Ermita de la Inmaculada Concepción (Guanabacoa)

Ermita de la Inmaculada Concepción (Guanabacoa)
Información sobre la plantilla
Obra Arquitectónica  |  (Ermita)
Ermita.jpeg
La ermita de la Inmaculada Concepción en Guanabacoa.
Descripción
Tipo:Ermita
Estilo:Iglesia católica
Localización:Calle Potosí esquina a la Calzada de Guanabacoa La HabanaBandera de Cuba Cuba
Uso inicial:Religioso
Datos de su construcción
Inauguración:9 de abril de 1644


Ermita de la Inmaculada Concepción. Ermita ubicada en Guanabacoa, Cuba, dedicada a la veneración de la Virgen María.

Historia y construcción

A instancia del matrimonio formado por Martín Salcedo de Oquendo y María Juana Recio, en 1641 el obispo Jerónimo Manrique de Lara concede la autorización para construir en la villa de Guanabacoa una ermita dedicada a la Inmaculada Concepción de María.

La obra de tabla y guano se inauguró el 9 de abril de 1644 con un costo de 3 mil pesos fuertes. En 1660 se promovió su reconstrucción de sillería y mampuesto, con techo de alfarje mudéjar, cubierto de tejas de barro. Por esa época el indio José Bichat, adquirió un cuadro al óleo con la imagen de Jesús Nazareno con la cruz a cuestas, el que tuvo tal fama que durante muchos años se conoció a la ermita con el nombre de Jesús Nazareno.

El tristemente famoso ciclón del 10 de octubre de 1846 le hizo daños de consideración a la edificación, por lo que se realizó una reparación general, que incluyó un retablo (obra de piedra, madera u otro material, que constituye la decoración de un altar) con columnas de ladrillo y escayola y dos estancias

El cemebterio viejo de Guanabacoa.

laterales para sacristía y vivienda del capellán. Por esa fecha se estableció el cementerio nuevo de la población, en un terreno aledaño a la ermita, que desde esa fecha le sirvió de capilla.


Es de una sola nave con su torre colocada sobre la fachada que da al norte, y está situada en la calle Potosí esquina a la Calzada de Guanabacoa, que es el viejo camino que conducía a La Habana.

En el interior de la ermita, hay dos sepulcros, y uno de ellos, datado en 1747, tiene la siguiente inscripción:

Pasajero que hoy me pisas, Párate a considerar, Que has de venir a parar, Lo mismo que yo, en cenizas.

Fuente

  • De las Cuevas Toraya, J. 500 años de construcciones en Cuba. Edit. Chavín. Madrid. 2001.