Valentín Almirall y Llozer

Valentín Almirall y Llozer
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NombreValentín Almirall y Llozer
Nacimiento8 de mayo de 1841
Barcelona, Bandera de España España
Fallecimiento20 de junio de 1904
Barcelona, Bandera de España España
NacionalidadBandera de Argentina
CiudadaníaBandera de Argentina
OcupaciónAbogado y político y escritor

Valentín Almirall y Llozer. Abogado y político y escritor español nacido en el seno de una familia perteneciente a la aristocracia, recibió estudios en los mejores colegios de Barcelona, hablaba varios idiomas.

Síntesis biográfica

Nacimiento

Valentín Almirall y Llozer nació en Barcelona el 8 de mayo de 1841 en el seno de una acomodada y aristocrática familia. Estudió en los mejores colegios de Barcelona, hablaba varias lenguas y se licenció en Derecho en 1863. Su actividad política comenzó en 1868 al participar en la revolución que aquel año derrocó a Isabel II y ser designado concejal por la junta revolucionaria de Barcelona.

Alistado en las filas republicano-federalistas encabezadas por Pi y Margall, dio a la luz sus primeros escritos políticos, como Guerra a Madrid y Bases para la Constitución federal de la Nación Española y para la del Estado de Cataluña, dirigidos a propagar su ideario federalista y contrario a la administración centralista. Durante sus años de actividad política publicó varios cientos de artículos, la mayoría de ellos en castellano, que ejercieron gran influencia en el incipiente catalanismo político.

Su Obra

A lo largo de su vida promovió y dirigió varias publicaciones de ideología republicana federal. Una de las más importantes fue El Estado Catalán, autotitulado diario republicano-federalista intransigente, que se editó en Barcelona de julio de 1869 a junio de 1870 y en Madrid, ya proclamada la Primera República, de marzo a junio de 1873, tras lo que habría de cerrar a causa de sus muy escasas ventas.

De mayo de 1879 a junio de 1881 publicó el Diario Catalán, que pasaría a la historia por ser primer diario en lengua catalana. También colaboró en La Campana de Gracia, semanario republicano, laico y anticlerical. En 1881 rompió con Pi y Margall a causa de querer hacer una política más centrada en Cataluña y sus problemas.

En 1880 organizó el primer Congreso Catalanista, en el que se evidenciaron dos bloques que no siempre lograrían armonizar sus actividades: por un lado estaban quienes centraban sus intereses y actividad en la recuperación de la lengua y tradiciones culturales catalanas; por otro, entre los que se encontraba Almirall, estaban quienes se mostraban interesados en dar un enfoque político a sus reivindicaciones, como crear una academia de la lengua catalana, defender la pervivencia del derecho privado catalán frente al proceso codificador puesto en marcha por el Gobierno o promover la descentralización administrativa.

Valentín Almirall fue el primer y principal promotor del salto hacia la política que el catalanismo, hasta entonces dedicado a labores lingüísticas y culturales, acabó dando en los años finales del siglo XIX, sobre todo a partir del desastre de 1898.

En 1886 Almirall publicaría su obra fundamental, El catalanismo, primera exposición sistemática de la doctrina política catalanista. En ella explicó los problemas políticos de la España de sus días, lamentando su estado de postración económica, industrial y cultural.

Denunció la corrupción y el gasto público, la poca limpieza de las elecciones y la inmoralidad de los políticos. Consideraba que el factor principal de la decadencia de la nación era lo que él llamaba unitarismo, por lo que estimaba necesaria la descentralización para conseguir que las provincias avanzasen en provecho de toda la nación.

Consideraba varios tipos humanos en España, situando a los catalanes cerca de los anglosajones, por su sentido práctico individualista, mientras que a los castellanos los caracterizaba por su idealismo, encarnado en la figura de Don Quijote. Considerada decaída la España castellana, Cataluña debería tomar el rumbo de España, aunque criticando que sus paisanos catalanes fueran tan narcisistas por considerar todo lo catalán inmejorable y ser incapaces de darse cuenta de sus defectos.

En 1887 Almirall sufrió el primero de los varios ataques de apoplejía que minarían su salud progresivamente. Ello provocó que su influencia se fuera reduciendo en un movimiento catalanista cada día más inclinado hacia la derechista Lliga de Cambó y Prat de la Riba,que chocaba con el izquierdismo de Almirall.

Muerte

Las elecciones de 1901 fueron las primeras en las que el catalanismo político obtuvo un notable éxito, lo cual no hubiese sido posible sin el desastre de 1898. Sin embargo, Almirall no disfrutaría de ese éxito y fallecería apenas tres años después, en su ciudad natal, el 20 de junio de 1904, dos años después de haber publicado su obra capital, El catalanismo, en castellano.

En esta nueva edición escribió un prólogo en el que deploraba las nuevas circunstancias políticas de Cataluña, nacidas tras el desastre de 1898, prólogo que ha sido sistemáticamente olvidado y ocultado durante un siglo. En él Almirall acusó a los catalanistas en general de haber convertido el movimiento por el que él tanto trabajó en uno cultivador del odio y el separatismo del resto de España.

Fuentes