Tomás Aquino Díaz Álvarez

Tomás Aquino Díaz Álvarez
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Nacimiento7 de marzo de 1920
San Pedro, Ciego de Ávila )Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento1959
Yara, Granma Bandera de Cuba

Tomás Aquino Díaz Álvarez. Combatiente revolucionario, nace el día 7 de marzo de 1920 en la finca San Pedro, Ciego de Ávila. Participó en diferentes batallas en la Columna No. 1 José Martí comandada por Fidel Castro.

Síntesis Biográfica

Nace el día 7 de marzo de 1920 en la finca San Pedro, Ciego de Ávila; sus padres: Manuel Díaz Rodríguez y Teresa Álvarez Rodríguez, españoles de origen humilde. Era el cuarto hijo de una familia compuesta por siete hermanos, seis varones y una hembra; familia muy unida. Apenas pudo estudiar, pues solamente alcanzó el 8vo grado con duro empeño, teniendo que trabajar desde muy joven.

A los 18 años de edad se traslada para el poblado de Buenaventura, cerca de Holguín, donde labora como dependiente de la “Casa Trabanco” tienda de ropa, dada sus relaciones en el trabajo que realiza le es un aval para poder adquirir la agencia de café “El Caracolillo” en Buenaventura, labor que realiza por un tiempo. Contrajo matrimonio can Alba Acosta Heck, el día 16 de octubre de 1944.

En 1945 se traslada para las minas de manganeso de Charco Redondo, Santa Rita, Jiguaní, con su esposa, se ocupa en lo que se le proporciona, trabaja como chofer de un camión volqueta de la compañía minera con el que traslada el mineral para Santa Rita. Este trabajo le duro muy poco tiempo, pues se unió a las protestas obreras y reclamaciones contra la compañía minera y fue despedido.

Compró entonces una guagüita vieja en sociedad con David “El gallego” con la que transportaba pasajeros de Charco Redondo para Santa Rita, más tarde los hermanos Rodríguez que eran dueños de guaguas en Guisa fundaron una ruta de ómnibus para aquella zona, y se vieron obligados a vender la guagua.

Se traslada a Cautillo, barrio de Santa Rita, municipio Jiguani donde labora en la agricultura con dos de sus hermanos, Ramón y Agustín, que ya estaban establecidos allí, obteniendo buenos resultados, por lo que se les proporciona comprar un camión y lo emplean en el traslado de frutos menores para la Ciudad de la Habana.

Nace su primer hijo el 24 de febrero de 1947Tomas Díaz Acosta. En 1948 se amplían en el comercio, pues adquieren un local en Santa Rita y establecen allí un almacén para el acopio de las frutas de campo, se llamó “Hermanos Díaz”.

Transcurre el tiempo y nacen sus dos hijas, Alba Marina y Nieves de los Ángeles, el 11 de septiembre de 1951 y 30 de septiembre de 1954, respectivamente.

Tomás por su carácter afable y respetuoso es persona muy querida dondequiera, por lo que vincula con relativa facilidad a los factores conspirativos.

Acciones revolucionarias

En enero de 1956 el inolvidable Frank País funda en Santa Rita (Jiguaní) la que posiblemente fuera la primera célula revolucionaria del Movimiento 26 de Julio en el territorio que hoy ocupa la provincia Granma.

Tomas es visitado por Frank y otros compañeros, nombrándolo para que se ocupe de la distribución de los bonos, así como de la recogida de dinero de los mismos, también se desempeña en tirar mimeógrafos la propaganda clandestina revolucionaria y a organizar grupos de acción y sabotaje.

Estos grupos estaban compuestos por los combatientes Eladio Fonseca, Luís Domínguez, Felino Labrada, Emelina Díaz Carmona, Eduardo Méndez Gallo, Isiris Rodríguez, Alba Acosta Heck, etc.

S produce el desembarco del Granma el día 2 de diciembre de 1956 y con el se aceleran las actividades revolucionarias de todo tipo, es por lo que Tomás se moviliza rápidamente hacia la zona de Bayamo y es detenido por las autoridades de Batista, cuando se encontraba reunido con varios compañeros, llevado al cuartel de Bayamo donde permanece tres días, fue registrada su casa, no encontrando nada que lo comprometiera, pues ellos escondían debajo de los productos agrícolas las cosas de mayor responsabilidad.

En los primeros días del mes de enero de 1957, dada las características geográficas del poblado de Santa Rita (Jiguani), pues esta muy próximo a las montañas, el ejercito de Batista sitúa un cuartel en dicho lugar, y es escogido precisamente el almacén de los hermanos Días, formando trincheras y levantando barricadas con sacos de arenas en la que le ocuparon también una parte de la casa de vivienda, pues era colindante con el almacén, calle Guevara No. 31.

