Tamarugo

Tamarugo
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Nombre Científico:Prosopis tamarugo F. Philippi.
Reino:Plantae
Clase:Árbol
Subclase:Leguminosae
Familia:Mimosaceae (Leguminosae)
Tribu:Mimoseae
Hábitat:Desierto Atacama(Chile)

Prosopis tamarugo, árbol que crece en el desierto Atacama en Chile y mide 15 m de alto, ocasionalmente llega a 18 m, colgante o con la corona como globo con forma irregular.

Origen y Distribución

Originaria del norte de Chile, P.Tamarugo puede ser plantado en áreas con capa de sal entre los 10-60 cm, puede crecer en suelos calcáreos o arenosos, tiene una fisiología particular. Bajo condiciones de humedad atmosférica elevada por encima del 80%, las plantas absorben agua a través del sistema foliar, la transportan a lo largo del sistema radical y la depositan en la microrizósfera, donde puede ser absorbida como agua, Sudjuka 1985.

Esto explica su adaptación a lugares donde el agua está a 40 m de profundidad. Es la especie más importante en el norte de Chile, en la provincia de Tarapacá, la única especie de las mesetas áridas, sin lluvias, en el desierto de Atacama, que cubren alrededor de 15.000 Km2 también en la franja central de Tarapacá, norte de Chuquicamata y sur de Arica, en rodales dispersos. Crece bien en suelos salinos, ondulados de 750 a 1.100 msnm

Estas plantas se encuentran distribuidas en área más extensa con tamarugo se encuentra en la Reserva Nacional Pampa del Tamarugal, con una superficie de cerca de 100.000 ha, de las cuales alrededor de 20.550 ha son plantaciones realizadas en los últimos 30 años.

Forma bosques ralos, con densidades de 1 a 20 árboles por hectárea, o en pequeños rodales más o menos densos. A menudo está acompañado de árboles y arbustos tales como: Prosopis alba, Atriplex atacamensis, P.strombulífera, P.burkartii y Tessaria absinthioides.

Características

El Tamarugo ayuda a la plantación del suelo, y como es una Leguminosa aporta nitrógeno al suelo, aumentando la fertilidad de este. Antiguamente los indígenas de la zona norte reforestaban con Tamarugo.


Es un árbol que crece generalmente en el Hemisferio, ocurre durante todo el año, siendo máximo en los meses de agosto a noviembre; o sea, en la época de floración plena y mínimo crecimiento entre marzo y julio, otoño - invierno.

El Tamarugo posee un doble sistema radicular: uno pivotante o de anclaje, formado por 3-4 raíces gruesas, no ramificadas, que alcanzan una profundidad máxima en suelos francos de 7 a 8 m y un conjunto de raíces absorbentes que se desarrolla y penetra a una profundidad no mayor de 1,50 m. Las raíces absorbentes presentan en toda la proyección de su volumen una humedad que alcanza fácilmente a 40% según medidas efectuadas en el sector de Refresco, en septiembre de 1966 y enero de 1976 en árboles de 30 años de edad, prosperando en un suelo cuya napa freática estaba a 13 m de profundidad. Son tolerantes a la sequía, pH altos, a la sal y a suelos arenosos; Habit 1981.

Es un árbol de 15 m de alto, ocasionalmente llega a 18 m, colgante o con la corona como globo con forma irregular; la corteza hendida, gris oscuro; las ramas arqueadas y nudosas, ramitas flexuosas, castaño-rojizo, espinas en pares, axilares de 0,5-3,8 cm de largo, estípulas en el origen castaño rojizo; las hojas a menudo bipinadas, con 6-15 pares de folíolos, las flores en manojos cilíndricos, amarillo-dorados. Sésiles, cáliz de 1,5 mm corola de 4-5 mm de largo. Pétalos unidos, con el extremo velloso hacia adentro. Ovario velloso.

Desarrollo

Este árbol para su desarrollo adecuado requiere de una radiación solar muy alta y la presencia de napas freáticas superficiales y de media profundidad (2-15m), que constituyen su principal fuente de abastecimiento hídrico.

