Aqueos

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Aqueos
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Información
Periodo histórico1800-1100 a. n. e.
Raíz étnicaindoeuropea
griegos
  aqueos
Idiomagriego micénico
Principales ciudadesMicenas y Tirinto
RegiónAcaya y isla de Creta
Correspondencia actualPeloponeso e isla de Creta (Grecia)

Los aqueos fueron el conjunto de los griegos de la época de la Odisea y la Ilíada (ambos libros compuestos por Homero).

La palabra española «aqueo» proviene del latín «achaeu», y este del griego: Ἀχαιοί, Ajaioí

También se los conocía como:

  • dánaos (Δαναοί, danaoí), utilizado 138 veces en la Ilíada y
  • argivos (Ἀργεῖοι, argueioi), utilizado 29 veces en la Ilíada.

Siglos más tarde, ya en el período histórico de Grecia, los aqueos fueron los habitantes de la región de Acaya, una región en la zona central norte del Peloponeso. Las ciudades-estado de esta región formaron una confederación conocida como la Liga Aquea, que fue muy influyente durante los siglos III y II a. n. e..

En la Biblia se refiere a este pueblo como «acaicos».[1]

Historia

El pueblo aqueo fue un pueblo indoeuropeo procedente de los Balcanes.

Se desplazaron hacia Grecia alrededor del año 1800 a. n. e., fundaron los reinos de Micenas y Tirinto y hacia el 1400 a. n. e. conquistaron la isla de Creta.

El pueblo aqueo constituye el origen del poblamiento indoeuropeo de la península griega. Los aqueos en su llegada a los territorios griegos hicieron una conquista pacífica, sin alterar la estructura social de los habitantes de aquellas tierras en la misma época en que se producía el florecimiento de la cultura minoica, puente entre las civilizaciones orientales y las del occidente de Europa. Trajeron la doma del caballo, el carro de guerra y las espadas largas de bronce.

Estaban organizados en familias a través del parentesco. Sus poblados estaban regidos por un príncipe-guerrero y estratificados en tres niveles, al modo indoeuropeo: sacerdotes, guerreros y campesinos.

La cultura micénica (de Micenas) y la minoica (o cretense, nombre proveniente del mítico rey Minos) entraron pronto en contacto, produciéndose mutua influencia hasta su total fusión con la conquista por parte de los aqueos de Creta. Al carecer los palacios cretenses de fortalezas, los aqueos no dejaron de intentar dominar la isla hasta conseguirlo hacia el 1400 a. C.

Tras la conquista, los micénicos fortificaron la isla, agrupando las viviendas de artesanos y mercaderes cerca de las fortalezas.

Los enterramientos de la época micénica dejan ver la importancia que la élite aquea daba a la riqueza, obtenida de impuestos y saqueos, y a las armas. No extraña, pues, que una de las principales características fuera el carácter expansivo de esta cultura, también para ampliar sus rutas comerciales hacia Asia Menor, el Egeo, Egipto y la península itálica.

El fin de la hegemonía aquea en la Grecia continental es motivo de controversia. Tradicionalmente, se ha atribuido este hecho a la invasión por parte de los dorios; sin embargo recientemente se ha puesto en duda esta afirmación y se han manejado las hipótesis de que las causas pudieron ser una invasión por parte de los pueblos del mar, la sucesión de una serie de terremotos o una serie de levantamientos internos.

Documentos hititas

Algunos textos hititas mencionan una nación al oeste llamada Ahhiyawa.[2] En la primera referencia a esta tierra, una carta resume las violaciones del tratado del vasallo hitita Madduwatta,[3] al que se llama Ahhiya. Otro importante ejemplo es la Carta de Tawagalawa[4] escrita por un rey hitita no identificado de la época del Imperio (siglos XIV a XIII a. C.) al rey de Ahhiyawa, tratándolo como un igual y sugiriendo que Mileto (Millawanda) estaba bajo su control. También se refiere a un episodio de Wilusa anterior que implicaba la hostilidad por parte de Ahhiyawa. Ahhiya(wa) ha sido identificada con los aqueos de la Guerra de Troya y la ciudad de Wilusa con la legendaria ciudad de Troya (nótese la similitud con el griego antiguo Ϝιλιον, Wilion, más tarde Ίλιον, ílion, el nombre de la acrópolis de Troya). Sin embargo, la relación exacta del término Ahhiyawa con los aqueos más allá de una similitud en la pronunciación es muy debatido entre los investigadores, incluso tras el descubrimiento de que el micénico Lineal B es una antigua forma del griego. El debate anterior fue reanudado en 1984 por Hans G. Güterbock, del Instituto Oriental.[5]

Fuentes egipcias

Durante el quinto año del faraón Merenptah, una confederación de los pueblos de Libia y del norte habrían atacado el Delta occidental del río Nilo. Entre los nombres étnicos de los invasores rechazados están los «ekwesh» o «ejuesh», a quien algunos han visto como aqueos.

Homero ―escritor de la Ilíada y la Odisea― menciona un ataque aqueo en el delta de un río, y Odiseo (el protagonista de la Odisea) se refiere a lo mismo cuando habla a la sombra de Menelao.

Heródoto afirma en su primer libro de Historia que Helena de Troya había pasado el tiempo de la Guerra de Troya en Egipto, y no en Troya, y que después los griegos fueron allí para recuperarla.

Existe también el extraño mito de los hermanos Egipto (Aegyptus) y Dánao (Dánaus), hijos de Belo (rey de Egipto), con esta última, supuestamente procedente de Egipto, que Marianne Luban ha sugerido podría datar de esta época.

Mitología griega

En la mitología griega, las divisiones culturales percibidas entre los helenos se representaban como líneas legendarias de descendientes que identificaban grupos de parentesco, siendo derivada cada línea de un ancestro epónimo. Cada etnia griega se nombraba en honor de sus respectivos antepasados:

Tanto Cadmo de Fenicia, como Dánao de Egipto, y Pelops de Anatolia se hicieron un hueco en la Grecia continental y fueron asimilados y helenizados.

Helén, Graikos, Magnis y Macedonia eran hijos de Deucalión y Pirra, y fueron las únicas personas que sobrevivieron al diluvio. La etnia originalmente llevaba el nombre del hijo mayor, los graikoi pero fue rebautizada más tarde después de que otro de sus hijos, Helén, que demostró ser el más fuerte. Los hijos de Helén y la ninfa Orséis fueron Doro, Juto y Eolo. Los hijos de Juto y Creúsa, hija de Erecteo, fueron Ion y Aqueo.[6]

Fuentes