John William Cooke
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John William Cooke (La Plata, 14 de noviembre de 1919 - Buenos Aires, 19 de septiembre de 1968) fue un político y revolucionario argentino, líder del ala izquierda del peronismo hasta su muerte.[1]
Síntesis biográfica
Nació en La Plata (capital de la provincia de Buenos Aires) en el seno de una familia «radical». Su padre era militante de la Unión Cívica Radical de Marcelo T. de Alvear (el presidente argentino que traicionó la causa popular del presidente radical Hipólito Yrigoyen). En su casa, de buen pasar y nivel cultural, donde se hablaba inglés, lo llamaron «John William». Estudió Derecho en la Universidad Nacional de La Plata) y se recibió de abogado en el mismo año de la Revolución del 43 (golpe de Estado del 4 de junio de 1943, que derrocó al Gobierno fraudulento del presidente Ramón Castillo, y puso fin a la Década Infame). El padre de Cooke quedó profundamente impactado por el entonces coronel Juan Perón, que ocupó a favor del pueblo la Secretaría de Trabajo y Previsión. Cuando el Gobierno militar arrestó a Perón debido a su ideología populista, el pueblo argentino salió a las calles a defenderlo, el 17 de octubre de 1945 (Día de la Lealtad). El padre de Cook demostró su simpatía con Perón renunciando al partido radical (que desde Alvear había traicionado las banderas de Yrigoyen). John W. Cooke ―al ser colaborador de su padre―, fue integrado a la lista de diputados del primer gobierno de Perón. Con solo 25 años de edad fue el parlamentario más destacado, no solo por su oratoria, sino también porque cuando se tuvo que oponer al propio Perón, lo hizo.[3]
En el Parlamento fue elegido por Perón para hacer la defensa del cierre del diario La Prensa, bajo el argumento de que era vocero de la oligarquía y representaba a las grandes familias terratenientes de la Argentina como los Gainza-Paz. Para el segundo gobierno de Perón, Cooke no fue convocado a formar parte de la lista de diputados. Se dedicó a publicar la revista De Frente, donde profundizó su teoría de que el peronismo, como movimiento revolucionario, debía acercarse al marxismo.
La oligarquía realizaba atentados terroristas, el más grave sucedió el 16 de junio de 1955, en que aviones de la Fuerza Aérea Argentina un cobarde bombardeo y ametrallamiento de la Plaza de Mayo, matando a más de 700 civiles indefensos e hiriendo y mutilando a miles más. Cooke disparaba contra los aviones con su pistola calibre 45.
En medio de la masacre, una escritora y política porteña, Alicia Eguren (1925-1977), se acercó a Cooke porque lo consideraba un referente de la izquierda peronista. Tras estar encarcelados ambos, en 1957 se casaron en el exilio en Montevideo.
Finalmente el golpe final contra Perón se concretó el 16 de septiembre de 1955, mediante la dictadura autodenominada Revolución Libertadora. Cooke y otros dirigentes peronistas cayeron presos y fueron trasladados a la cárcel más austral del país, en Río Gallegos (en el sur de la Patagonia).
Con Perón en el exilio, una burocracia sindical dispuesta a negociar en beneficio de sus intereses y con los dirigentes encarcelados, Cooke logra fugarse a Chile junto a otros detenidos, entre los que se encontraba Héctor Cámpora. Mientras está detenido, Perón lo nombra explícitamente como único delegado en la Argentina capaz de conducir políticamente al movimiento peronista, incluso si Perón muriese. Establecido Cooke en Chile, tomará contacto con Perón que se encontraba en Venezuela, iniciando una correspondencia más que intensa. Mientras tanto, el gran protagonista del enfrentamiento en el teatro de operaciones era el movimiento obrero.[4]
Por los años de la Resistencia Peronista (1955-1973), Cooke en todo momento habla de que el objetivo es lograr la «huelga general insurreccional», mediante la provocación del caos a raíz de los sabotajes que realiza el movimiento obrero desde la clandestinidad, en cada fábrica y barrio obrero. Esta intensa lucha de clases, darán al movimiento obrero una experiencia única que templará la fisonomía y combatividad a la siguiente generación obrera que protagonizará la gesta del Cordobazo, incluso contra la propia burocracia sindical peronista.
