Celia Castro
Celia Castro  | |
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| Datos personales | |
| Nacimiento | 1860 Valparaíso,  Chile |
| Fallecimiento | 19 de junio de 1930 Chile |
| Residencia | Chilena |
| Nacionalidad | Chilena |
| Ocupación | Pintora |
| Artistas relacionados | Pedro Lira, Aurora Mira, Magdalena Mira |
| Premios | Medalla de Primera Clase, Valparaíso (1884) Primera Medalla de Dibujo, Santiago (1887) Tercera Medalla en la Exposición Universal, París (1889) Premio Certamen Maturana y Certamen Edwards, Salón Oficial, Santiago (1896) |
Celia Castro. Pintora chilena que destaca en la historia del arte chileno junto a sus contemporáneas, las hermanas Mira, por ser una de las mujeres pioneras que, desafiando las convenciones sociales, se dedicó a desarrollar su talento artístico, superando incluso a sus compañeros varones. Realizó en vida una exposición individual, en la Sala Latinoamericana de Bellas Artes, París (1904), pero su obra ha sido objeto de retrospectivas que homenajean a la artista, y así mismo sus pinturas se incluyen en toda exposición de arte chileno académico.
Fue la primera mujer en estudiar pintura profesional en Chile, se destaca por sus melancólicos registros de la realidad. Sus maestros le dieron una relevancia importante dentro del país, inesperada de sobremanera en esa época, destacan entre sus maestros Pedro Lira. Junto con sus contemporáneas, las hermanas Aurora Mira y Magdalena Mira lograron obtener reconocimiento como reales pintoras, siendo Celia la primera mujer becada para su perfeccionamiento en Europa. Su obra fue homenajeada por intervención del Museo de Bellas Artes, quien, en la Casa del Arte, realizó una exposición exclusiva y documental de su pintura más famosa, La Poda.
Síntesis biográfica
Nació en Valparaíso en 1860. En su ciudad natal conoció a Manuel Antonio Caro, quien, al apreciar sus prematuros trabajos, le aconsejó dirigirse a la capital para estudiar seriamente Bellas Artes, dadas las cualidades que la muchacha había ya demostrado.
Así lo hizo Castro, estudiando pintura, primero, con Pedro Ohlsen, y enseguida con Pedro Lira, llegando a formar parte del selecto grupo de los más sobresalientes alumnos del maestro.
Poco tiempo después, Celia Castro logró notoriedad pública con su participación en el Salón Oficial de 1884, donde presentó la obra Las Playeras. Junto al profesor Lira, Celia Castro viajó a París en 1889 por una temporada; regresó a la capital gala en 1904, esta vez pensionada por el gobierno chileno, hecho que la convirtió en la primera mujer becada por el Estado para su perfeccionamiento en Europa.
Castro residió largo tiempo en dicha ciudad, pintando sus calles y rincones, y exponiendo con éxito en los Salones parisinos. Volvió definitivamente a Chile en 1927, y aquí falleció, el 19 de junio de 1930.
Trayectoria artística
Celia Castro utilizó la clásica técnica del óleo sobre tela para realizar retratos, paisajes y naturalezas muertas, destacándose especialmente en este último género.
Usó de preferencia los formatos pequeños ejecutando en estos breves espacios delicadas composiciones colmadas de tonalidades cálidas, y en otras oportunidades, de tonos grisáceos, variedad en la que supo mantener siempre un alto nivel.
A pesar de la admiración que sintió por su maestro Pedro Lira, no se esclavizó a su estilo ni tampoco a otras fórmulas de modo exclusivo; más bien se mantuvo hábilmente en un eclecticismo, que bebía fuertemente de los conocimientos adquiridos en Francia. En las obras de Castro los valores plásticos a la expresión de ideas y emociones, así como a la representación del aspecto psicológico de las personas retratadas. Manejando con destreza e incorporando sin banalidad el valor de la subjetividad en sus pinturas, la artista logró reflejar estados de ánimo y sensibilidades especialmente femeninas.
Dentro del conjunto total de su producción, destacan las tempranas obras ‘Las playeras’ y ‘Los cazadores de la Onda’, y más adelante en el tiempo, ‘Vieja’, ‘Naturaleza muerta’ (ambas pertenecientes al Museo Nacional de Bellas Artes), ‘El conejito’, y ‘Primero de Noviembre’, exhibida en la Exposición de 1889.
Reconocimientos
Celia Castro recibió, entre otras distinciones, Medalla de Primera Clase, Valparaíso (1884), Primera Medalla de Dibujo, Santiago (1887), Tercera Medalla en la Exposición Universal, París (1889), Premio Certamen Maturana y Certamen Edwards, Salón Oficial, Santiago (1896).
