Pavel Esquerra Díaz
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Pavel Esquerra Díaz (1970). Trovador, artista de la plástica y escritor.
Sumario
Biografía
Nació el 24 de agosto de 1970 en la ciudad de Trinidad, procede de una humilde familia de obreros, educada y forjada en los principios y valores de la Revolución.
Inicia sus estudios primarios en la escuela República de Cuba, allí permanece hasta vencer el cuarto grado, culmina la enseñanza primaria en la escuela José Mendoza García.
Es seleccionado para ingresar en la Escuela Elemental de Artes Plástica, Oscar Fernández Morera de su localidad, donde recibe las asignaturas de Pintura, Dibujo, Grabado, Escultura, Taller de Diseño, Taller de Creación e Historia del Arte. A la par, cursa satisfactoriamente la secundaria básica en la escuela Pedro Lantigua Ortega.
Luego de vencer las pruebas de aptitud, De 1985 a 1988 completa sus estudios de bachillerato en la Escuela Militar Camilo Cienfuegos de Sancti Spíritus. A continuación, ingresar al Instituto Técnico Militar José Martí, en La Habana, como cadete en la especialidad de Ingeniero de Tropas Radio Técnicas, pero causa baja de la misma.
Su marcada inclinación por el arte acontece precozmente, a los tres años, con una pequeña guitarra de cuatro cuerdas que había en su casa, improvisa sus primeras canciones, quizás sea este el inicio, cual brújula salvadora, que lo marcaría para siempre.
Cuando cursaba prescolar en el año 1975, tuvo la oportunidad de participar junto a un grupo de condiscípulos en una gala nocturna en homenaje a nuestro baile nacional en el parque Céspedes de la villa trinitaria. Al siguiente curso, forma parte de la banda rítmica como baterista dejando en ella su impronta con nuevos ritmos, los cuales eran ejecutados en los desfiles martianos y en las emulaciones entre las escuelas primarias del municipio. De varios reconocimientos se hizo merecedora esta banda infantil.
En tercer grado, continúa su andar por los caminos del arte y protagoniza el personaje principal de la obra de teatro martiana Abdala. En sexto grado resulta ganador en un concurso de composición de canciones convocados por su centro escolar. Fue la primera vez que plasmó sobre el papel la letra de las mismas, ejercicio que repite una y otra vez, casi a diario.
Mientras transitaba por la escuela de arte, participa en demostraciones de pintura, que se llevaron a cabo en Sancti Spíritus, en el parque Serafín Sánchez Valdivia, frente a la sede del teatro guiñol en la cabecera provincial. En octavo grado participa con una décima en un concurso para dicho nivel y recibe reconocimiento.
En la Escuela Militar Camilo Cienfuegos participa en una olimpiada de matemática, a nivel de Ejército Central, por otro lado, integra el taller literario de la escuela cuyos debates se desarrollaban en el patio del Museo Provincial de Artes Decorativas de la ciudad de Sancti Spíritus; el mismo era presidido por el profesor de literatura Juan Eduardo Bernal Echemendía, Juanelo. Era activo participante en las brigadas artísticas que se organizaban para las noches de recreación de su Compañía. En duodécimo grado comienza a interpretar canciones de Silvio Rodríguez, Pablo Milanés y Noel Nicola para todo el alumnado.
Cuando pasa a la vida civil, ingresa en 1989 en el Politécnico Lázaro Cárdenas en Santa Clara hasta el año 1992, en que obtiene el título de técnico medio en la especialidad de Sistemas Automatizados. En este centro es dinámico participante en las actividades culturales y escribe su primera canción titulada, Aunque todo pase no me olvides, de esta manera inicia su quehacer como trovador. Luego vinieron otras canciones, las cuales fueron grabadas en una cinta magnetofónica y se reproducían alternando con otras, por el altavoz del politécnico en las actividades matutinas de la escuela. Además, participa como trovador en la Peña de la Caña Santa en la Universidad Central de las Villas junto al Trío en Serie y poetas villaclareños de por aquel entonces.
En esta época se acerca a la entonces llamada Brigada Hermanos Saíz de la villa trinitaria, mientras en 1990 comienza a formar parte de sus filas en la sección de literatura, momento que pasa a denominarse Asociación Hermanos Saíz (AHS) con su sede en la calle José Martí. Ese mismo año ingresa en el Taller Literario, que se honra con el nombre de nuestro héroe nacional y que tiene como sede a la Casa de Cultura Julio Cuevas Díaz.
Mientras cursaba el politécnico, participa en reiteradas ocasiones en la peña de la Caña Santa de la Universidad Central de las Villas como trovador junto al trío En Serie, y poetas villaclareños de por aquel entonces. Siempre interpretaba sus composiciones en aquel entonces, que oscilaba por las sesenta obras.
