Jorge Livraga

(Redirigido desde «Jorge Ángel Livraga Rizzi»)
Jorge Ángel Livraga Rizzi
Información sobre la plantilla
Jorgealrizzi.jpg
Creador de una secta destructiva fascista, Nueva Acrópolis.
NombreJorge Ángel Livraga Rizzi
Nacimiento3 de septiembre de 1930
ciudad de Buenos Aires,
República Argentina Bandera de Argentina
Fallecimiento7 de octubre de 1991 (60 años) 
ciudad de Madrid,
Reino de España Bandera de España
Nacionalidadargentina
Ocupacióndirector de una secta destructiva neonazi
CónyugeAda Albrecht
PadresVictoria Rizzi y Ángel Livraga

Jorge Ángel Livraga Rizzi (Buenos Aires, 3 de septiembre de 1930 - Madrid, 7 de octubre de 1991) fue un estafador argentino, creador de una secta paramilitar neonazi.

Afirmaba que diversas universidades (algunas inventadas y otras reales) le habían otorgado doctorados en Filosofía, Historia y Arqueología.

Síntesis biográfica

Nació en Buenos Aires el 3 de septiembre de 1930. Sus padres fueron Ángel Livraga, ingeniero industrial argentino, y Victoria Rizzi, argentina, ambos de familias procedentes de Italia, emigradas debido a la pobreza a finales del siglo XIX.

Su padre falleció cuando el niño Jorge Livraga tenía apenas 15 años de edad. Eso despertó sus primeras inquietudes intelectuales y le impulsó a preguntarse por el sentido de la vida. En 1947, a los 16 años, ingresó en la sucursal de la Sociedad Teosófica ―un grupo antisemita creado en Londres por la racista escritora ucraniana Helena Blavatsky (1831-1891)― en Buenos Aires.

Trayectoria profesional

En su vejez afirmaba que en 1951, a los 20 años, había ganado en Argentina el Premio Nacional de Poesía. Tras su muerte, ese dato se reveló falso.[1] También afirmaba que había estudiado en la UBA (Universidad de Buenos Aires), y que había obtenido una licenciatura en Historia del Arte y Filosofía. Tras su muerte, ese dato también se reveló falso.

Más adelante afirmaría que «había cursado estudios de Medicina, especializándose en Medicina de la Antigua India, a través de la Sección de la Sociedad Teosófica de Adyar (India)». En realidad es más posible que en su adolescencia teosófica haya leído algún libro de popularización de la medicina aiurvédica que publicaba la Editorial Kier (Buenos Aires).

También en su vejez afirmaría que había recibió instrucción de los gurúes Jinarajadasa y Sri Ram, ambos «presidentes» de la Sociedad Teosófica Mundial. En realidad ambos maestros eran civiles argentinos, que sostenían la sucursal en Buenos Aires de la Sociedad Teosófica.

Desde su adolescencia, Livraga adoptó la ideología racista de Madam Blavatsky. En su libro La doctrina secreta (1888), Blavatsky relataba la evolución humana con una concepción racista. Explicó que la séptima raza humana eran los arios, los cuales se mantuvieron «puros» racialmente, y se transformaron en superhombres por un repentino salto genético, con el cual obtuvieron las capacidades necesarias para vivir en un mundo posdiluviano. En la misma obra de Blavatsky, el antisemitismo está presente cuando esta presenta a los judíos como «raza degenerada», en relación con otras como la aria. Afirma: «Los mismos constituyen una raza artificial aria pero degenerada en espiritualidad».

En la página 101 del volumen 4 de su libro Isis sin velo (1877, cincuenta años antes del Holocausto judío), Blavatsky atacó con alegatos antisemitas a los judíos, citándolos como la raza «menos espiritual del linaje humano» en comparación con «los nobilísimos rasgos que caracterizan los metafísicos y espirituales sistemas de la raza aria». La cita antisemita al completo dice así: «Mala fortuna tuvo el cristianismo al escoger entre las Escrituras sagradas de los pueblos antiguos la de uno de raza semítica, la menos espiritual del linaje humano, raza incapaz de formar de sus numerosos idiomas uno que sirviese de apropiada expresión a las ideas de los mundos intelectual y moral, en vez de contraerse al bajo vuelo de las figuras sensuales y terrenas; raza cuya literatura es desacertado remedo del pensamiento ario, y cuyas ciencia y filosofía andan necesitadas de los nobilísimos rasgos que caracterizan los metafísicos y espirituales sistemas de la raza aria o jafética».

