El exorcismo de Emily Rose

El exorcismo de Emily Rose
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Terror | Bandera de los Estados Unidos de América Estados Unidos
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Estreno2005
GuiónScott Derrickson & Paul Harris Boardman
DirectorScott Derrickson
Producción GeneralTom Rosenberg, Gary Lucchesi, Paul Harris Boardman, Tripp Vinson y Beau Flynn.
Dirección de FotografíaTom Stern
Director de ArteSandi Tanaka
RepartoLaura Linney, Thomas Wilkinson, Colm Feore, Jennifer Carpenter, Campbell Scott, Shohreh Aghdashloo, Mary Beth Hurt, Jr. Bourne, Joshua Close, Kenneth Welsh, Henry Czerny, Duncan Fraser
Premios2005: Festival de Sitges: Sección oficial largometrajes a concurso
ProductoraSony Pictures
PaisBandera de los Estados Unidos de América Estados Unidos

El exorcismo de Emily Rose. Película de terror del año 2005 dirigida por Scott Derrickson. Contada con aterradores flashbacks, narra el fascinante juicio de un sacerdote acusado de negligencia por la muerte de una joven que se creía, estaba poseída. Inspirada en sucesos reales, la película está protagonizada por Laura Linney como Erin Bruner, la abogada a cargo de la defensa del Padre Richard Moore (Thomas Wilkinson), el sacerdote que realizó el controversial exorcismo a Emily Rose, interpretada por Jennifer Carpenter.

Sinopsis y argumento

Basada en una historia real, la película cuenta la extraña y controvertida decisión de la Iglesia Católica al reconocer la posesión demoníaca de una joven estudiante americana de 19 años llamada Emily Rose. Emily Rose (Jennifer Carpenter) deja el protegido ambiente de su hogar rural para ir a la universidad sin la menor sospecha de lo que le espera. Una noche, sola en su dormitorio, sufre la primera "alucinación" y pérdida de conocimiento aterradora. Emily continúa experimentando aterradoras visiones y soporta terribles convulsiones que dejan su cuerpo retorcido y débil. Es diagnosticada como epiléptica por un neurólogo, pero la medicación que le da no surte efecto. Sus síntomas empeoran y un segundo diagnóstico realizado por un psicólogo arroja que Emily no sólo es epiléptica, sino que también es sicótica.

Cuando su sufrimiento se vuelve insoportable y el tratamiento médico no le ofrece ningún alivio, Emily recurre al cura de su parroquia en busca de ayuda. Después de una larga deliberación, el Padre Moore (Tom Wilkinson) acepta realizar un exorcismo, algo que nunca antes ha hecho. Emily y el Padre Moore ponen su confianza en su religión, la cual ofrece una interpretación para el problema de Emily; los demonios han poseído su mente y cuerpo y son la causa de su implacable tormento.

A pesar de los esfuerzos heroicos del Padre Moore, Emily muere durante el exorcismo y el cura es subsecuentemente acusado de homicidio por negligencia y por menospreciar la asistencia médica. Su exorcismo fue grabado en una cinta de audio que posteriormente se uso como prueba para demostrar su posesión demoníaca.

Erin Bruner (Laura Linney) una sobresaliente abogada defensora, acepta de mala gana representar al Padre Moore a cambio de la seguridad de un contrato de sociedad con su bufete de abogados. A medida que el juicio avanza, el cinismo y ateísmo de Erin se tambalean debido a la fe inquebrantable del Padre Moore y a los hechos, espeluznantes e inexplicables, que rodean el caso. El juicio resultante enfrenta la razón y la ciencia contra la creencia espiritual y la fe, y nos lleva de vuelta a la serie de eventos de la cada vez más desesperada enfermedad de Emily y nos ofrece interpretaciones de ambos lados.

Reparto

La historia que inspiró a la película

La historia real está inspirada en Anneliese Michel (21 de septiembre de 19521 de julio de 1976), nacida en una pequeña ciudad alemana, Leibfling, en el seno de una familia católica de clase media. En 1968, cuando tenía 16 años, la joven comenzó a sufrir ataques en los que era incapaz de controlar su cuerpo. En ese momento, se le diagnosticó la “Epilepsia del Grand Mal”.

A medida que pasaba el tiempo los ataques se fueron haciendo cada vez más fuertes y, quizá debido a la fuerte religiosidad de su familia, Anneliese empezó a creer que estaba poseída por el demonio. Sus padres, Josef y Anna, al observar que la medicación que estaba tomando no le servía de mucho, decidieron llevarla a varios sacerdotes para solicitar un exorcismo. Sin embargo, estos sacerdotes no determinaron que aquello se tratara de una auténtica posesión, ya que no se daban ninguno de los factores necesarios para considerar como cierta tal situación, que son, según la Academia Pontificia Regina Apostolorum: "hablar en idiomas desconocidos, exhibir una fuerza física desproporcionada, manifestar repulsión por objetos sagrados y conocer hechos muy distantes en tiempo y espacio". Además, le recomendaron que siguiera con su tratamiento médico.

Atendiendo a las peticiones de la familia, el pastor Ernst Alt pidió un permiso oficial de la iglesia para realizar el exorcismo. Pero sólo obtuvo como respuesta la recomendación de que Anneliese siguiera una vida aún más religiosa para encontrar la paz espiritual. Curiosamente, poco después, Anneliese sufrió un empeoramiento en los ataques supuestamente epilépticos, y comenzó a comportarse de manera violenta: insultaba y golpeaba a sus familiares, destruía compulsivamente cualquier objeto religioso que se encontrara, comía insectos y carbón

Esto provocó que Josef Stangl, Obispo de Wurzburgo, ordenara finalmente un exorcismo en 1975 realizado por el propio pastor Alt y por el padre Arnold Renz, en sesiones que se prolongaron semanalmente hasta julio de 1976, que fue cuando la joven murió.

Durante estas sesiones de exorcismo, Anneliese parecía estar poseída por varias almas: Caín, Judas Iscariote, Lucifer, Nerón o Adolf Hitler fueron algunos de los nombres con los que se identificaba la muchacha. Sus convulsiones eran tan fuertes durante el exorcismo que tenían que atarla a la cama y ser sujeta por tres personas. Decía que los demonios que llevaba dentro no le permitían comer, por lo cual el motivo final de su muerte fue el agotamiento, sumado a la neumonía que también padecía. Incluso llegó a romperse las rodillas debido a las 600 genuflexiones que realizaba durante las sesiones de exorcismo (esto se observa brevemente en el filme). Antes de morir por inanición (según parece, la joven no hubiese muerto de haberse alimentado en las últimas semanas), se dice que la joven se giró hacia su madre y le dijo “Tengo miedo”, cayendo posteriormente inconsciente.

Tras la muerte de la joven, el 1 de julio de 1976, sus padres y los dos exorcistas que llevaron a cabo las ceremonias, fueron acusados de homicidio negligente. A pesar de que la Iglesia negó después que Anneliese Michel estuviera realmente poseída, la leyenda en torno a la muchacha se hizo tan fuerte que llegaron a exhumar su cadáver en 1988 para ver si había seguido el proceso natural de descomposición.

Fuentes