Fundación de la Villa de Sancti Spíritus
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Fundación de la Villa de Sancti Spíritus, también denominada Villa del Espíritu Santo. Fue un hecho histórico ocurrido en los primeros años de la conquista y colonización española a la isla de Cuba bajo el mando del Adelantado Diego Velázquez de Cuéllar. La fundación de la Villa de Sancti Spíritus, cuarto asentamiento español en tierras cubanas, se produjo el 4 de junio de 1514 por parte del propio Velázquez de Cuéllar y un grupo de militares españoles que iban con él en el recorrido por todo el territorio insular. La ceremonia fundacional fue oficiada por el Padre Bartolomé de las Casas en las riberas del río Tuinucú.
Sumario
Documentos fundacionales
Aunque en ningún documento de la época se hace referencia explícita a la fecha de la fundación de Sancti Spíritus, existen tres textos imprescindibles para arrojar luz sobre este proceso y servir de fuente primaria a los investigadores. Ellos son: Las Cartas de Relación del Repartidor de Indios Diego Velázquez a Su Alteza Fernando II de Aragón, del 1 de abril de 1514 y el 1 de agosto de 1515, en Documentos para la Historia de Cuba, de Hortensia Pichardo Viñals, tomo I y la Historia de las Indias, del Padre Bartolomé de las Casas.
El análisis de la Carta de Relación que enviara el Adelantado al Rey, el 1 de abril de 1514, el documento más interesante que se conserva sobre la conquista de Cuba - al decir de la doctora Hortensia Pichardo:
Las palabras de Las Casas constituyen el único fundamento documental sobre la fundación de Sancti Spíritus[1]:
Este testimonio permite enmarcar en tiempo la fundación de Sancti Spíritus. La Pascua de Pentecostés es una fiesta dedicada al Espíritu Santo - bajo cuya advocación estaba la nueva villa -, que varía del 10 de mayo al 13 de junio, y que de acuerdo al cronista Gonzalo Fernández Oviedo en 1514 correspondió al 4 de junio [2]. Si bien no podemos circunscribir a una fecha lo que constituye todo un proceso,[3] sí podemos afirmar que entre abril y mayo de ese año quedó establecida la villa de Sancti Spíritus en un punto no determinado de la región central de Cuba. Por la relación de Velázquez se sabe que el 1º de abril él todavía estaba en Jagua, donde agora dice que está, y que en esa fecha la villa espirituana aún no existía, pues de lo contrario no hubiera dejado de consignarla.
El padre Las Casas fue muy explícito[4]:
Ceremonia fundacional
Por tanto, a falta de fuentes más exactas para precisar el origen de Sancti Spíritus, es lógico suponer que, entre marzo y abril, ocurrió la llegada del territorio, previamente escogido por los exploradores y los guías nativos, de los conquistadores –devenidos colonizadores-, el establecimiento del campamento, la verificación de la justeza de las informaciones anteriores y, solo entonces, se tomaría la decisión de erigir una nueva villa, lo cual requería de un acto de fundación, con su correspondiente ceremonia, avalada por la presencia de un sacerdote. Todo este proceso debe haber ocupado a los españoles entre abril y junio de 1514.
A diferencia del resto de las primeras siete villas, que se establecieron en la costa o cerca de ella, Sancti Spíritus se asentó en un paraje interior que, en medio de la isla, podría facilitar el acceso de la costa sur a la norte, al respecto se refería Bartolomé de Las Casas[5]:
Otra razón importante podría ser la cercanía a las excelentes minas descubiertas en el territorio nombrado por los aborígenes Cubanacán - más al norte, en la región central de la isla -, hallazgo relatado también por Las Casas. En este sentido Sancti Spíritus podía funcionar como un sitio puntual en la carrera del oro en su tránsito del norte al sur para ser sacado por el puerto de Trinidad - único más cercano que por entonces había en la región centro-sur de la isla- y por las propias minas de su territorio, como lo demuestran la propuesta de la corona en 1517 y 1518 para establecer la fundición de oro en Sancti Spíritus, entre otros lugares de la isla, (24) y la producción aurífera de este territorio todavía significativa en la década del 30 del siglo XVI.