En 1957, el carisma de Livraga (27) le permitió llevarse a varios discípulos de la Sociedad Teosófica y con su esposa Ada Albrecht fundar la asociación Nueva Acrópolis (organización internacional de filosofía, cultura y voluntariado). Albrecht empezó a traducir libros de hinduismo que compraban en Londres, y tanto ella como Livraga afirmaban que traducían directamente del sánscrito al español.

Livraga basó la ideología de Nueva Acrópolis en los textos «ocultistas» (en realidad racistas y antisemitas) de Madam Blavatsky, Annie Besant y Rudolf Steiner. Nueva Acrópolis se presentaba como una asociación dedicada a la filosofía, aunque en realidad desde el principio se trataba de un grupo totalitario con un líder carismático, una estructura piramidal, y una doctrina que no se debía cuestionar: es decir, una secta.

Como primer y único director Nueva Acrópolis realizó, una inmensa labor de escritura de ensayos, conferencias y poesías, así como numerosos cursos de lo que él daba en llamar «"filosofía" esotérica». En los años 1970, Livraga afirmaba en su currículum que poseía varios títulos obtenidos «en el pasado»:

  • Miembro Académico de la Universidad Internacional Filo-Bizantina, una academia creada en Valencia (España) por el propio Livraga para otorgar títulos espurios a sus discípulos principales.
  • Caballero Cubicular de la Real Orden de San Ildefonso y San Atilano.
  • Cruz de París en Ciencias, Artes y Letras.
  • Doctor honoris causa del Museo Arqueológico Rodrigo Caro (España). Los museos no otorgan títulos universitarios. Además no existe tal museo; posiblemente se trate del Instituto de Arqueología Rodrigo Caro, del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas), un organismo estatal que tampoco otorga títulos universitarios.

Expertos en sectas como Manuel Guerra o Alfredo Silleta afirman que los miembros saludan con el saludo fascista, utilizan estandartes similares a los del fascismo, portan armas de fuego, etc.

En 1981, en una reunión mundial de Nueva Acrópolis que se realizó en la ciudad de Roma (Italia), se produjo un duro enfrentamiento entre Ángel Livraga y su esposa, Ada Albrecht (cofundadora de la secta), que llevó a la ruptura del matrimonio y de la secta. En los grupos totalitarios de signo sectario, político, familiar... no existe la posibilidad de cuestionar las «verdades» oficiales y las escisiones de los que no se someten a los dictados son habituales, aunque estas suelen repetir las mismas conductas de la secta de la que se desgajaron.

Así, la escindida Ada Albrecht fundó Hastinapura; reprodujo el totalitarismo piramidal y dogmático de Nueva Acrópolis; extendió rápidamente la nueva fundación a varios países; y, con una imagen light, ofreció cursos de filosofía, yoga, meditación y psicología de la autorrealización, aunque manteniendo en la base las citadas enseñanzas racistas y antisemitas de Madam Blavatski, también sin el menor reparo.[2]

En 1984, en un informe del Parlamento Europeo (el Informe Cottrell), Nueva Acrópolis fue calificada como agrupación fascista y paramilitar.

En junio de 1988, Livraga fue condenado en España como autor de un delito de tenencia ilícita de armas, a la pena de seis meses de prisión.[3]

En 1995, la Asamblea Nacional de Francia, según el Acta 2468, reconoció a Nueva Acrópolis como secta destructiva.[4]

La clasificación de secta destructiva con que se identifica a Nueva Acrópolis es la establecida por el experto André Dénaux: «Las sectas destructivas son organizaciones seudorreligiosas, seudofilosóficas o seudoculturales, de estructura piramidal y totalitaria, que se dedican a la captación de adeptos para explotarlos mediante falsas promesas y técnicas de coerción psicológica, siempre en provecho del afán de poder y lucro de sus líderes».[4]

Nueva Acrópolis fue identificada como secta destructiva por organizaciones académicas y humanistas internacionales, por redes de apoyo a víctimas de sectas, además de gobiernos regionales que han disuelto sus vínculos con dicha organización.[4]

Desde su creación en 1957 utilizaba el título de «asociación cultural sin fines de lucro».[4] También adoptó apelativos como «Escuela de filosofía a la mera clásica» (en México) y más cercanamente «Fundación Nueva Acrópolis».[4] Desde el año 2011, Nueva Acrópolis ―prácticamente desaparecida en todo el mundo― maneja el título de «organización internacional filosófica».[4]