Una de sus primeras presentaciones en la ciudad que le vio nacer fue a finales de 1990, en el patio del Museo de Arquitectura, donde interpreta algunas canciones de su autoría, entre ellas, Madre no llores más, Como dijo el poeta y Canción mía, entre otras.
En el año 1992 instrumenta en la Casa del Joven Creador, la Peña de los Corazones Rotos, que trascurre entre canciones y poesías, dicho espacio se mantiene vigente por dos años y medio. Fue en ese año de 1992, cuando concursa, por primera vez, en el taller municipal de literatura y obtiene una de las menciones. Al siguiente, alcanza el premio municipal con la obra Poema escondido en el fondo del mar y el primer premio a nivel provincial en los Talleres Literarios. Ya era común sus presentaciones con la guitarra y sus poemas en las distintas actividades que la AHS y la Casa de Cultura desarrollaron en el municipio y en la provincia. También participa en los conciertos auspiciados por las Casas del Joven Creador de Trinidad, Sancti Spíritus y Cienfuegos.
Premios
En 1994, por los procedimientos del concurso de los Talleres Literarios, obtiene el premio nacional de Talleres Literarios desarrollado en la ciudad de Sancti Spíritus, con el texto Calidoscopio. En ese propio año, fue invitado al Festival Nacional de la Trova que se desarrolló en la ciudad de Sancti Spíritus, allí comparte con destacados cultores del género de todo el país.
Publicaciones
En cuanto a las publicaciones, sus primeros poemas aparecen en plegables que emitía el taller literario del municipio, bajo el título de Hojas sueltas. También aparece uno de sus poemas en una antología de poetas de la provincia, con el título de Poetas espirituanos. La edición de esta publicación estuvo a cargo de Esbertido Rosendi y la compilación la realizó Manuel Sosa, vio la luz bajo Ediciones La Verja, 1994.
En el año 2002, la Casa Editorial Luminarias le publica el libro de poesía, El violín quebrado. Mientras que, en el año 2007, lo hace con Silencio Impronunciable, cuyo lanzamiento tuvo lugar en la feria del libro de la ciudad espirituana.
A través del proyecto Editorial Callejas, de la villa trinitaria, en el 2017 le publican el libro, Oráculo del crisantemo. Obras suyas aparecen en diferentes antologías dentro y fuera del país a lo largos de estos últimos años.
Su quehacer artístico continúa ininterrumpidamente con un mayor número de presentaciones en museos y centros de trabajo del municipio y la provincia. A finales del año 1996 fue convocado por la AHS a trabajar en el Hotel Costa Azul, con presentaciones cada martes con conciertos por la tarde mientas en horario nocturno lo hacía en la velada Noche Cubana, donde cantaba y tocaba en vivo con la guitarra sus propias composiciones musicales.
Fue por esa época que su composición musical Canción a Trinidad, fue grabada en un compacto multimedia sobre trova Trinitaria de todos los tiempos, cuya realización se llevó a cabo en los primeros meses del año 1994, por un grupo de informáticos de la localidad.
En 1997 tuvo la oportunidad de presentarse asiduamente, guitarra en mano, en la Casa de la Trova de Trinidad. Ese mismo año fue invitado a otro Festival de la Trova en la ciudad de Sancti Spíritus. A la par de su trabajo con la guitarra, iba escribiendo sus textos poéticos.
Desde el año 1994 retoma las artes plásticas como parte de su trabajo creativo, ello le permite participar en exposiciones personales y colectivas tanto en la Galería de Arte Benito Ortiz Borrell, así como, en la sede de la AHS y en otros espacios de la ciudad de Trinidad. También ha sido invitado a participar en varias Jornadas Nacionales de la Poesía en la cabecera provincial, en las que, además de leer sus poemas, con su inseparable guitarra deleita a los participantes con sus propias creaciones.
Su intensa actividad creativa ha sido reconocida públicamente, en el 2018 recibió el premio nacional XXXIX Aniversario de la Fundación del Periódico Escambray, Órgano Oficial del Comité Provincial del Partido en Sancti Spíritus, con el poema titulado, Seamos el viento. Ese mismo año alcanza los premios de interpretación y de composición en el Festival Nacional Cantándole al Sol, con la obra, La niña del limonero.
En la actualidad, tiene registradas más de 68 obras en la Asociación Cubana de Derecho de Autor Musical (ACDAM). También cuenta en su haber más de 500 canciones, registradas en cintas magnetofónicas, casetes, soportes digitales, discos compactos, memorias flash y en papeles pautados.
Fuentes
- Pereira Perera, José Fidel. Diccionario biográfico de Trinidad. Inédito.
