Mauricio Marcelli
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Mauricio Marcelli Violinista, director, compositor y arreglador
Síntesis Biográfica
Mauricio Marcelli, violinista, director, compositor y arreglador nace en Buenos Aires Argentina el 12 junio de 1941. Comienza a estudiar violín de niño, en el seno de una familia Italiana adepta a la música. Su padre es violinista aficionado y debe haber influido en Mauricio, que comienza a estudiar a los 6 años.
Trayectoria
Mauricio Marcelli transcurría el año 1968, cuando Osvaldo Pugliese convoca a jóvenes músicos de excelente formación para integrar su orquesta que había sufrido el éxodo de quienes forman el célebre Sexteto Tango.
Estos jóvenes músicos hacen irrupción con su enorme talento, el que los tiempos futuros se encargan de confirmar. El maestro ubica en el puesto de solista y primer violín, reemplazando a Oscar Herrero, a Mauricio Marcelli, quien permanece en la orquesta durante 6 años, haciendo además algunos de los arreglos.
Llega a este sitial con el antecedente de haber integrado las orquestas de Enrique Mario Francini, Argentino Galván, Alfredo Gobbi y Aníbal Troilo y de haber sido convocado para acompañar en las grabaciones a cantantes de la talla de [[Alberto Podestá, Alberto Marino, Floreal Ruiz y Roberto Goyeneche, entre otros. Luego es solista de las formaciones de Atilio Stampone, con quien recorre diversos países de América y Europa.
Pero los frutos de su paso por la orquesta de Pugliese lo impulsan al lugar de privilegio que alcanza y motivan que Horacio Ferrer en su clásico El Libro del Tango lo sitúe en un mismo plano con Fernando Suárez Paz y Antonio Agri.
De formación clásica, comienza a recorrer a un mismo tiempo un camino eminentemente popular, mientras seguía perfeccionándose en armonía, composición y contrapunto. Simultáneamente con su actividad tanguera de primera magnitud, se desempeña en la Orquesta Sinfónica Juvenil, luego en la Sinfónica Nacional y finalmente en la Orquesta Estable del Teatro Colón donde ocupa el atril de primer violín, es decir fue uno de los concertinos durante 24 años, hasta retirarse en 2009.
Cumple igual rol en las nuevas formaciones líricas del Teatro Avenida. Es miembro de diversos grupos de música de cámara, como la Orquesta de Cámara de La Plata, la del Teatro Colón y el quinteto de cuerdas Ensamble del Plata.
Su paso por las grandes orquestas de música clásica no le impiden seguir aferrado al tango, género en el que adquiere un sonido que lo distingue y sus composiciones y arreglos son tributarios de su formación clásica sin apartarse en absoluto de la esencia del tango.
Dirige varios conjuntos propios, el octeto Octango y varias formaciones, generalmente quintetos y su dúo con Hugo Romero. Graba y actúa asiduamente y tiene como invitados en diversas ocasiones a Dino Saluzzi, Rodolfo Mederos, Osvaldo Requena, Antonio Agri y Cacho Tirao, entre otros. Hernán Salinas es uno de sus cantantes predilectos. Sus CD Tangos sin Tiempo, Romance de Tango y Motivos reciben una cálida acogida por el público y la crítica especializada.
Dirige grandes agrupaciones musicales como la Orquesta de Tango de Buenos Aires, la Orquesta Escuela de Tango Emilio Balcarce, la orquesta Selección Nacional del Tango y es miembro invitado en la Orquesta Nacional de Música Argentina Juan de Dios Filiberto. En otro género, cumple igual función en el espectáculo Drácula, de Pepe Cibrián y Ángel Malher.
Como Francini, es discípulo del gran maestro José Martí Llorca, de quien recibe lecciones hasta su desaparición en 1996, cuando Marcelli ya es un violinista consagrado.
Junto a Rodolfo Mederos y Raúl Garello es jurado del concurso de arregladores «Premio Osvaldo Pugliese y, desde 1996, es profesor de la Escuela de Música Popular de Avellaneda.
Realiza giras por toda América, inclusive acompañando a Julio Bocca en los Estados Unidos y al Ballet Argentino, en Buenos Aires y Nueva York y toca como invitado en Bélgica, España, Italia y Francia.
Acompaña en París a El Arranque en una gira a la que es invitado junto a Raúl Garello, Néstor Marconi y Julio Pane. Con El Arranque participa como director y solista en el Festival Génova Tango 2004, con obras propias.
Toca en China y, en cinco oportunidades, hace giras prolongadas por Japón como primer violín de Fulvio Salamanca, Néstor Marconi y Orlando Trípodi y, en la última, como director de su propia orquesta, ofreciendo 61 conciertos y recorriendo la mayoría de las ciudades japonesas, donde es altamente reconocido.
Inspirado compositor y fino arreglador se destacan sus composiciones en tiempo de tango como “Con cierto vuelo”, “Diciembre en Buenos Aires”, “Después de la medianoche”, “Puerto Nuevo [c]”, “Menta y miel”, “Luztango” y “Equivocados”, entre otros.
