Cephalanthera damasonium

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Nombre Científico:Cephalanthera damasonium
Reino:Plantae
Clase:Magnoliopsida
Orden:Asterales
Familia:Orchidaceae
Género:Cephalanthera

Cephalanthera damasonium. Orquídea terrestre, perenne, rizomatosa amante de la sombra, que pertenece a la familia de las orquidiáceas.

Antecedentes del nombre

Especie: Cephalanthera damasonium

Cephalantera: nombre genérico que proviene del griego, igual a "cabeza" y el latín "antera", es una referencia a la forma globular de las anteras de la flor, similar a una cabeza.

Damasonium: proviene del griego antiguo y significa (yo elimino/disminuyo), quizás una referencia a un supuesto valor medicinal de esta planta.

Identificación

La orquídea Cephalanthera damasonium se diferencia de las otras especies por su bráctea basal más ancha, además es bastante más tolerante con los hábitats oscuros creados por las densas copas de los árboles.

Las hojas de esta especie, son más numerosas, más estrechas y más puntiagudas. Se diferencia también de las otras orquídeas por el color de la flor que es blanco cremoso de aspecto ligeramente descolorido.

Zona de distribución geográfica

La localizamos en casi toda Europa, suroeste de Asia, Cáucaso, Anatolia, Persia y el noroeste de África donde su presencia consta únicamente en Argelia. En las Islas Baleares solo se conoce de Mallorca. También ha sido citada en China.

(Vida Silvestre)

Vida silvestre

Habita en bosques caducifolios, encinares, quejigares, sabinares, pinares y generalmente en suelos calizos, en lugares húmedos y umbrosos a una altura sobre el nivel del mar entre los 400-1700 m de altitud.

Características

Porte

Planta herbácea, que alcanza una altura entre los 8 a 60cm, pero muchas mantienen los 18cm de altura.

Bráctea

Las brácteas muy estrechas, verdosas y acortándose hacia la punta del tallo. Más abajo, a menudo son más largas que las flores.

Flor

Las flores de 1 a 16 sostenidas sueltas en el tallo. Grande y de color blanco cremoso, a veces con un toque de verde. Cuando está abierta, la flor revela una mancha amarilla brillante de pseudopolen en el labio. El sépalo superior y los pétalos forman un capuchón suelto sobre el labelo.Florece de abril a agosto.

Raíz

Es un rizoma corto, horizontal, con abundantes raíces fibrosas y fasciculadas.

Hoja

Hojas de 3 a 5 de color verde grisáceo, ovaladas pero volviéndose puntiagudas hacia la punta, espaciadas uniformemente a lo largo del tallo.

Inflorescencia

Tiene inflorescencias con algunos pelos dispersos.

Tallo

Tallo verde y rugoso en la parte superior, y puede ser ligeramente piloso. Hay de 1 a 3 vainas membranosas en la base del tallo, además son macizos y casi glabros.

Semillas

Las semillas son planas, reticuladas, con celdas alargadas.

Forma vital

La forma vital de esta especie de orquídea pertenece al Geófito porque es aquella especie vegetal que transcurre la época desfavorable para el crecimiento de modo subterráneo, bajo la forma de bulbo, rizoma, tubérculo o raíces reservantes.

Polinización

Las flores a veces son polinizadas por pequeñas abejas, posiblemente atraídas por el pseudopolen, pero también las flores de esta orquídea se autopolinizan.

Propagación

  • Propagación por división: para hacerlo, la planta debe ser lo suficientemente grande y debemos cortar al menos tres pseudobulbos. La mejor época es la primavera, cuando comienza un nuevo periodo de crecimiento, para lo que sacaremos y separaremos con cuidado las raíces, y procederemos a cortar el rizoma con un cuchillo afilado y desinfectado.
  • Propagación por esquejes: antes de la floración. Elija un tallo sano y grueso, retire las hojas y córtelo en trozos pequeños de 2 nudos. Inserte la parte inferior directamente en el sustrato. Mantenga el sustrato húmedo y enraizarán y brotarán en unos 2-3 meses. También colocando todo el tallo sobre un sustrato húmedo y cortándolo en pedazos después de que arraigue y brote. Trasplante esos esquejes enraizados en macetas para un mayor crecimiento. Una tercera forma de propagarse mediante el corte es posible durante el clima con altas temperaturas, cuando los tallos desarrollan raíces, y puede cortarlos y plantarlos.

