Grito de Ibarra

Grito de Ibarra
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Pistolas pertenecientes a Juan Gualberto Gómez
Fecha:24 de febrero de 1895
Lugar:Finca La Ignacia, Ibarra
País(es) involucrado(s)
Bandera de Cuba Cuba
Líderes:
Juan Gualberto Gómez


Grito de Ibarra fue un alzamiento el 24 de febrero de 1895 en varios puntos de la geografía cubana. Marcó el inicio de la guerra necesaria en la Isla, organizada por José Martí y el Partido Revolucionario Cubano desde el exilio. En Matanzas, específicamente en el poblado de Ibarra, un grupo de hombres se sumó a la encomienda para lograr la definitiva independencia de España.

Preparativos

Había que enviar la orden de alzamiento a todos los jefes, algunos se encontraban fuera de Cuba como Antonio Maceo y José Maceo, Flor Crombet en Costa Rica, Máximo Gómez en Santo Domingo y otros como Juan Gualberto Gómez en Cuba.

El alzamiento debía producirse en la mayor cantidad de lugares simultáneamente. Al iniciarse el año 1895 Juan Gualberto Gómez, Antonio López Coloma y Pedro Betancourt trabajan en los preparativos del levantamiento. Con tales propósitos compraban armas en La Habana y la enviaban a La Ignacia en Ibarra, finca arrendada por López Coloma.

Descripción de la Lucha

Desde el batey La Ignacia se divisaba el paradero del ferrocarril en Ibarra. En vano aguardaron por los jefes superiores, en el lugar, debían encontrarse unos 400 patriotas que caerían sobre Matanzas la cual se encontraba en carnavales.

Lamentablemente no pudo ser así, a la hora de la cita patriótica era notoria la ausencia de los principales compatriotas. A las 6:00 am del día acordado fue avisado Antonio López Coloma por el jefe de la estación de Ibarra que la conspiración había sido descubierta y que salía un tren de tropas españolas desde Matanzas. Ante esta situación decidió lanzarse a la lucha con una partida de 14 hombres que iban mal montados pero cargados de armas.

Fue así como retaron a la metrópoli española enarbolando la bandera de la estrella solicitaría y emitiendo un resonante y clásico grito de “Viva Cuba Libre”. Pedro Acevedo y Pedro Betancourt llegaron cerca del lugar señalado, pero tuvieron que ocultarse al ver el movimiento de las tropas, capturados posteriormente y sometidos a juicio, Betancourt fue encerrado en el Castillo San Severino y luego deportado a Madrid, Acevedo fue condenado a 5 meses de prisión.

Después de estos hechos se practicó un escrupuloso registro en la casa de Antonio López Coloma en la Ignacia, encontrándose numerosas armas y deteniendo a varios compañeros. Hubo dispersión del grupo siendo hechos prisioneros, entre ellos López Coloma, muchos fueron perseguidos, muertos o deportados. Mientras tanto Coloma fue trasladado a la Cabaña y fusilado en el foso de los Laureles el 26 de noviembre1886, gritando al caer ¨Viva Cuba Libre¨.

Importancia del hecho

A pesar de los reveses sufridos en el alzamiento, tuvo gran importancia histórica para la región porque se demostró que los matanceros estaban dispuestos a luchar contra el coloniaje español. Isabel Hernández Campos, directora del Museo Provincial Palacio de Junco en Matanzas, explica que la figura del delegado Gómez resultó importantísima en este hecho. “El mismo, al valorar los acontecimientos dice que en Ibarra había sido un hombre en toda la noble y viril extensión de la palabra. Y es que se integra al alzamiento sin tener creadas todas las condiciones pero cumpliendo con la fecha que ya había sido acordada”.

Fuentes