Las siguientes características ambientales son las correspondientes a su lugar de origen: el clima bajo en el que crece corresponde a Desértico del Interior, que se destaca por condiciones muy severas. Hay una carencia casi absoluta de precipitaciones (0,2-1mm/año) y está presente una gran oscilación térmica diaria, que alcanza hasta 35°C. La especie tolera temperaturas extremas y soporta fuertes vientos. A menudo se presentan neblinas nocturnas, la humedad relativa del aire muestra grandes variaciones diarias, en especial entre septiembre y marzo, cuando alcanza un promedio de 3-10% en el día para llegar a 80-100% durante la noche. La nubosidad diurna es casi nula y hay una alta radiación solar (550cal/cm2/día).

En el altiplano, las lluvias pueden producirse durante los dos meses más cálidos (diciembre y enero) y durante el período invernal más frío (junio-agosto). Estas precipitaciones-suelen ser esporádicas, ocurriendo en forma torrencial con 130-300 mm cada 5-6 años. Estas lluvias de verano de origen tropical marginal son efectos del invierno altiplánico, del extremo norte de Chile y Bolivia. Favorecen la recarga de las aguas subterráneas de la Pampa del Tamarugal ubicada más abajo y facilitan la regeneración natural por semillas.

Bajo condiciones desérticas las lluvias pueden transformarse en perjudiciales; ya que pueden filtrar las costras salinas superficiales y llevar la salinidad a la zona de las raíces, aumentando la dificultad de la extracción de las aguas subterráneas.

Los suelos de 100-106 cm de profundidad, con pedregosidad superficial escasa, están constituidos por materiales de relleno de origen fluvial, provenientes de la Cordillera de las Andes. Pueden ser arenosos, salinos o franco arcillosos, con buen drenaje, a menudo con incrustaciones salinas superficiales de sulfato cálcico y cloruro sódico, de 10 a 60 cm de espesor. El pH oscila entre 8,0 a 8,4. El agua subterránea puede encontrarse desde 1 a 15 m de profundidad y aún hasta 60 m o más. La salinidad del agua oscila entre 5-30 g/l.

Frutos

Su fruto es coriáceo, carnoso, con forma de anillo, muy curvo, a menudo solitario, falcado castaño-rojizo, verde-amarillento o paja amarillo; entre 2,5 y 4 cm y 0,7-1 cm de espesor; las suturas impresas, particularmente en el lado cóncavo; el ápice subapical es corto y con una base redonda de 1 mm en longitud.

De sección subcilíndrica; epicarpo 0,5-1,5mm de espesor; mesocarpo espeso, castaño-rojizo, que seca cuando maduro; 5-22 segmentaciones, transverso en dos filas irregulares y separado por el mesocarpo, conteniendo 7-18 semillas en su interior sumergidas en una pulpa café. Las semillas son de color castaño ligero a castaño oscuro, lisas y más o menos comprimidas, de 3,8-5,2 mm de largo por 2,6-3,2 mm ancho y 1,1-1,4 mm de espesor. La línea de fisura formó como una herradura abierta, y asimétrica en las caras de la semilla.

La chalaza acaba externamente y oblicua, localizada hacia la sutura dorsal de la semilla; el hilo subapical termina en una depresión ligera y el rafe umbonado es grisáceo. Tiene sección elíptica, triangular con los bordes embotados y delgados. La testa es muy espesa, con el tegmen algo más grueso y de color más claro que la testa; el endosperma es abundante, duro y asimétrico en ambos lados de los cotiledones, que son ligeramente amarillos, llano y sagitado a la base pero no rodeando totalmente la parte superior de la radícula.

Uso

Se ha comprobado que el Tamarugo protege las reservas de agua subterráneas, disminuye los efectos del viento sobre el desierto, modera las temperaturas locales, ofrece sombra para los animales, acumula biomasa para energía y ofrece oportunidades de recreación para las poblaciones locales. Las plantaciones realizadas con Tamarugo, así como los bosques naturales, han significado la transformación del ecosistema desértico absoluto en un agro-ecosistema y la apertura al desarrollo social y económico de la zona. La productividad del tamarugo está relacionada con la edad, distancia de plantación, profundidad y calidad del agua de la napa freática; asimismo el manejo inicial que se observa en las plantaciones, tiene incidencia en la productividad. Las plagas y sus tratamientos también tienen marcada incidencia.

