Miguel Valdés Álvarez
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Miguel Valdés ÁLvares. Mártir revolucionario cubano nacido en el municipio Batabanó. Se destacó en la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista.
Síntesis biográfica
Nació el 8 de mayo de 1921,en la Finca Paso Seco, municipio de Batabanó, Provincia La Habana. Sus padres , Pastor Valdez Medina e Inocencia Álvarez Moreno ambos de procedencia campesina. Cursó sus primeros estudios en la escuela del barrio de Santa Bárbara, pasando posteriormente a la escuela de Plaza ola, donde alcanzó el 5to grado de la enseñanza primaria.
Producto a su situación económica tiene que abandonar los estudios para incorporarse al trabajo, con el fin de ayudar a sus padres. Contaba con 21 años de edad cuando se vio en la necesidad de hacerse cargo de la familia al fallecer su padre. A los 24 años contrajo matrimonio, llegando a tener cinco hijos.
Trayectoria revolucionaria
Al producirse los sucesos del Moncada , Miguel no se mostró indiferente ante los hechos que se sucedían en el país , se consideraba revolucionario y como tal cifraba grandes esperanzas en el porvenir de la patria oprimida. En los años 1956 y 1957 momentos en que la dictadura batistiana recrudecía el crimen y la represión en todo el país, Miguel hace evidente sus sentimientos patrióticos y su condición de revolucionario, participando en actividades clandestinas que se les asignaban.
El 18 de septiembre de 1957 se realiza el atentado contra el Coronel Pablo Fernández Miranda y su ayudante, en la Finca de Santa Bárbara, Miguel al reconocer que los revolucionarios participantes en la acción se encontraban ocultos cerca del lugar de los hechos, se puso de acuerdo con el revolucionario Pablo Noriega para trasladarlos por el kilómetro 44 en una maquina de alquiler hacia un lugar cercano a Quivicán, donde mas tarde serian trasladados para La Habana para que pudieran llegar a la Sierra Maestra. Tres días después, el 21 de septiembre, al ser delatados son detenidos Miguel y tres de sus hermanos menores.
Muerte
Miguel fue cruelmente torturado, los esbirros en su afán de obtener información acerca de los nombres de sus compañeros de lucha, recurrieron a todo tipo de torturas, las que realizaron durante varios días hasta provocar su muerte, sin obtener una sola palabra que comprometiera a sus compañeros. Fue así como el 29 de septiembre de 1957 dejo de existir este joven revolucionario, asesinado por los esbirros de la tiranía batistiana, en las mazmorras del SIM.
Su cadáver cubierto por vendas fue entregado a sus familiares bajo la condición de que no se podía sacar de la caja, temiendo que esto no fuera cumplido por los familiares, la caja fue custodiada por los agentes represivos del régimen. Aun después de sepultado su cadáver fue vigilado durante ocho días por los soldados de la dictadura.
Fuentes
- Archivos de la Oficina del Historiador del municipio Batabanó.