Plagas y enfermedades

Hongos

Para acabar con los hongos, en la mayoría de las ocasiones basta con retirar las partes dañadas, modificar su ubicación y mejorar la renovación de aire. En otras ocasiones y si los hongos son persistentes, podemos acudir al uso de fungicidas. Los hongos más habituales en las orquídeas son: el fusarium, pythium y phytophtora.

Bacterias

No es frecuente que las orquídeas sean atacadas por bacterias, pero es posible. Los ataques por bacterias son bastante escandalosos, podemos observar como las hojas de las orquídeas se deterioran rápidamente. El tejido se vuelve más suave, y adopta una especie de mancha de grasa. No existen remedios efectivos contra las bacterias, ya ataquen a las orquídeas o a otras plantas.

Hay que eliminar las partes dañadas de la planta, o si estuviera afectada toda la planta…desgraciadamente tendremos que eliminarla por completo.Como medida preventiva pondremos en cuarentena la orquídea atacada por bacterias, aislándola del resto.

Virus

Los ataques por virus afortunadamente no son muy habituales. Algunos de los síntomas son rayas en los colores de las flores o cortes bruscos en las hojas de las propias flores. Normalmente las orquídeas ya no vuelven a florecer bien. Son prácticamente imposibles de erradicar, no hay tratamientos útiles pero ni para las orquídeas, ni para ninguna otra planta. La única forma de eliminar el virus es cuidando muy bien de las orquídeas. En casos muy extremos en los que los síntomas aparezcan también en las hojas de las plantas, es conveniente deshacerse de la planta, mejor quemándola para que el virus no se propague. Los virus se transmiten por contacto, es conveniente tener mucho cuidado cuando manipulemos plantas afectadas. Una buena idea es utilizar guantes desechables y si hay que realizar cortes, mejor hacerlos sin herramientas.

Parásitos

  • Las cochinillas: se suelen ocultar en el envés de las hojas, tienen el aspecto de unas costras marrones de forma ovoide. Se eliminan con una solución jabonosa, pulverizando las zonas afectadas. No se deben eliminar las costras, es mejor dejar que se caigan solas.
  • Los piojos de la lana: son unos insectos blancos, que tienen un aspecto como de pequeñas bolitas de lana. Se suelen encontrar en el envés de las hojas, y en los huecos de la planta. Por ejemplo, en el nacimiento de las hojas. El desencadenante para que se produzca esta plaga es la sequedad ambiental. La solución es bastante sencilla, utilizar una solución jabonosa con la que limpiaremos todas las hojas, eliminando los piojos de la lana.
  • Los pulgones: Es la plaga más frecuente entre las plantas de jardín. Se trata de unos insectos de color verde o negro, que encontraremos en los brotes más tiernos de las hojas o las flores. Son realmente peligrosos porque son insectos succionadores, que pueden transmitir enfermedades como hongos o virus de un ejemplar a otro. Para tratar las orquídeas, podemos utilizar esta mezcla en un paño, limpiando las hojas afectadas y pulverizando las zonas más delicadas.
  • Las arañas rojas: se esconden en el envés de las hojas y no son fáciles de detectar, muchas veces no las vemos hasta que atacan la parte superior de las hojas, cuando la plaga está muy avanzada y es fácil observar una tela de araña que cubre las hojas. Podremos observar puntitos en las hojas, y al pasar el dedo por la hoja quedará manchada con los ácaros. Lo mejor es limpiar bien la planta con una solución de agua con jabón potásico. También suele ser efectivo rociar la orquídea con una solución de agua templada con unas gotas de leche. Este tratamiento lo aplicaremos por la mañana a primera hora, para evitar la aparición de hongos.
  • Trips: Detectaremos la aparición de trips, porque las hojas se llenan de motitas de color blanco plateado. Igual que la mayoría de las plagas de insectos, el desencadenante es un ambiente seco y cálido, unido a una falta de nutrientes que deja a la orquídea bastante débil. Para acabar con los trips lo mejor es utilizar un insecticida sistémico. Cuanto antes empecemos con el tratamiento, mucho mejor.

Causas de la extinción

Sujeta a la misma destrucción y pérdida de hábitat que las demás especies de orquídea del mismo género. Ha disminuido drásticamente e incluso se ha extinguido en partes de su área de distribución histórica. La tala de antiguos bosques para cultivar coníferas comerciales de rápido crecimiento con fines de lucro ha causado un daño inconmensurable a nuestra naturaleza y a la desaparición física de la especie.

Fuentes