La ceremonia fundacional debe haberse efectuado el mismo 4 de junio, coincidiendo con el Domingo de Pentecostés y el famoso Sermón del Arrepentimiento, donde Bartolomé de las Casas, invitado especial del fundador Diego Velázquez, fustigara duramente la crueldad con que los colonizadores se servían de los indios, su ceguedad, las injusticias e iniquidades cometidas con aquella gente inocente y mansísima. Las Casas no regresó a las encomiendas y permaneció en Sancti Spíritus, de acuerdo con sus propias palabras:
Al contrario de Pentecostés, el Día de la Asunción es fecha fija y se celebra desde el siglo VI el 15 de agosto, por lo tanto, en esa fecha y en Sancti Spíritus Las Casas pronunció su famosa homilía que ha pasado a la historia como el Sermón del Arrepentimiento. Allí rompió su promesa de silencio al proclamar su toma de conciencia a favor del indio y conminar a sus compañeros a arrepentirse de su impiedad. Este sermón se convirtió en la más dura crítica a la injusticia y crueldad de los conquistadores con los indocubanos.
Sermón del Arrepentimiento
El sentimiento religioso que pretendía cobijar el egoísmo colonizador, fue también el formidable explosivo político que utilizó el Padre Las Casas contra el inhumano sistema de encomiendas:
Como quien inmola al hijo a la vista de sus padres, así es el que ofrece sacrificio de lo robado a los pobres, mata al prójimo quien le priva su subsistencia, y demanda sangre el que retiene el salario jornalero.
Sobre el Sermón la doctora Hortensia Pichardo señaló:
En un sentido más amplio. El proceso de fundación puede entenderse como el período inicial de creación y fomento de una villa, lo cual implicó, en todos los casos cubanos, el cambio de lugar de emplazamiento, buscando el sitio idóneo. Para Sancti Spíritus, este proceso abarcaría, desde la primavera de 1514, hasta su traslado definitivo a las márgenes del Yayabo, en 1522.
Traslado de la Villa
Parece que a los pobladores de Sancti Spíritus en su primer emplazamiento y a los que fueron después no les satisfizo, o no estuvieron conformes con la elección del lugar, ya porque aquél no fuese sino zona minera, ya por encontrarse demasiado retirado de la costa, dificultando la comunicación marítima con Trinidad, Santiago de Cuba y La Habana, o porque se sintiesen atraídos por las fértiles sabanas que bañadas por el río Yayabo hacían de aquel lugar el de sus ensueños de riquezas, pensaron abandonar las riberas del Tuinucú para situarse en estas del Yayabo en el año 1522.
Las primeras casas se situaron muy próximas al río, ocupando la iglesia el mismo lugar que ocupa hoy la Iglesia Parroquial Mayor.
Respecto al traslado de la villa de Sancti Spíritus, no existe prueba documental ni arqueológica que los justifique, aunque esa cualidad de villa itinerante bien pudo tenerla como el resto de las primeras villas, excepto Santiago y Baracoa, de las que hasta ahora no existen pruebas fehacientes de ello. Una antigua tradición oral recogida por el primer historiador espirituano Tadeo Martínez Moles presupone un cambio de asiento en 1522 desde las orillas del río Tuinucú hacia las cercanías del Yayabo y le atribuye diversas causas, entre ellas la muy conocida plaga de bibijaguas que asoló la villa, que a pesar de su matiz de inverosimilitud resulta una interesante nota de carácter ecológico. Otros criterios se inclinan hacia un acontecimiento político que debe haber marcado la vida de la villa en el año 1521: la violenta represión a la llamada revuelta comunera en Sancti Spíritus por Vasco Porcallo de Figueroa, que, procedente de Trinidad con una partida de hombres armados, depuso del cargo en nombre del rey al alcalde Hernán López, elegido por los vecinos, para dejar en esa plaza al que él consideraba serviría a los intereses reales (¿o velazquistas?), Jorge Velázquez[6].
