Oso de las cavernas

Oso de las Cavernas
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Clasificación Científica
Nombre científicoUrsus spelaeus
Reino:Animalia
Filo:Chordata
Clase:Mammalia
Orden:Carnivora
Familia:Ursidae
Hábitat:norte de España, Francia, sur de Inglaterra y Alemania, norte de Italia, los Balcanes, Crimea y el Cáucaso

Oso de las Cavernas. También llamado oso cavernario (Ursus spelaeus) es una especie extinta de mamífero carnívoro de la familia de los úrsidos.

Origen

El oso de las cavernas (Ursus spelaeus) no es un antepasado del oso pardo actual (Ursus arctos), proviene de otra familia de osos que se disoció del Ursus etruscus a la vez que los osos pardos, hace un millón de años. Podemos considerarlo un "primo lejano" de los osos pardos actuales.

Aspecto

Todos tenemos en la mente una idea más o menos aproximada de cómo es un oso pardo actual. Un oso de las cavernas adulto, podría llegar a pesar antes de la hibernación casi una tonelada, el doble que un macho grande de oso pardo europeo. Además de ésto, la cabeza del oso de las cavernas era mucho más voluminosa debido a su frente, más alta y vertical que la del oso pardo.

Algunas características:

Longitud: 2,5 metros, pudiendo llegar hasta los 3 metros en algunos ejemplares.

Altura a la cruz: 1 metro.

Peso: Hasta 1 tonelada (1000 Kg) en algunos ejemplares al principio del invierno

El Mundo del Oso de las Cavernas

El oso de las cavernas es una especie exclusivamente europea. En el mapa adjunto se puede ver el área de distribución, deducida a partir de los yacimientos encontrados.

Se aprecia que, pese a ser un animal adaptado al frío, no llegó a colonizar las zonas más septentrionales del continente.

La especie conoció los episodios fríos y templados de la glaciación WÜRM. Como otros osos, durante el invierno ( entre 3 y 6 meses) el oso se defendía del frío cesando su actividad, descansando, cobijado en oseras que él mismo excavaba o en cuevas que encontraba abiertas y accesibles, este es el caso de la Cueva de los osos de Tella.

No debemos pensar en ningún momento, que el oso de las cavernas vivió en un mundo helado durante todo el año ni durante toda su historia como especie. La glaciación consiste en un descenso de las temperaturas durante todo el año y una mayor duración de la estación fría.

Alimentación

En cuanto a su dieta, el oso de las cavernas era fundamentalmente herbívoro, comía raíces, hojas, bayas, frutos y miel silvestre, si bien a veces complementaba esta dieta con pequeños animales. Se ha dicho de él que era el menos carnívoro de todos los carnívoros.

Pese a que la dentición del oso es claramente la de un animal carnívoro, en sus dientes se han encontrado las huellas de su alimentación herbívora, desgastes típicos causados por la fricción de los dientes con la arena y arcilla del suelo cuando se alimentaba de raíces.

Para conseguir alimento suficiente para su enorme peso, el oso tendría que recorrer distancias considerables, sobre todo en los momentos previos a la hibernación, cuando debía hacer mayor acopio de grasa para pasar el invierno. No se descarta que tuviera hábitos carroñeros si se le presentaba la posibilidad de aprovechar las carcasas abandonadas por otros carnívoros.

El oso y su aspecto fósil

Los osos de las cavernas evolucionaron a partir de la especie Ursus deningeri, hallada en muchos yacimientos del Pleistoceno Medio europeo, y de la que también derivan los osos pardos actuales. La especie apareció hace 250.000 años y se extinguió hace poco más de 10.000. Durante ese periodo de tiempo, su hábitat se restringió estrictamente a los bosques mixtos del continente europeo, evitando las llanuras herbáceas y las zonas de vegetación mediterránea. Con gustos tan exquisitos no es de extrañar que nunca fuese abundante en la fría, seca y deforestada Europa glacial. Las principales poblaciones se encontraban en el norte de España, Francia, sur de Inglaterra y Alemania, norte de Italia, los Balcanes, Crimea y el Cáucaso, zonas montañosas y protegidas de los vientos fríos del norte que servían de refugio a los últimos bosques del continente. Al reducirse estas áreas boscosas durante los máximos glaciales, las poblaciones de osos cavernarios quedaban frecuentemente aisladas y sujetas a la consanguinidad.

Como los osos pardos, los osos cavernarios eran animales solitarios. Despertaban en primavera del largo letargo invernal y pasaban el buen tiempo alimentándose, fundamentalmente de hierbas, frutos y hojas que machacaban con sus potentes molares.

El acoplamiento debía producirse en verano, pues los hallazgos fósiles indican que los oseznos también nacían durante el invierno, como en las demás especies de osos actuales. A finales del otoño, los osos buscaban cuevas en las que pasar el invierno. Si el año había sido malo, no era raro que el oso muriera de hambre durante la hibernación al estar bajo de reservas. Es precisamente en el fondo de las cuevas donde se han encontrado la mayoría de los restos de osos cavernarios, razón por la que han recibido su nombre popular.

Extinción

La nueva fecha coincide con un periodo de cambio climático significativo, conocido como Último Máximo Glacial, cuando un marcado enfriamiento de las temperaturas trajo como consecuencia la pérdida o la reducción de la vegetación que constituía el componente principal en la dieta del oso de las cavernas.

Según las conclusiones de estudios realizados, fue dicha disminución de los suministros de alimentos la que llevó a la extinción del oso de las cavernas, uno de los miembros del grupo conocido como "megafauna", que incluía al Mamut Lanudo, al Rinoceronte Lanudo, al Ciervo Gigante y al León de las Cavernas, los cuales también desaparecieron durante la última Edad de Hielo.

No se han encontrado evidencias convincente de la participación humana en la desaparición de estos osos. El equipo utilizó tanto datos nuevos como registros ya existentes de dataciones con radiocarbono sobre restos de osos de las cavernas, para la elaboración de su cronología sobre la extinción de estos osos.

Muchos científicos habían sostenido con anterioridad que los osos de las cavernas habían sobrevivido hasta al menos hace 15.000 años, pero Pacher y Anthony J. Stuart del Museo de Historia Natural de Londres y la Universidad de Durham, argumentan que la metodología de estos estudios anteriores tenía muchos errores en la datación y confusiones entre los restos del oso de las cavernas y el oso pardo.

Pacher y Stuart también han llegado a la conclusión, tras analizar la anatomía craneal, el colágeno de los huesos y el de los dientes, que estos mamíferos extintos eran predominantemente vegetarianos, y tenían una dieta especializada constituida por plantas de alta calidad. Si se le compara con otras especies de la megafauna que también se extinguieron, el oso de las cavernas tenía un área de distribución geográfica relativamente reducida, ya que estaba confinado a Europa, lo cual explica por qué se extinguió mucho antes que los demás.

Fuentes

  • Jean M. Auel. El clan del oso cavernario (1980)