Fauna de Ciénaga de Zapata

Fauna de Ciénaga de Zapata
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Concepto:Conjunto de especies animales que habitan en una región geográfica, que son propias de un período geológico o que se pueden encontrar en un ecosistema determinado, en este caso en la Ciénaga de Zapata.

Fauna de la Ciénaga de Zapata. La fauna es el conjunto de especies animales que habitan en una región geográfica, que son propias de un período geológico o que se pueden encontrar en un ecosistema determinado. En la región de la Ciénaga de Zapata el agua es también responsable de la distribución de la fauna.

Lo inaccesible que es para algunos los terrenos inundados, en cambio, favorece el éxito adaptativo de aquellos que pueden desplazarse por el aire, los insectos y aves y de los que viven dentro de ella. La gran diversidad de ecosistema y los altos contrastes entre ellos hacen posible la presencia de una fauna diversa y contrastante.

Fauna marina

Peces y crustáceos

De la fauna marina con posibilidad de locomoción en estas costas, son notables la langosta (Panulirus Aarhus), el camarón blanco (Penaeus schmitti), el camarón rosado (Penaeus notialis) y algunos peces óseos: el pargo criollo (Lutjanus anales), la rabirrubia (Ocyueus chysurus), los roncos (Haemulon sps.) y otros.

Coincide que son también estas las especies de mayor utilidad desde el punto de vista comercial. El área de Batabanó, al sur de La Habana, es la zona de mayor producción de crustáceo en Cuba, lo cual tiene su explicación en la extensión y el buen estado de los manglares de la ensenada de la Broa y el Río Hatiguanico, en los cuales tiene lugar el desarrollo de las primeras fases del ciclo de vida de dichos crustáceos.

Moluscos

También son importantes los moluscos, dentro de los que se destaca el cobo (Strombus gigas), que exhibe la mayor de las conchas en Cuba y está en serio peligro de extinción. Estos animales tienen un papel fundamental en la cadena alimentaria de los escosistemas costero-marinos y cuando mueren sus conchas contribuyen a la formación de la arena.

Esponjas

La fauna sésil de estas costas, además de su función ecológica en el ecosistema, es la responsable de la ornamentación de los arrecifes coralinos. Las esponjas ocupan uno de los primeros lugares en cuanto a la biomasa, son diversas en formas y colores, y además son importantes indicadores del grado de estabilidad ambiental. Las más frecuentes son: Clathria juniperina, Cliona aprica y Haliclona compressa.

Corales

Los corales son otros adornos inmóviles de los arrecifes. Todos los corales de Cuba están incluidos en el libro rojo como parte de las especies en peligro del Gran Caribe. Existen tres grupos bien diferenciados y reepresentados en los fondos de la Bahía de Cochinos.

Los corales pétreos tienen el esqueleto compuesto por sales de calcio, muchos de ellos pueden ser confundidos con las rocas y algunos llegan a alcanzar un gran tamaño, son organismos de crecimiento muy lento y de gran longevidad. Constituyen el elemento principal de los arrefices y garantizan protección a las comunidades de peces y crustáceos que allí se desarrollan.

Las llamadas gorgonias son consideradas plantas marinas, por el aspecto ramificado de su estructura. Los más populares son los abanicos de mar Gorgonia flabellum G. ventalina.

El tercer grupo de corales está representado por el llamado coral negro. La especie Anthipathes sp es muy utilizada en la joyería por el precioso color negro de su esqueleto. Esta especie en Cuba habita fundamentalmente por debajo de los 30 m de profundidad, aunque ha sido observada a 18 m existen regulaciones legales para la extracción del coral negro desde 1990.

El manjuarí

De los peces cubanos presente en los acuarios se puede mencionar al manjuarí (Lepisosteus tristoechus), endémico del país, de distribución restringida. Considerado un fósil viviente por el primitivismo de su estructura corporal, pertenece al grupo de los llamados peces pulmonados, y tiene una adaptación que explica su éxito de vida durante tantos años en la Ciénaga. Durante la estación húmeda, el nivel de agua en la Ciénaga es alto y el manjuarí puede encontrarse en cualquier espejo de agua; con la llegada de la seca, el nivel de agua desciende y en muchos lugares desaparece por completo la inundación.

El manjuarí queda atrapado con frecuencia en pequeños charcos que se van secando paulatinamente. Sus pulmones auxiliares le permiten permanecer vivo en el fango, hasta que el nivel de agua vuelve a subir y se restablecen para él condiciones idóneas de vida.Otra especie visible en estos espejos de agua es la biajaca criolla. Está también representado el grupo de los Ciprinodontes, estos por su pequeño tamaño son comúmente llamados guajacones.

Insectos

A pesar de ser un grupo prolífero en la zona, han sido muy poco estudiados. No obtante, se conoce un gran número de coleópteros, que son plaga de los árboles maderables. Son comunes las avispas y otros himenópteros que actúan como control biológico natural, ya que parasitan otros invertebrados o se alimentan de sus larvas. Las abejas benefician al bosque con su función de polinización y al hombre con la miel; mientras las libélulas inundan el aire y sus larvas saturan los espejos de agua. La mariposas han sido mejor estudiadas. Se han reportasdo para el área 77 especies de mariposas diurnas, pero quedan en incógnita las nocturnas, que son más del doble de las diurnas.