La fructificación se presenta uniformemente en la copa del árbol; los frutos al caer se distribuyen en el suelo, existiendo mayor densidad en la proyección del árbol. Aparentemente, el rendimiento no varía considerablemente. Informa de un control realizado en el año 1957 a 19 árboles, en éste se obtuvo un peso medio de 2,10Kg de frutos por m2 en la proyección de la copa de los árboles; asimismo, en árboles de 30 años de edad, el promedio de frutos y hojarasca por metro cuadrado en la proyección de la copa de los árboles; observó un rendimiento de 3,40 Kg/m2 de materia seca. En árboles de 18 años el promedio fue de 1.8 Kg/m2 de materia seca.

Este árbol produce abundante forraje apetecido por el ganado ovino, bovino y caprino, con 12% de proteína cruda, 30% de fibra y 1,9% de extracto etéreo, siendo la digestibilidad del fruto para proteína, 13,98%; extracto etéreo 1,16%; extracto libre nitrogenado, 28% y total de nutrientes digestibles, 50,58%.

Valor nutritivo

El Tamarugo es un buen alimento, ya que contiene aproximadamente un 5% de proteína cruda digestible y el total de nutrientes digestibles alcanza a 55%. El relativamente bajo valor del fruto del tamarugo en cuanto al total de nutrientes digestibles, no debe ser interpretado como índice de bajo valor nutritivo, ya que estos valores son relativamente comparables a los valores de un alimento concentrado.

Los hidratos de carbono y la proporción de fibra son adecuadas y entran en su composición, grasas suficientes para que los ovinos y caprinos no sufran, establece que los forrajes estudiados pueden ser clasificados como material tosco, cuyo volumen de fibra es alto, particularmente del fruto, sugiere que se complementen con otro forraje para constituir una dieta equilibrada para la oveja y la cabra durante los períodos más exigentes (final de preñez y comienzos de la lactancia).

Compuestos químicos

Estos frutos estan compuestos por: cada 100 gs de frutos contiene: 3,34g de agua, 11,14 g de proteína, 1,26 de grasas, 79,63 de carbohidratos totales, 31,45 de fibra, 4,27 de cenizas, 280mg de Ca, 1,440mg de P.

Reproducción

Eeste árbol se reproduce por semillas que conservan la viabilidad hasta 15 años o más. El número de semillas por kg oscila entre 79.000-110.000. Un kg de frutos o vainas proporciona entre 70-156 g de semillas puras.

  • Recolección de semillas: Se marcan los árboles productores según sus características fenotípicas; se recolectan los frutos desde octubre hasta enero, procediendo a limpiarlos mecánicamente y luego molerlos en un molino de piedra con 4 mm de separación; después, por cribado y flotación, se obtiene la semilla limpia. La semilla se trata con ácido sulfúrico por siete minutos con el objeto de producir un desgaste de la cutícula y facilitar el intercambio de gases y la penetración del agua por la única abertura-micrópilo que tiene la semilla. Esto produce la rehidratación de los coloides y se inicia el proceso de germinación.
  • Vivero: Se prepara una mezcla de suelo y guano de oveja en proporción de 2:1. Se llenan bolsas plásticas, sin agujeros, de 12 cm de diámetro por 30 de longitud, las que actúan como macetas. La siembra se hace con 3 a 5 semillas por bolsa a una profundidad de 1,5 cm.
  • En cuanto a riego, es importante mantener húmeda la parte superficial donde están ubicadas las semillas, sin producir acumulación de agua, para evitar la infestación con hongos. Previo a la siembra, es conveniente tratar el suelo con fungicidas específicos o fumigantes como el bromuro de metilo, a fin de evitar cualquier patógeno en los inicios del proceso de germinación y primeros estados de desarrollo de las plántulas.