El historiador Manuel Martínez Moles aporta un criterio a favor de una traslación digno de ser tomado en cuenta: el probable deseo de acercarse a Trinidad y al puerto, también de que la salida por el río Yayabo, navegable hasta 36 Km de su desembocadura, se hacía más rápida, así como la comunicación con Trinidad. Además, considera el posible aprovechamiento de mejores pastos para la cría de ganado caballar, vacuno y de cerda y la proximidad a los terrenos auríferos para los que se dedicaban a buscar oro en las vertientes de las montañas[6].
Otorgamiento del Título de Ciudad
Sorpresivamente el 24 de julio de 1867 se recibe en Sancti Spíritus la Real Orden de su Majestad la Reina Isabel II de España, fechada el 12 de mayo del propio año por la cual se otorgaba a la villa espirituana el Título de Ciudad, lo cual fue dado a conocer en Cabildo extraordinario el 27 de julio del mismo año.
Referencias
- ↑ Casas, Fray Bartolomé de Las. Citado por Pichardo, Hortensia. La fundación de las primeras villas de la isla de Cuba. La Habana: Ciencias Sociales, 1986, p. 34 - 35.
- ↑ El artículo El padre Las Casas en Sancti-Spíritus, del historiador Manuel Martínez Moles, es el primero sobre este tema en la historiografía del siglo XX, se basa en el análisis de la Historia de las Indias.
- ↑ El proceso fundacional de las primeras villas es un criterio argumentado por Hortensia Pichardo en el libro anteriormente mencionado, p. 23, reafirmado por la autora del presente texto en La fundación de Trinidad. Siga la marcha (Sancti Spíritus) I (2): 3 - 7, dic. 1993, y por el historiador de la ciudad de Sancti Spíritus Mario Valdés Navia en El proceso fundacional de la villa de Sancti Spíritus. Siga la marcha (S.S.) (12 -13): 11- 16, 1999.
- ↑ Venegas Fornias, Carlos. La conversión de Fray Bartolomé de Las Casas. Siga la marcha (S.S.) (8): 12 - 14, dic. 1996.
- ↑ Casas, Fray Bartolomé de Las. Historia de las Indias /Madrid, M. Aguilar editor, s.a./ t. II, p. /493/ - 495.
- ↑ 6,0 6,1 Véase el testimonio remitido por los oidores de la Audiencia de Santo Domingo que fueron a la isla Fernandina, de la declaración tomada a Vasco Porcallo de Figueroa sobre las alteraciones en la villa de Sancti Spíritus; conatos de comunidad; crueles castigos a los indios; (...) En: Colección de documentos inéditos relativos al descubrimiento, conquista y organización de las antiguas posesiones españolas de Ultramar. 2ª serie. Madrid: Establecimiento Tipográfico Sucesores de Rivadeneyra, 1885, t. I, p. 119 - 126.
Fuentes
- Barrera Figueroa, Orlando; Ferrer Hernández, Manuel. (1994-1995). Dos atributos concedidos a la villa espirituana. Revista Siga la Marcha. No.3-4-5.
- Barrera Figueroa, Orlando. (1994). Estudios de historia espirituana. Sancti Spíritus: Ediciones Luminaria.
- Martínez-Moles, Manuel. (1936). Epítome de la historia de Sancti Spíritus. Desde el descubrimiento de sus costas hasta nuestros días (1934). La Habana: Imprenta El siglo XX. p.22.
- Prieto Cápiro, Santiago. (1994-1995). La fundación de Sancti Spíritus: 4 de junio de 1514. Revista Siga la marcha. No.3-4-5.
- Valdés Navia; Mario. (1999). El proceso fundacional de la Villa de Sancti Spíritus. Revista Siga la Marcha. No. 12-13.
- Colectivo de Autores (2012): Síntesis histórica de la provincia de Sancti Spíritus. La Habana: Editora Anales, Instituto de Historia de Cuba. ISBN 978-959-7048-94-7