Dermatosis profesional

Dermatosis profesional
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Clasificación:Enfermedad profesional

Dermatosis profesional. Afección inflamatoria de la piel, cuyo origen provado sea una exposición industrial, o atribuible a una ocupación cualquiera. Representan de un 40 a un 70 % de las enfermedades profesionales y ocupan el décimo lugar entre las afecciones cutáneas. El 1% de los trabajadores se ven afectadas por ellas.

Tipos de dermatosis

  • Alérgicas. Estas afectan a individuos genéticamente predispuestos y, aunque curen momentáneamente, pueden volver a aparecer ante un nuevo contacto con el agente responsable.
  • Irritativas. Aparecerán, si la exposición es suficiente, en todos los trabajadores y desaparecen al suprimir la causa.

Síntomas

Su forma de presentación es muy diversa. Comienzan con una inflamación de la zona, de color rojizo, formándose a veces vesículas que pican y segregan líquido de color ambar. Posteriormente se forman costras, que se pueden arrancar con el rascado pero que se reproducen rápidamente. Al final la piel queda cubierta de escamas y puede llegar a infectarse.

Manifestaciones clínicas

Estas pueden manifestarse fundamentalmente de tres maneras:

  • Dermatitis irritativa de contacto: Caracterizada por eritema (piel roja) y vesiculación. Se trata de una respuesta irritativa muy rápida, pero inespecífica a una determinada sustancia. Es frecuente por ejemplo frente a un detergente, jabón o sustancia manipulada.

Dermatitis irritativa crónica por contacto: además del eritema, existe prurito (picazón), descamación y fisuración. Se trata de un fenómeno semejante al anterior, pero cuando el agente persiste en el tiempo produce este tipo de lesiones.

  • Dermatitis alérgica de contacto: presenta vesículas y ampollas. Se trata de una respuesta a un tipo específico de agente. La respuesta puede provocarse con el agente, en un examen llamado prueba del parche. El caso más frecuente es la alergia al látex que afecta cerca del 10% de los trabajadores expuestos.

Otras lesiones de piel de tipo laboral son quemaduras, foliculitis, acné, infecciones por hongos o bacterias, típicamente en la zona cercana a las uñas en trabajos con frío y humedad. También existe cáncer de piel por exposición a luz ultravioleta, úlceras y distrofias de las uñas.

Son frecuentes los panadizos, procesos infecciosos de los pulpejos de los dedos, dolorosos e invalidantes. También existe un vitiligo ocupacional (decoloración de la piel). Lo más frecuente son los compuestos químicos que entran en contacto con la piel de las manos. La luz ultravioleta, que causa quemaduras.

Los síntomas más comunes son eritema, vesiculación, descamación, fisuras. Sin embargo en la piel se manifiestan también como despigmentación (vitiligo), acné, foliculitis, hiperqueratosis (callos) y cáncer de piel.

Prevención

La prevención de estas afecciones se realiza por medio de medidas higiénicas generales y espesíficas , con el fin de reducir y abolir las contaminaciones ambientales del centro laboral, lo que reduce al máximo la exposición a los tóxicos.

Es muy importante la identificación de los agentes causantes y si es posible sustituirlos por otros más inofensivos, la educación sanitaria, formación de medidas higiénicas sanitarias a los trabajadores expuestos.

El empleo de los medios de protección personal como guantes, delantares, trajes especiales, gorras, botas de goma etc, es muy importante el baño después de la jornada laboral y el cambio de ropa, así se reducen la incidencia de estas enfermedades profesionales

Actividades con riesgo

· Industria de la construcción: manipulación de cemento, alquitranes, hulla, alcalinos, etc. · Industria del calzado: colas o pegamentos (resinas). · En la agricultura: trabajos con productos químicos, recolección de productos agrícolas, trabajos forestales, etc. · En la medicina los trabajadores expuestos a Rayos X · Profesiones sanitarias e industria farmacéutica. · Trabajadores del plástico: industria del automóvil, de aviación, electricidad, etc. · Veterinarios y ganaderos: por la lana, las pieles de oveja y de cabra. · Metalurgia: cromo, cobalto, níquel, fluídos de cortes y antioxidantes. · Otras profesiones: pintores, manufactura textil, peluqueros.

Diagnóstico

1. Historia clínico-laboral (antecedentes personales y familiares, de ocio, etc. 2. Examen físico exhaustivo. 3. Pruebas de laboratorio: prueba del parche (contacto de las sustancias sospechosas con la piel del trabajador y ver si aparece alguna lesión.)

Medidas ante la aparición de una dermatosis profesional

  • Evitar que el trabajador entre en contacto con la posible sustancia causante de la dermatosis.
  • Consultar con el especialista dermatólogo.
  • Mientras tanto utilizar jabones o soluciones de limpieza neutros.
  • Una vez curado, puede reemprender su actividad con normalidad, no olvidando adoptar las medidas preventivas adecuadas.
  • En caso de que la dermatosis no curara o fuera repetitiva, y las medidas (incluidas la sustitución del producto, cuando fuera posible) no evitara la aparición de nuevos episodios, sería de interés contemplar la posibilidad de cambiar de puesto de trabajo.

Fuentes