Cooke clave en las negociaciones entre Perón y Frondizi, para que el radical ganase las elecciones presidenciales en 1958, prometiendo una serie de concesiones al movimiento obrero. La desilusión no tardará en llegar, cuando al año siguiente estalla la gran huelga del frigorífico Lisandro de la Torre. El intento de Frondizi de privatizar el frigorífico nacionalizado por Perón desató la ira de los trabajadores, que fueron derrotados con tanquetas y carros de asalto de las FFAA fue el estreno del Plan Conintes (conmoción interna del Estado).
Cooke ubicado del lado de la huelga. Sin embargo, ese momento será el de su caída. Su rol político consistió en ser una mediación entre la combativa clase obrera por un lado y la burocracia sindical que cobrará fuerza tras la derrota y finalmente la política negociadora de Perón con civiles y militares.
La revolución cubana y su exilio y amistad con Fidel Castro y el Che Guevara lo llevarán a esbozar la teoría de querer fusionar el castrismo con el peronismo.
En abril de 1961 luchó como miliciano junto a los cubanos en defensa de la revolución, en la invasión por Playa Girón.[4] En ese conflicto, su esposa, la argentina Alicia Eguren, alcanzó el grado de capitana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba.
Muerte
El 19 de septiembre de 1968, John William Cooke falleció en Buenos Aires de un cáncer de pulmón.
Fuentes
- ↑ 1,0 1,1 Aunque en varios sitios web se afirma que nació en 1920, el historiador Norberto Galasso, en su libro Cooke, de Perón al Che (2004) demuestra con documentos que el Bebe Cooke nació en 1919.
Los Cooke abandonaron Irlanda en los últimos años del siglo pasado. Estos Cooke fueron radicales pero con fuertes inclinaciones liberales proeuropeas, poco argentinos y menos latinoamericanos. En esa familia ―que habitaba en una casa de la calle 50 entre 4 y 5 de la ciudad de La Plata― nació John William Cooke el 14 de noviembre de 1919. Su padre ―Juan Isaac Cooke―, abogado, publicista, dirigente del radicalismo bonaerense, contrajo matrimonio el 7 de febrero de 1919 con María Elvira Lenci, argentina, de familia uruguaya, afincada en La Plata. Mientras el Bébe (John W. Cooke) cumple sus tareas en una escuela primaria platense, su padre se desempañaba como funcionario del Ministerio de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires. La atmósfera altamente politizada de su hogar enciende las inquietudes del pequeño y así vive con intensidad tanto el triunfo electoral de Yrigoyen (en 1928), como, dos años después (en 1930), el golpe militar que lo derroca. A los 11 años, percibe la preocupación y el temor que invaden su casa. La represión uriburista se ejerce sobre yrigoyenistas y anarquistas, pero también los dirigentes alvearistas sufren, más de una vez, la persecución, la inseguridad, la amenaza. La Década Infame se ha iniciado: desocupados, tuberculosos y prostitutas dan al perfil a las calles de la ciudad de La Plata.Norberto Galasso
Ennis, Belén (2013): «John William Cooke, el platense que le habló de igual a igual a Perón», artículo publicado el 25 de agosto de 2013 en el sitio web Info Blanco sobre Negro (La Plata).
- ↑ Su sobrenombre no era «el Bebé» sino «el Bebe» (pronunciado [bébe]).
- ↑ https://www.marxists.org/espanol/cooke/bio.htm
- ↑ 4,0 4,1 «John William Cooke», artículo publicado en el sitio web El Ortiba (Buenos Aires).