Aunque nombra a sus subgrupos como «institutos» o tenga actividades ecologistas, su interés real no tiene relación con la cultura, ni con el medio ambiente, sino con el adoctrinamiento y la producción de bienes y dinero.[4]

Dentro de la ideología acropolitana tienen gran importancia los uniformes paramilitares, los estandartes y los símbolos. De estos últimos dicen que «están en descanso, pero cuando llegue el momento de actuar, la rueda [símbolo de las brigadas de trabajo] se transformará en cruz gamada, y el águila acropolitana extenderá sus alas como el águila nacional socialista».[4] El saludo entre los miembros, cuando no hay presente nadie ajeno a la escuela, es levantando el brazo extendido con la palma de la mano abierta diciendo: «¡Ave JAL!» [JAL: Jorge Alberto Livraga].[4]

En cada país hay un grupo que son los dirigentes, los más veteranos y comprometidos, llamados los «hachados» porque llevan pequeñas hachas o «fasces» romanas (de esta palabra proviene el nombre del fascismo). Estos se reúnen periódicamente en lugares apartados como castillos y monasterios de la secta ―antes de desaparecer tenían una casa en Albacete (España), y un convento en las afueras de París, etc.― o en un hotel, para discutir sus acciones.[4]

En Chile fungía más como escuela paramilitar que como «escuela de filosofía». El CDS (cuerpo de seguridad) es una de las tres ramas de las FFVV en donde se practica la lucha callejera para «defender el ideal», aprenden a practicar el uso de armas y aprenden a combatir entre ellos. El MN Carlos Paganini es el encargado internacional del Instituto Boddhidharma y por lo mismo hace énfasis en la práctica del «neikung» (un arte marcial oriental). En general los dirigentes tienen un nivel educacional y cultural bajísimo, haciendo uso de artimañas callejeras como herramientas del actuar acropolitano (amenazas, usurpación de dinero, beber excesivo de alcohol, tabaquismo, ninguneo de la formación de una familia, hijos con varias mujeres, etc.). Las ceremonias incluyen culto a los dioses romanos Marte y Vulcano, utilizan uniformes copiados de los nazis y de los camisas negras fascistas de Benito Mussolini.[4]

Todo hombre debe aprender desde pequeño que no debe pensar ni obrar por sí mismo, sino en todo momento obedecer a su jefe. [...]
Poner siempre al ideal acropolitano por encima de todas las cosas de la Tierra. [...]
No se puede poseer fortuna que sobrepase a la estrictamente necesaria para la vida personal. Todo plus que devenga de su trabajo, herencia, etc, debe ser donado al movimiento. [...]
Se exige obediencia ciega en todos los niveles. [...]
Su entrega al ideal acropolitano debe ser total y borrar de su vida todo aquello que entorpezca, por duro que esto le parezca. [...]
Los lloriqueos de la personalidad deben ser aplastados sin piedad. [...]
Es más fácil que una mujer pase el resto de su vida sin un brazo que sin un lavabo.
Jorge Alberto Livraga

Fallecimiento

Falleció expatriado en Madrid (España) el 7 de octubre de 1991.

Publicaciones

  • Lotos (poemas).
  • Móassy el perro.
  • Ankor, el discípulo, novela que evoca la época anterior al hundimiento de Poseidonis, el último vestigio de la Atlántida según Platón.
  • Cartas a Delia y Fernando.
  • Fundamentos del ideal acropolitano.
  • El alquimista (ideario), novela histórica en tres tomos, acerca del monje católico Giordano Bruno, quemado vivo por la Inquisición católica.
  • El teatro mistérico en Grecia: la tragedia, ensayo sobre las raíces mistéricas y místicas del teatro en la Grecia clásica, y su función catártica.
  • Los espíritus elementales de la naturaleza, síntesis de conocimientos tradicionales sobre el mundo invisible.
  • Tebas, ensayo histórico y religioso sobre el antiguo Egipto.
  • Magia, religión y ciencia para el tercer milenio, 6 tomos, soluciones de «filosofía esotérica práctica».

La secta Nueva Acrópolis se dedica a traducir y publicar todas las obras de Livraga en varios idiomas, entre ellos, inglés, alemán, italiano, griego, portugués, francés.

Fuentes