Faustino Oramas Osorio

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El Guayabero
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Datos generales
Nombre real:Faustino Oramas Osorio
Fecha de nacimiento:4 de junio de 1911
Holguín, Bandera de Cuba Cuba
Fecha de fallecimiento:27 de marzo de 2007
Holguín, Bandera de Cuba Cuba
Ocupación:Músico
Información artística
Género(s):Sonero, trovador
Instrumento(s):tres
Premios otorgados:Premio Nacional del Humor 2002. Orden Félix Varela Orden Félix Varela

Faustino Oramas Osorio. (El Guayabero), sonero, trovador, músico, compositor y juglar cubano, famoso por sus rimas impregnadas de un sentido picaresco sin igual, apoyadas por el doble sentido de su letra, conocido también como “El rey del doble sentido”

Síntesis biográfica

Nació en la ciudad de Holguín, un 4 de junio de 1911, siendo muy pequeño, y con un hogar familiar de extrema humildad, solía acompañar a un tío, quien vendía ropas en las colonias cañeras de los centrales Palma, San Germán y Miranda, territorios de la antigua provincia cubana de Oriente. Con su constitución física y su altura bien pudo haber sido un famoso deportista, pero él se decidió por la música, sobre todo por el Tres, instrumento que fue su compañero de por vida.

A los 15 años Faustino Oramas Osorio ingresó en el “Sexteto Tropical”, donde permaneció varios años actuando en toda la regiones holguineras, tiempo después se incorpora a la agrupación “Conjunto Trovadores Holguineros”. Posteriormente formó su propio grupo integrado por Santana Oramas Osorio, cantante y maracas, y Candito Oramas Batista, bongó. Más tarde se incorporó Misael Pino. Cultiva un son montuno tradicional, que nos recuerda a los primeros soneros de la región donde surgió este género.

En las primeras décadas del pasado siglo XX en los pueblos y ciudades del interior de nuestro país, las actividades musicales resultaban muy escasas, y es por ello que nuestros músicos no podían mantenerse como tal y se dedicaban a otros oficios, pero Oramas Osorio se mantenía siempre con su tres a “capa y espada” por todos los rincones de su región oriental dando recitales sin tregua, ni tiempo en cualquier caserío o pueblo.

Faustino Oramas resulta una personalidad en nuestro mundo artístico musical, sus tumbaos en el tres son inconfundibles, su forma de vestir, su sombrero de pajilla blanco, su eterna corbata, sus chistes dichos con una sobriedad increíble donde nunca se asoma ninguna sonrisa, es la admiración de todos. De sus obras, acota Faustino, que el no las crea con picardía -esas se las suponen sus admiradores.

Nunca quiso vivir en la capital cubana (La Habana). Esto viene dado porque en la región oriental él era tratado con mucha consideración y afecto y además escogió un instrumento y un ritmo oriundo de esa parte de nuestro país para convertirlo en un “Hombre Espectáculo” nada corriente en la cultura nacional cubana.

Este gran tovador tomó la materia prima para sus composiciones de todas las cosas importantes que el vio o le habían sucedido en su vida, reflejando así el modo de ser del cubano, su picardía congénita y su humor corrosivo y vital. Fallece un martes 27 de marzo del 2007 a las seis y 30 de la mañana, en su natal Holguín, a la edad de 96 años, como consecuencia de una larga enfermedad.

El Guayabero

En 1926, en una actividad efectuada en un central azucarero con el Conjunto Trovadores Holguineros, fueron atendidos por una jovencita algo zalamera, lo que produjo la ira de su esposo, un cabo de la Guardia rural, quien raudo partió como una fiera rumbo a los músicos creando una estampida musical. Según cuenta Oramas Osorio al periodista que lo entrevistara, que es allí en aquel saloncito llamado Guayabero donde posteriormente Faustino crea el famoso son montuno “El Guayabero”. En el año 1968 la popularidad de su son montuno, “El Guayabero”, le cambió su nombre original y pasó a ser reconocido simplemente como El Guayabero, en vez de Faustino Oramas. Esta situación se produce cuando el destacado intérprete Pacho Alonso graba la obra en cuestión a fines de los años 1960, y este son montuno se convierte en uno de los números más famosos de nuestro país en aquella etapa interpretado por casi todas las agrupaciones cubanas.

