Gabriel Millet
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Gabriel Millet y Lara. Escritor y abogado con virtudes cívicas que adornaron su personalidad y elevados sentimientos nacionales ya que fueron varios sus aportes a la patria.
Estudios
Cursó estudios en el Colegio San Fernando y en el Seminario San Carlos y San Ambrosio, donde se graduó de bachiller. Se licenció en Derecho en 1847 en la Universidad de Barcelona.
Síntesis biográfica
Nació en La Habana el 29 de octubre de 1823 en pleno cenit de la sociedad esclavista. Años después regresó a Cuba para ejercer con éxito su profesión en La Habana y Pinar del Río. Como muchos otros intelectuales de su generación, viajó por Europa en busca de nuevos horizontes. Residió algún tiempo en París, aunque se afincó definitivamente en Madrid y anualmente disfrutaba de cortas temporadas en Cuba y mantenía contacto con los problemas cubanos.
Era de origen clasista y poseía varias propiedades urbanas en La Habana y fincas rústicas en la provincia de Pinar del Río, las cuales le reportaban formidables rentas. Entre ellas podemos citar la casa de Mercaderes No.13 (antiguamente marcada con el número 5), que pasó a formar parte de su patrimonio después de que fuera embargada, en 1884. Esta residencia estaba arrendada a los comerciantes e importadores de víveres Sociedad Badía y Compañía. El historiador Julio Le Riverend en su obra La Habana, espacio y vida, cuando al referirse a la vinculación que existió a mediados del siglo XIX de un grupo de hombres ilustrados a la clase financiera, señaló: “Gabriel Millet, el benefactor de la Sociedad Económica de Amigos del País, era director del Banco Industrial Pecuario, del cual poseía 100 acciones.
Trayectoria revolucionaria
Contribuyó a la causa revolucionaria de 1868 con la publicación de folletos y periódicos políticos, por lo que fue perseguido y emigró a España en 1869 tras ser detenido por delito de incidencia se vio forzado a emigrar a la Península. Realizó la constitución de una Sociedad Anónima para la publicación de "La Tribuna", periódico consagrado a los intereses de la isla, dirigido desde Madrid. Fue electo en 1881 diputado a Cortes por los autonomistas de Santa Clara. Contribuyó eficazmente a la erección del mausoleo a José de la Luz y Caballero en el cementerio de La Habana. Propagandista incansable y de un patriotismo acendrado, consagró la mayor parte de su fortuna a fundaciones filantrópicas en Cuba.
Sobresalió también por la ayuda que proporciono a emigrados, prisioneros y cubanos desterrados en Europa. Entre los cubanos que recibieron el generoso apoyo de Gabriel Millet en París, se encuentra el mayor general bayamés, Francisco Vicente Aguilera, quien en 1872, comisionado por Carlos Manuel de Céspedes, realizó un viaje a los Estados Unidos, y luego se trasladó a Europa, con la finalidad de recaudar fondos para la guerra iniciada en Yara, el 10 de octubre de 1868. Desde las páginas del Periódico Patria , el 11 de junio de 1892, nuestro héroe nacional José Martí, con motivo del ingreso de su entrañable amigo, Juan Gualberto Gómez, a la Sociedad Económica de Amigos del País, ofreció elevados juicios acerca de Gabriel Millet, y se mostró conmovido por el gesto altruista del abogado, quien lejos de cualquier sentimiento discriminatorio, premió el talento del periodista, intelectual y patriota matancero al expresar: “...ha sido grande nuestro júbilo al leer que dos cubanos de padre europeo han llevado de la mano un cubano de padre negro á la más alta y meritoria de las sociedades de Cuba, á la Sociedad Económica de Amigos del País...” Y más adelante añade: “...Grande ha sido el júbilo al saber que un cubano de antigua casa, el meritorio Gabriel Millet, y Raimundo Cabrera, puesto en alto por la fuerza de sus obras, acaban de llevar al hermano mulato, al noble Juan Gualberto Gómez, á la casa ilustre donde han tenido asiento los hijos más sagaces y útiles de Cuba...”. También en la literatura, En la Unión, de Guines La Habana) dio a conocer un conjunto de artículos recogidos más tarde en su libro Una pascua en Madruga. Impresiones y recuerdos de 1888. Colaboró, junto con otros emigrados , en diversas publicaciones francesas.
Muerte
El 3 de junio de 1899 falleció en Madrid, a los 72 años de edad, cuando se disponía a regresar definitivamente a Cuba a pasar sus últimos días. En su testamento, instituido dos años antes, había legado gran parte de su fortuna para el fomento y sostenimiento de la enseñanza pública en su patria, además de haber ordenado que sus restos fueran traídos a La Habana.
Fuente
- Gabriel Millet y Lara:un benefactor habanero
- Diccionario de la Literatura Cubana. Editorial Letras Cubanas Ciudad de la Habana, Cuba.Pág.(618-619).
