuencias clave, con sólo unas cuantas horas de antelación a la producción.

Entonces se produjo otra catástrofe potencial: Pierce Brosnan sufría un profundo corte durante una secuencia de lucha. Sin embargo, al más puro estilo Bond, el actor minimizó cualquier retraso y volvió rápidamente a la acción. Cuando la producción se había completado, el presupuesto ya excedía los 100 millones de dólares, un récord para una película Bond pero un indicativo de la confianza del estudio en la franquicia.

El mañana nunca muere es superior a GoldenEye en muchos aspectos. Sigue con el acercamiento que tubo tanto éxito en películas anteriores: un look moderno con alta tecnología de los años 90 combinado con elementos tradicionales de los primeros clásicos incluyendo increibles chicas, enemigos y gadgets. La película parece cara y Michael G. Wilson y Barbara Broccoli continúan con éxito la misión de Cubby de poner cada céntimo en la pantalla. La utilización de lugares exóticos también es mucho más impresionante que en GoldenEye.

Hay algunos elementos memorables en El mañana nunca muere, entre ellos un reparto impresionante. Incluso los personajes secundarios son interpretados por un grupo de actores con mucho talento. Pierce Brosnan está mucho más impresionante esta vez y parece más confortable en el papel de 007. Incluso tiene mejor aspecto gracias a haber ganado un poco de peso y estar bajo un régimen de ejercicio. La película está maravillosamente fotografiada por Robert Elswit, con una escena que destaca particularmente: Bond sentado en la sombra de su habitación de hotel esperando a su asesino desconocido. La imagen de Brosnan, vestido con camisa blanca y llevando la funda para la pistola, parece evocar intencionadamente la secuencia de Agente 007 contra el Dr. No en la que espera al Profesor Dent. Son pequeños toques como este los que hacen las delicias de los aficionados.

El mañana nunca muere es realmente un espectáculo, algo de lo que carecían las últimas películas Bond, no está exenta de pequeños errores. Por ejemplo, la atención prestada al personaje y al detalle durante los dos primeros tercios de la película se pierde a partir de la llegada de Bond al Vietnam. La película en este momento se concentra en secuencias de acción en vez del maravilloso dialogo que prevalecía hasta el momento. La persecución en motocicleta es espectacular, pero un poco larga, al igual que el clímax final, en el que Bond dispara con ametralladora al estilo Terminator.

En cualquier caso, El mañana nunca muere es un nuevo episodio de la serie exótico y con clase y puede tener el orgullo de considerarse como una de las mejores películas Bond de los últimos años. Tiene sin embargo la distinción agridulce de ser la primera aventura producida desde la muerte de Cubby Broccoli en 1996, cuyo nombre aparece en los créditos y a cuya memoria se dedica la película 'lovingly' (con cariño).

Fuentes