Pedro Narciso Arata

Pedro Narciso Arata Protagonista de los primeros años de la cienciaargentina. Nombre Pedro Narciso Arata Nacimiento 29 de octubre de 1849 Buenos Aires, Argentina Fallecimiento 5 de noviembre de 1922. Argentina Padres Nicolás Arata y Emilia Unzué

Pedro Narciso Arata. Fue uno de los más destacados químicos argentinos de todos los tiempos, y también un destacado protagonista de los primeros años de la ciencia nacional. Fue además un funcionario público de larga trayectoria en campos relacionados con la educación, la higiene municipal y la bromatología.

Síntesis biográfica

Nació en Buenos Aires el 29 de octubre de 1849. Hijo del italiano Nicolás Arata y la porteña Emilia Unzué. En 1858, su familia se trasladó a Italia y allí realizó los estudios primarios que completaría en Buenos Aires, en el Colegio San José, en 1863. Ingresó luego en el departamento de aplicación de la Universidad de Buenos Aires, donde culminó su primer año con medalla de oro, en 1868, y se graduó en 1869.

Estudios universitarios

En 1874, comenzó los estudios universitarios en la Facultad de Ciencias Médicas, al mismo tiempo que dictaba clases en la Facultad de Ciencias Exactas. Se graduó en 1879 con una tesis donde desarrollaba un estudio químico de las plantas: Análisis inmediato de los vegetales.

Trayectoria como docente

Daba clases particulares a muchos de sus condiscípulos. Al terminar los cursos, éstos, entre quienes se contaba a Roque Saénz Peña (luego Presidente de la Nación), José María Ramos Mejía y Luis Güemes, le retribuyeron su dedicación con las obras de Química Aplicada a las Artes de Dumas. Éste tipo de libros decidieron al joven a orientar su vocación hacia la ciencia química. Poco tiempo después de graduado, comenzó a dictar el curso de Química en la Facultad de Ciencias Médicas, cargo que mantendría hasta el final de su carrera docente, en 1911.

En 1872, se convirtió en el principal impulsor de la Sociedad Científica Argentina, que creó junto a otros grandes científicos, de la talla de Estanislao Zeballos, Luis Huego, Francisco P. Moreno, Juan Kyle y Guillermo White. Fruto de estas iniciativas, un año después nacería el Club Industrial, antecedente de la Unión Industrial Argentina.

Higienista

Su vocación profesional, a medio camino entre la química y la medicina, le hicieron volver la atención sobre la higiene de la ciudad y las medidas de asepsia en la elaboración de alimentos. Con esta dedicación, comenzó su trayectoria de funcionario público en [[1874, cuando organizó la Oficina de Inspección de Alimentos, que tendría una corta vida. Fue luego químico consultor de la Municipalidad. Contribuyó a la higienización de la ciudad, aunque también se dedicó a la investigación pura: así publicó varias obras sobre higiene, química y alimentos, como:

• El clima y las condiciones de higiene en la ciudad de Buenos Aires.
• Apuntes de química.
• Lecciones de higiene, y su Guía para el análisis inmediato de los vegetales.

También colaboró en numerosas revistas, a través de decenas de artículos científicos sobre memorias de química con estudios y resultados originales sobre plantas medicinales y útiles de América.

Bibliófilo

Fue un bibliófilo apasionado (llegó a reunir una colección de casi 60 mil obras de gran valor documental, muchas de las cuales forman hoy parte del patrimonio de la Facultad de Agronomía) y un sabio a la manera antigua, es decir, formado a la manera enciclopedista y poseedor de una vastísima cultura.

Muerte

Falleció en Buenos Aires el 5 de noviembre de 1922.

Cargos

• Creador, en 1883, de la Oficina Química Municipal, la cual dirigiría hasta 1911 y que hoy lleva su nombre.
• Ocupó la presidencia del Departamento Nacional de Higiene y de la Comisaría de Patentes.
• En 1903 fue nombrado Director General de Agricultura.

• En 1904, fue comisionado para dirigir el Instituto Superior de Agronomía y Veterinaria, una casa de estudios agronómicos a establecerse en Buenos Aires y que, en menos de diez años se transformaría en la Facultad de Agronomía y Veterinaria de la UBA.

• Presidente del Consejo Nacional de Educación (hasta 1916) y profesor honorario de la Facultad de Ciencias Médicas.
• Con proyección internacional, además fue miembro académico de las facultades de Ciencias Exactas, Ciencias Médicas y Agronomía y Veterinaria, y perteneció a institutos científicos de Madrid, Roma, Berlín, Santiago de Chile y París.

Homenaje

La Facultad le ha reconocido, en distintos tiempos, su labor fundadora: suyo es el nombre del Instituto de Química y del Pabellón donde dictó las primeras clases, de la Parada del Ferrocarril Urquiza, sobre la Avenida Chorroarín; de la biblioteca que guarda sus propios libros y de la avenida de las casuarinas que él mismo plantó hace ya casi 95 años. Son merecidos homenajes a un hombre de gran valía, fundamental para que la Facultad de Agronomía sea hoy la institución más afamada de la enseñanza agronómica en el país.

Fuentes

• El legado de una valiosa Biblioteca: Pedro Arata [1]. Consultado el 24 de mayo de 2018 de 2015.