Cuerpo de Guardabosques

Cuerpo de Guardabosques de Cuba Institución con sede en Cuba Siglas o Acrónimo: CGC Fundación: 10 de abril de 1959 Presidente: Coronel Manuel Lama Gómez País: Cuba Sede: Calle 34 e/ 39 A y 39 B, Playa, La Habana

Fundación y objetivos

El 10 de abril de 1959, a solo tres meses del triunfo de la Revolución Cubana, se dictó la Ley No. 239, conocida como el “Plan de Repoblación Forestal por el Ejército Rebelde”. En la misma, se recogieron los principales objetivos que perseguía la legislación, que se resumen en:{{Sistema:Cita|“…la recuperación, conservación, fomento y aprovechamiento de los recursos naturales renovables del país, protegiendo los montes; repoblando los suelos forestales y organizándolos como fuentes permanentes de materia prima y trabajo estable, en beneficio de la economía y el progreso general de la nación”. Esta fecha de aprobación de dicha ley se considera el día de fundación de la institución, aunque el nombre de Cuerpo de Guardabosques se adoptó en julio de 1978. En 1980, se decidió subordinarlo al Ministerio de la Agricultura. Desde 1994, el CGC se integró como un órgano subordinado al Ministerio del Interior (MININT).

Estructura

El Cuerpo de Guardabosques de Cuba tiene:

• La Jefatura nacional, con direccioes y departamentos que agrupan las principales líneas de trabajo de la institución.
• Jefaturas provinciales y en el Municipio Especial Isla de la Juventud.
• Unidades en diferentes territorios, en dependencia de las características boscosas.

Regulaciones legales y estatales

Con el transcurso de los años, se han actualizado las regulaciones legales y estatales relacionadas con el trabajo del Cuerpo de Guardabosques y adaptarlas a las condiciones del país. Ya en el Siglo XXI, se hizo evidente la necesidad de perfeccionar las acciones para preparar a la población por todos los canales de comunicación existentes, enfatizando en el trabajo de prevención. Dentro de esto, la necesidad de incentivar una cultura forestal que permita aumentar la percepción de riesgo ante el daño que ocasionan los incendios forestales. Dichos riesgos no son solo a las personas que puedan verse afectadas directamente (que es el principal riesgo a evitar), sino a sus viviendas, centros de trabajo y de recreación, pero también que causan afectaciones al medio ambiente y a la naturaleza del lugar donde se producen dichos incendios. Y estas afectaciones, no se recuperan de forma inmediata. Con este fin se aprobó la Directiva # 1 del CGC y se ha implementado la Ley 85 referida a los incendios forestales. A la par del Programa Nacional para la Gestión y Manejo del fuego en los bosques (2018-2025), para regular el tratamiento de estos fenómenos de manera ordenada y sistémica, con una proyección de extenderse hasta el 2030 como parte de la Tarea Vida por el Cambio Climático. Buscar referencia

Campaña Nacional de Prevención

Cada año, el Cuerpo de Guardabosques de Cuba, desarrolla la Campaña Nacional de Prevención contra Incendios forestales.

Guardabosque cubano inspeccionando el terreno

Esta campaña se prevé en los primeros meses del año, entre enero y mayo generalmente, pues los estudios y los resultados analizados durante muchas temporadas, han demostrado que esa primera parte de cada año, es el período más favorable para la ocurrencia de estos desastres. Y dentro de la misma, los meses de mayor probabilidad son marzo y abril por el aumento de la sequía, los vientos, la humedad del suelo y los cambios de la temperatura. En los meses de la Campaña, las fuerzas vinculadas a la protección de los bosques redoblan la vigilancia y adoptan medidas para reducir la ocurrencia de siniestros en este período de alta peligrosidad. La preparación de la campaña generalmente comienza desde noviembre del año anterior, con encuentros que se organizan con todos los factores involucrados, con el propósito de adoptar acuerdos en función del trabajo para el enfrentamiento de estos fenómenos.

Principales resultados

El Cuerpo de Guardabosques de Cuba ha mantenido una acción sistemática, tanto en la prevención como en la extinción de los incendios forestales. Por citar ejemplos de los años recientes, se han destacado en la extinción de grandes incendios ocurridos en Mayarí (en la zona oriental) y en Pinar del Río (en la región occidental del país). Tener en cuenta que, trabajar de forma directa en la extinción de un incendio, implica muchos riesgos para las fuerzas que participan, mucho más si son de grandes proporciones como los anteriormente mencionados. En abril de 2025, el incendio reportado en Minas de Matahambre, se definió como un incendio “muy grande”, dañó más de mil hectáreas y necesitó durante un periodo de la acción permanente de guardabosques y bomberos, así como otra cantidad de personal de diferentes especialidades, además de vehículos y medios técnicos de varios tipos.

Guardabosques cubanos enfrentando incendio en Artemisa

Importante ha sido su labor igualmente para dar a conocer los peligros que se pueden evitar, en este caso, enfatizando en las causas que se han determinado de los incendios ocurridos, a partir de los análisis realizados. En el año 2020, por ejemplo, se informó que la inmensa mayoría de las causas de la propagación de incendios estuvieron vinculadas con la negligencia, o sea, la actividad irresponsable del hombre en sus actividades diarias. La institución ha divulgado, como parte de su trabajo preventivo, cuáles acciones negativas han sido las más frecuentes, tales como las que provocan los cazadores, fumadores y el tránsito de personas por áreas boscosas o cerca como paso habitual entre comunidades y zonas de trabajo, y también, las generadas por maquinaria agrícola. En este sentido, los miembros del CGC que trabajan en las áreas boscosas, han realizado labores profilácticas para velar por que los carros que se adentren en esas zonas, tengan los llamados “matachispas”. En 2022, se logró sofocar el 84 % de los incendios provocados, indicador que se ha mantenido durante 12 años consecutivos por encima del 70 % de efectividad, ratificando la preparación y el coraje de las fuerzas del CGC, a pesar de los escasos medios de protección con que cuentan para las tareas de enfrentamiento. Además de las multas y las críticas a los infractores, la institución ha promovido desarrollar una conciencia proteccionista en los demás. La misión de muchos de sus trabajadores, sobre todo de los que radican en las áreas cercanas a los bosques, ha estado en proteger con conversatorios e intercambios personales y hacerles entender a las personas que entran en el área del bosque (y también a los habitantes de los poblados cercanos), que hay que cuidarlo, que es parte de su zona de convivencia y de trabajo. Todo lo anterior, contando con las extensas caminatas que deben realizar por zonas de difícil acceso y los riesgos dentro de un incendio.<ref<Guardabosques controlan cuatro de los siete incendios forestales activos en oeste de Cuba Swissinfo, consultado el 24 de abril de 2025</ref>

Trabajo con niños y jóvenes

CGC Concurso Infantil

Para el CBC ha sido importante también, el trabajo profiláctico desde la infancia y la juventud. En el mismo se destacan los Círculos de Interés, que se organizan en las escuelas. Los representantes del Cuerpo son los que se dedican a enseñar a estos pioneros y estudiantes sobre los principales aspectos que comprende este trabajo y las medidas para proteger esas zonas boscosas.

Generalmente, son áreas cercanas a las escuelas donde funcionan esos Círculos de Interés, por lo que representan lugares conocidos para esos menores y también, les permite instruirse de cómo prevenir los incendios forestales.

Igualmente, se convocan a concursos de poesía, cuento y pintura para niños y jóvenes. En estos concursos intervienen los integrantes de los círculos de interés atendidos por los instructores de esa fuerza del Ministerio del Interior y evidencia la consolidación de su labor en escuelas.