Antonio Sánchez Valverde Ocaña
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Antonio Sánchez Valverde Ocaña. Fue el primer escritor nacido en Santo Domingo. Sacerdote, orador sagrado, conocido también como "El racionero". Fue desterrado por su independencia y franqueza al orar. Poseía abundantes conocimientos de las Sagradas Escrituras y de Teología. Autor de la obra “El Predicador”. Produjo una extensa y orgánica historia de la isla. Es el intelectual nativo más brillante del siglo XVIII.
Sumario
Síntesis biográfica
Inicios
Hijo del agrimensor Juan Sánchez Valverde y Clara de Ocaña, nació en Santo Domingo el 16 de febrero de 1734.
Estudios
Estudió en la Universidad de Santiago de la Paz y de Gorjón, y en 1755 obtuvo allí la licenciatura en Teología. Siendo asistente de su pariente Juan Sánchez Valverde en la parroquia de Bayaguana (1755-1758), obtuvo el grado de Bachiller en Derecho Civil por la Universidad de Santo Tomás de Aquino (22 de noviembre de 1758), y dos años después regresó a Bayaguana, esta vez como cura titular (1760-1763).
Con su hermano menor Andrés, viajó a España, donde permaneció dos años (1763-1765), y obtuvo el título de abogado de los Reales Consejos (10 de septiembre de 1763).
Su ímpetu rebelde
Estando aún en Madrid, parece que gestionó ante Carlos III el nombramiento de racionero del Cabildo de la Catedral (21 de noviembre de 1765), aunque a la hora de cubrir la canonjía vacante, por los informes negativos del gobernador Manuel de Azlor, fue elegido otro candidato, quizás más idóneo o menos problemático. Otro tanto sucedió con sus gestiones en las catedrales de Caracas y Santiago de Cuba. Luego vendrían las críticas a sus sermones de mayo y agosto de 1781 en presencia del gobernador de la colonia, que exigía que fuera castigado por el arzobispo. El acoso que sufrió por parte de las autoridades obligó a Sánchez Valverde a huir hacia Haití el 13 de octubre de ese mismo año. Fue capturado al fin, en San Rafael, cerca del Guarico, el 23 del mismo mes y año, y puesto al cuidado de la autoridad eclesiástica.
Estancia en España
Enviado a España, casi en calidad de desterrado a mediados de mayo de 1782, se ocupó ante todo de editar en Madrid “El Predicador”, una de sus mejores obras de oratoria. De igual modo, de esos años de "destierro" en Madrid provienen sus tres tomos de sermones, su opúsculo sobre la sífilis, y por supuesto, para congraciarse con Carlos III, su magnífico informe histórico “Idea del valor de la Isla Española” (1785). Ante su petición y protesta ante el Consejo de Indias, se determinó confinarlo en calidad de cuasi detenido en un convento de los oratorianos o filipenses, hasta tanto se diese un fallo definitivo, que en definitiva fue negativo. Se decidió que, para tranquilidad de la isla, no regresara a ella, sino que buscase una ración en otro lugar. Así logró ser por fin racionero en la catedral de Guadalajara (México).
Muerte
Fue racionero en la catedral de Guadalajara (México), donde falleció posiblemente el 9 de abril de 1799.
Obras
- La América vindicada de la calumnia de haber sido la madre del mal venéreo (1785)
- Idea del valor de la Isla Española y utilidades, que de ella puede sacar su monarquía (1785)
- Reflexiones sobre el estado actual del púlpito y medios de su reforma e instrucción a predicadores (1781)
- El predicador (1782)
- Sermones panegíricos y de misterios (1783)