Anfibios

Los llamados sapos son los anfibios de mayor tamaño que se pueden encontrar en Zapata. Tienen la misma apariencia de una rana, aunque su tamaño es mucho mayor, su piel es seca y provista de verrugas, y no permanecen como estas en el agua. Se pueden encontrar debajo de piedras en el bosque o entre la hojarasca.

Las ranas dependen mucho más del agua y son más comunes. Asociada al hombre, vive la rana platanera (Osteopilus septentrionales), que es muy frecuente en las viviendas, sobre todo por la noche cuando acuede para alimentarse de los insectos que son atraídos por la luz artifial. La rana toro (Rana catesbeina) es la mayor de las ranas que habitan en Cuba; se introdujo en el país con fines económicos y se ha propagado por todos los espejos de agua de la Isla, recibe este nombre porque emite un sonido grueso parecido al del vacuno; es cazada por los poblados que gustan de su carne.

El tercer grupo de anfibios lo integran unas ranitas muy pequeñas, pertenecientes al género Eleutherodactylus que viven entre la vegetación y que no tienen nombre común muy conocido. En la noche emiten un agradable sonido, que ha llevado en algunos lugares de Cuba a bautizarlas como campanitas. Todas las especies cubanas de este género (excepto una) son endémicas y de ellas se tiene en la zona una escasa representación.

Reptiles

Por la diversidad de hábitats que la Ciénaga propicia, todos los grupos de reptiles tienen aquí algún representante y es curioso notar que en todos los tipos de hábitats hay algún reptil. En el mar se encuentran el carey, la caguama, la Tortuga Verde, tortuga marina y el cocodrilo americano, que jamás entra en contradicción por el espacio con el cocodrilo cubano, ya que éste último reina en las aguas dulces acompañado de la jicotea.

En los hábitats costero-terrestes en general y en otros lugares rocosos, son frecuentes el perrito de costa, la bayoya y el Bayoya Arrastrapanza; y en suelos arenosos, las iguanas. En los bosques, los reptiles aprovechan con eficiencia todo el espacio disponible.

Los ofidios: Majá de Santa María, culebrita ciega, jubo y otros, habitan en el suelo en las oquedades de las rocas o entre la hojarasca. En los árboles, las lagartijas y los chipojos comparten en ocasiones varias especies el mismo árbol, cada una a una altura determinada, con su espacio bien definido sin interferir en el de la otra.

Incluso dentro de las casas podemos encontrar reptiles: unas pequeñas lagartijas llamadas salamancas, que resultan un control biológico excepcional, ya que se alimentan de insectos que pueden resultar nocivos para el hombre, pero a pesar de esto, su aspecto gomoso las ha llevado a conquistar el odio y la repulsión de algunas personas.

Mamíferos

En la zona de Zapata, como en el resto de [[Cuba], los mamíferos no son el grupo dominante. De los mamíferos silvestres vale destacar la jutía (Capromis pilorides), muy perseguida por su carne, y el manatí (Trichechus Manatus), mamífero herbívoro, endémico del Caribe, que ha sido introducido en la Laguna del Tesoro. Habita en las áreas de bosques naturales el venado de cola blanca (Odocoileus virginianus), especie introducida, que vive en vida silvestre. De los mamíferos domésticos se puede encontrar en el ganado vacuno, vacas y búfalos, y también puercos jíbaros.

Aves

La gran diversidad de ecosistemas presentes en Zapata favorece a este grupo, que es el mejor representado en el área y es también el mejor estudiado. Se reportan para Cuba 354 especies de aves y de ellas 230 están reportadas para esta región, lo que significa 65 % de la avifauna cubana. Se protegen bajo el sistema de áreas protegidas de la reserva 68,4 % de las aves amenazadas del país, o sea, 13 de las 19 amenazadas.

Endemismo

Es Zapata el lugar de mayor representatividad del endemismo de las aves. Se encuentran aquí los seis géneros endémicos del país y se consideran pobladores del área 18 de las 21 especies endémicas vivientes. Además son endémicos de la vegetación de ciénaga de la región occidental la Ferminia Cerverai y la gallinuela de Santo Tomás.

Feminia

La concentración del endemismo local de las aves en Zapata es el hecho que más asombra a los científicos. en un área relativamente reducida, que no supera los 2000 km², con un tipo de vegetación predominante, el herbazal de ciénaga, habitan una subespecie y dos especies de aves consideradas endémicas, estrictamente locales de esa zona: la gallinuela de Santo Tomás, la ferminia y la subespecie del Cabrerito de la Ciénaga que están restringidas a vivir solo en ese pequeño pedazo del mundo.El cabrerito, pariente cercano de los gorriones, presenta en Cuba otras dos poblaciones, en Cayo Coco y en Guantánamo. Al parecer, este aislamiento geográfico ha provocado que se vayan diferenciando y se considera el de Zapata una subespecie, diferente del que habita en el este del país.

La gallinuela de Santo Tomás pertenece a uno de los géneros endémicos de las aves cubanas. Aunque es similar al resto de las gallinuelas, tiene otras características que la diferencian: es la más escurridiza de las gallinuelas y su canto difiere del resto. Ferminia es otro de los géneros endémicos y no tiene similares que vivan en Cuba. Esta especie, al igual que las dos mencionadas anteriomente, realiza su ciclo de vida completo en el herbazal de ciénaga y alegra con su bello canto ese ecosistema. Es considerada una de las aves más famosas de Cuba.

Fuentes