El rey del Doble Sentido

Faustino Oramas está considerado "el rey del doble sentido", por su habilidad y gracia para hilvanar, casi hasta el infinito, complejos relatos cantados en los que aflora el humor, el equívoco y la capacidad de hacer "choteo" (burla) con todo respeto. Piezas de su repertorio como “Cuidado con el perro que muerde callao”, “Marieta” y “El Guayabero” han recorrido el mundo e integrado el repertorio de grandes cantores de la música popular. "Yo no digo lo que la gente piensa, ellos son los que ponen el doble sentido. En una ocasión un policía me dijo que lo que yo cantaba era un relajo. Le pregunté dónde estaba el relajo y no me pudo contestar, finalmente se me echó a reír" (El guayabero)

Obra musical

Faustino trovador
  • Tumbaíto.
  • Cómo baila Marieta.
  • Cómo vengo este año.
  • Cuida’o con el perro.
  • La yuca de Casimiro
  • El tren de la vida.
  • El Guayabero.
  • ¡Ay, candela!.
  • Félix Solano no quiere trabajar.
  • Mañana me voy a Sibanicú.
  • Mi son retozón.<
  • Siempre en la cola.

Caminante por el mundo

Viajó por varios países donde siempre causó gran admiración por la originalidad de sus interpretaciones, él público aplaudió delirantemente a este trovador sui géneris que aún después de desaparecido físicamente hace bailar a todos con sus alegres y movidas melodías, además de sus ocurrentes chistes y anécdotas que le ocurrieron a él durante su vida juglaresca.

Son países que reconocieron la gran valía de este juglar cubano. Su mérito consiste en haber hallado su raíz, y en su virtuosismo al expresarla. Realizó giras por México, donde coincidió con el Festival Cervantino; y en España actuó con el rockero Santiago Auserón, cantante y líder de la banda Radio Futura, y en el café-concierto El Sol.

Santa Palabra

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Miembro de Mérito de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) Pablo Milanés, fundador de la Nueva Trova, opina que:

"El Guayabero es un genio popular, no tiene tendencia determinada; desgraciadamente, no habrá otro como él. Ñico Saquito también tenía su sello. Pedro Luis Ferrer, Faustino imprime una ternura especial a su picaresca, y proyecta como nadie la cubanía de su verso y lo hace con bastante maestría"

Pancho Amat dice:

"El Guayabero es un juglar. Desde el punto de vista musical es un tresero popular de tumbaos, que utilizaba un diseño melódico rítmico muy reiterado, en cuya célula más elemental radica el sabor cubano. Lo he estudiado con detenimiento, porque a veces se producen cierres en la orquesta que me permiten arrancar con uno que gusta a todo el mundo. Sus tumbaos son complejos, levantan la música. Su rima ha sido muy explotada en la música campesina. Faustino la utilizaba con acierto, incluso en aquella rima que no completa, pero que insinúa y usted le pone el doble sentido"

Distinciones

Galardonado con las distinciones:

El Guayabero ostentaba además placas del Festival Benny Moré y del Festival Internacional Cervantino de Guanajuato, México, el Premio Abril, de la Unión de Jóvenes Comunista (UJC), y otros diplomas de reconocimiento.
Esos reconocimientos nunca lograron que "El guayabero" perdiera su singular modestia y su original modo de vestir como todo un elegante trovador-sonero.

Bibliografía

Félix Contreras. La música cubana. Una cuestión personal. La Habana, Ediciones Unión, 1999. // Evangelina Chió. «Faustino Oramas, El Guayabero: “Santa palabra”». Revolución y Cultura (La Habana) (4): 30-34, abril de 1990. // Leonardo Padura. «El Guayabero». Cuba Internacional (La Habana) (9): 23, septiembre de 1989. // Pere Pons. «El encuentro: flamenco y son». Ajoblanco (Barcelona) (60): 70-72, septiembre de 1994. // Dean Luis Reyes. «Los millones de El Guayabero». Juventud Rebelde (La Habana), 9 de julio de 2002: 6.

Fuente