Tomás estuvo preso en varias ocasiones, fue detenido en las Minas de Charco Redondo por el teniente Zoilo Coll, jefe del puesto militar de Jiguaní, acusado de haber trasladado armas para los rebeldes procedentes de Santa Clara. También estuvo preso y sometido a torturas en la famosa Pesa del puesto de mando de Bayamo, donde operaba el sanguinario Pedro Morejón, quien exigió 1000 pesos para ponerlo en libertad.

Ya a partir de esta situación de incorpora al Ejercito Rebelde, a la columna No. 1 José Martí Comandada por Fidel Castro. En una ocasión al frente de un grupo de combatientes baja a la carretera de Manzanillo]] y desvía una rastra cargada de arroz para la Sierra Maestra. En otra ocasión se traslada a Bayamo y habla con el doctor Benítez medico de la clínica Las Mercedes, para que fuera sometido a operación de apendicitis aguda al combatiente rebelde teniente Pepín Vásquez, tramite que fue hecho con mucho cuidado y en la que intervino su esposa Alba Acosta, con resultados satisfactorios.

Termina la ofensiva del ejercito de Batista y en lugar de aniquilar a las fuerzas rebeldes las fortalecen más, pues han adquirido experiencia en todos los órdenes, en estas circunstancias los rebeldes comienzan la contra-ofensiva. Tomás por sus relaciones con los campesinos de las zonas de cautillo, Gallardo y otros barrios, es designado por Fidel para que efectúe el abastecimiento de productora agrícola a una parte de las fuerzas rebeldes.

El cuartel del ejercito de batista situado en el almacén de los hermanos Díaz en Santa Rita, es dirigido por más de un jefe militar, pues los cambian periódicamente, ya que eran atacados por los rebeldes y siempre sufrían bajas, los últimos jefes de dicho cuartel fueron los oficiales Rodolfo Villamil y el Teniente Uvenio León, los que después de algunas entrevistas con los rebeldes, en las que jugo un papel relevante Tomás Díaz, pues fue el quien estableció los contactos entre el Capitán Villamil y el comandante Fidel Castro, donde le comunico a este que el Capitán Villamil había sido su compañero de Bachillerato en el colegio Belén, por lo que se conocían.

Fidel le envían una carta a Tomás donde le comunica la inútil de las conspiraciones, que no pusiera en peligro sus vidas de militares poderosas, tan necesaria para la causa de la Revolución, y los encamina finalmente a que pasaran el territorio libre.

El día 10 de noviembre de 1958 es Tomás el guía rebelde que en su camión, después de preparar las condiciones, pues debía hablar con los demás compañeros para garantizar que no fueran atacados en el trayecto del camino quien los conduce hasta las Peñas, más allá de Charco Redondo, donde les estaban esperando un grupo de rebeldes, así llegan a territorio libre 51 militares fuertemente armados.

Se produce la acción de Guisa el día 20 de noviembre de 1958 donde las fuerzas rebeldes obtienen uno de sus triunfos más relevantes, allí está Tomás Díaz, combaten a las puertas de Bayamo y contra el ejercito concentrado en su Puesto de Mando.

Más tarde el 19 de Diciembre, también está en el combate de Jiguaní, donde el ejército rebelde sale victorioso habiéndose enfrentado a más de 500 soldados que se habían concentrado allí, procedentes de Baire, Contramaestre y Mafo.

Se produce el triunfo definitivamente de la Revolución el día 1 ro de Enero de 1995, por lo que se ponía fin a más de un siglo de luchas por la libertad de Cuba.

Muerte

Tomás viaja en un Jeep desde Bayamo al Manzanillo con motivo de situaciones especiales, y al regreso es tiroteado frente al cuartel de Yara por elementos Manferreristas, ocasionándole la muerte instantánea a él y al compañero Armando Fernández Vaquero, viajaban además en el Jeep dos médicos de Bayamo, Benítez y Pompa, así como la Dra. Margarita Fonseca, de Santa Rita, quienes resultaron ilesas.

Su banderas de lucha, por las que dio su vida, constituye para las presentes y futuras generaciones un obligado y hermoso compromiso de llevarlas ondeantes en la vertiginosa marcha de la Revolución, con la convicción de que con el trabajo rendimos el merecido tributo de recordación cotidiana que ellos merecen.

Fuentes

  • Datos biográficos disponibles en la Asociación de Combatientes de Santa Rita.