Psicoballet
| ||||||
Antecedentes
El Psicoballet se crea en Cuba el 21 de febrero de 1973, como un sistema integral de atención, es por lo tanto un sistema terapéutico genuinamente cubano, concebido y por iniciativa de la Dra. Georgina Fariña García, bajo el patrocinio y promoción del Comandante Dr. Eduardo B. Ordaz, Director del Hospital Psiquiátrico de La Habana, hospital que hoy lleva su nombre por ser su Director Fundador y por cambiar el “Infierno de Dante”denominado por Fidel Castro en un exitoso lugar de salud mental y por la eximia bailarina Sra. Alicia Alonso Directora del Ballet Nacional de Cuba.
Después de cinco años de arduo trabajo voluntario del grupo fundador, psicólogos y bailarines, validando los beneficios del programa, que se aplicó inicialmente a niños con trastornos de la conducta con exitosos resultados hasta lograr un 92% de alta en estos pequeños pacientes provenientes del Hospital Infantil Docente Angel Arturo Aballí;
posteriormente el Director provincial de Salud de La Habana, Dr Abelardo Ramírez López, nombrado en 1976 Vice Ministro Primero hasta su fallecimiento, oficializó el programa en 1977 y lo adscribió como Departamento al Hospital Psiquiátrico de La Habana, a solicitud del Dr.Ordaz.
Con mayores condiciones se elevó la actividad asistencial, docente e investigativa, hasta 2007 se habían atendido exitosamente a veinte y cinco mil personas con necesidades especiales dentro de las categorías de tratamiento implícitas en Psicoballet: Prevención, Curación, Habilitación, Rehabilitación y Reeducación. La normalización de sus procesos y funciones, publicaciones y premios alcanzados hablan de esta fructífera etapa de su desarrollo.
En 1984, luego de evaluar 11 años de aplicación exitosa comprobada y expuesta en el I Work Shop de Danza para discapacitados, patrocinado por la UNESCO (sede de París) del 14 al 28 de marzo 1983, teatro del Museo de Bellas Artes y por la similitud de sus características con los principios y objetivos que la UNESCO promueve, la Comisión Nacional Cubana de la UNESCO, presidida en ese entonces por la eminente profesora Dra. Vicentina Antuña, constituye el “Grupo UNESCO de Psicoballet de Cuba”.
En 1994, durante la I Conferencia Internacional Psico-Habana 94(Palacio de las Convenciones) se constituye la Asociación Latinoamericana de Psicoballet integrada inicialmente por 11 países del hemisferio. Este Grupo se convierte en el Centro Referencial de Psicoballet para América Latina y el Caribe y actualmente con 15 países miembros del Grupo Internacional, otros tantos países con grupos de trabajo y también como referencia para Europa.
Actualmente la aplicación de Psicoballet se ha hecho mucho más profunda y extensa, tanto como Referencia en Cuba como para otros muchos países, que preparados por el Grupo, lo aplican con reconocidos éxitos y aún premios por la labor social, solidaria y humanista que realizan.Como es conocido Psicoballet puede aplicarse por varias vías: Salud, Cultura y Educación, estas vías se trabajan intensamente en Cuba,desarrollándose así múltiples posibilidades del Método. La vía terapéutico cultural se desarrolla apoyada por el Consejo Nacional de Casas de Cultura y por la Oficina del Historiador, la de Salud se desarrolla en el Hospital Pediátrico Marfan por el Grupo continuador y la de Educación funciona en varias escuelas especiales del País, siendo la primera en incluir Psicoballet dentro de su programa oficial la escuela especial “Nueva Ilusión”.
Aplicación
El Psicoballet se presenta como una efectiva terapéutica de rehabilitación mental y social, es un programa cubano de atención a personas con trastornos de conducta, enfermos mentales y niños con síndrome Down. De ninguna manera es un trabajo unipersonal e independiente. Por el contrario, es una estructura teórica, metodológica y técnica pluridisciplinaria, producto del trabajo de muchos/as. Este tipo de danza es muy compleja de practicar, por eso requiere de aquellos que lo practican, una gran disciplina para realizar los objetivos, entre ellos especialmente el de estimular la autovaloración y la autoestima.
Desarrollada en ciclos de ocho a nueve meses en diferentes etapas, las sesiones abarcan calentamiento físico, ejercitación técnica y expresión creativa, dirigidas por un psicólogo y el especialista de ballet o danza, donde cada caso es valorado previamente antes de iniciar el ciclo. Se inicia con sesiones en las que el médico comienza a familiarizarse con su paciente, y éste a su vez aprende, crea, recibe amor y respeto por el esfuerzo que realiza; lo que lo ayuda a recuperar su autoestima y aprender a ser lo más feliz posible aún en medio de sus limitaciones. Valorado y estudiado por un equipo médico multidisciplinario, el enfermo es ubicado en grupos acorde a su edad: sean niños, adultos y hasta ancianos, en diferentes categorías, catalogadas de prevención, curación, habilitación, rehabilitación, reeducación y atención primaria para pacientes proclives a algún trastorno de conducta. También es aplicable a desajustes emocionales, estrés, limitaciones físicas y mentales y hasta a embarazadas de alto riesgo y bebés con retardo psicomotor, entre otros.
Utilización del ballet
El baile proporciona placer, relajación y calma, ayuda a ganar conocimiento y eleva la cultura general; además de reportar orgánicamente mayor secreción de endorfina o morfina natural segregada a través de la hipófisis. En los primeros casos tratados, de niñas con cierta conducta agresiva, se observó la reacción favorable tras iniciar las primeras sesiones.
Los enfermos, aprenden elementos musicales, como los tiempos en el ritmo, y trabajan en demostraciones individuales con medios gimnásticos complementarios, como aros, cintas, cuerdas, pelotas y otros. Acompañados de música instrumental, en coreografías que incluyen salsa, [[merengues]] y representaciones de ballet elemental, el baile favorece la comunicación y el aspecto físico, la disposición y disciplina con cada ejecución, lo que evidencia el placer que sienten al ser reconocidos.