Una vez germinada la semilla y emergida la plántula, se riega con mayor cantidad de agua pero con intervalos de tiempo más largos, asegurando el suministro de humedad a la raíz que va creciendo en profundidad. Es indispensable inocular cuando no in-situ. La plántula permanece en vivero de 3 a 5 meses, hasta que alcance una estatura de 8 a 10 cm. Como el desarrollo radicular es rápido y vigoroso, hay que evitar que las raíces pasen o rompan la bolsa de plástico.

  • Plantación: Se utilizan los siguientes sistemas de plantación: 10 x 10m y 15 X 15m en cuadrado y triangulación. El hoyo de plantación es de unos 30 cm de diámetro por 40 ó 50 cm de profundidad, puede hacerse en forma manual o mecánica. En el primer caso, pueden tener un diámetro mayor debido al proceso de remoción de las costras salinas superficiales; en el segundo caso, se ejecuta la operación con un tractor oruga con pala frontal de diseño especial, que deja una especie de trinchera de 80 cm de ancho por un metro de longitud en su base. Al efectuar esta operación se llega al suelo "agrícola" o "dulce", como también se lo denomina. La profundidad de la taza depende del terreno; generalmente es de 80 cm de diámetro en relación a la profundidad de la costra salina, la cual hay que sobrepasar antes de hacer el hoyo de plantación. Descubierto el suelo, se hace el hoyo que tiene 30 cm de profundidad por 20 cm de diámetro, haciéndose manualmente o por medio de un barreno hoyador accionado mecánicamente. Antes de plantar se da un riego de saturación al hoyo de plantación, a fin de humedecerlo lo más profundamente que se pueda.
  • Riego: para que las plantas se establezcan normalmente, la cantidad de agua de riego debe ser suficiente como para que penetre hasta el sector de las raíces manteniendo húmeda esa zona. El número de riegos de establecimiento según las condiciones del nivel freático y profundidad de la humedad, va a variar considerablemente. En promedio se puede calcular que durante el período de establecimiento se aplican 11 riegos. El establecimiento de la planta se caracteriza por la emisión de brotes nuevos, y cuando esto sucede, los riegos pueden distanciarse a 20 días uno de otro.

Lo más importante es evitar un exceso de agua, lo que se refleja en la primera etapa de la plántula con una caída por hongo, y cuando está más crecida, por un color amarillo de las hojas. En los costos de plantación uno de los rubros más importantes corresponde al valor de los riegos. Una de las formas de disminuir el número de riegos es reducir la evaporación del agua de riego mediante la utilización de plástico en el hoyo de plantación, y otro por medio de un suministro más lento del agua (goteo), que permite un mejor aprovechamiento.

Plagas que lo afectan

Son afectados por insectos y ácaros que dañan el follaje y las ramitas: Leptotes trigemmatus, lepidoptera (palomilla violeta); Tephrinopsis memor, lepidoptera (gusano medidor),Pegador de hojas, microlepidoptero; Hemiberlesia rapax, homoptera; Heteropysylla texana, homoptera; Aphis sp, homoptera (pulgón del Tamarugo); Cecidómido, diptera. Insectos que destruyen la inflorescencia: Ithome sp, lepidoptera (polilla de la flor); Leptotes trigemmatus; Tephrinopsis memeor, lepidoptera; Franhiella rodeos, thysanoptera (trips del Tamarugo); que dañan el fruto y la semilla: Crytophlebia carpophagoides, lepidoptera (polilla del fruto); Leptotes trigemmatus, lepidoptera; Scutobruchus gastoi, coleoptera (bruco del Tamarugo):

Las tres especies consideradas de mayor importancia son la polilla de la flor, la palomilla violeta y la polilla del fruto. Las dos primeras presentan varias generaciones en la época crítica, en cambio, se cree que la tercera sólo tiene una generación, ya que se observa que sus larvas, después del último estado larvario, pasan a un estado de diapausa que dura hasta el inicio de la próxima temporada. El daño causado por la polilla de la flor y la palomilla violeta es muy importante y puede alcanzar hasta sobre un 52% . Insectos polinizadores, polinizadores autóctonos o nativos: Centrix mixta. Polinizadores introducidos: Apis melífera.

Fuente