Oasisamérica

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Concepto:Oasisamérica es el nombre de una superárea cultural de la América del Norte precolombina

Oasisamérica. Es el nombre de una superárea cultural de la América del Norte precolombina. Se extiende desde el territorio de los Estados Unidos hasta el sur de Chihuahua, en México, y desde la costa del golfo de California hasta el valle del río Bravo. Debe su nombre a su posición como área intermedia entre las altas culturas mesoamericanas y las culturas de los nómadas del desierto aridoamericano.

Características

Oasisamérica es término derivado de la conjunción de oasis y América. Se trata de un territorio agreste, marcado por la presencia de las Montañas Rocosas y la Sierra Madre Occidental. Al oriente y al poniente de estas enormes cordilleras se extienden las grandes planicies áridas de los desiertos de Sonora, Chihuahua y Arizona. En su momento de mayor expansión, Oasisamérica cubría una parte la superficie de los actuales estados mexicanos de Chihuahua y Sonora, así como de Arizona, Utah, Nuevo México, Colorado, Nevada y California, en los Estados Unidos. A diferencia de sus vecinos del desierto, los oasisamericanos fueron cultivadores, aunque las condiciones climatológicas no les permitían una agricultura muy eficiente y por ello tenían que recurrir a la caza y a la recolección para complementar su subsistencia. Construyeron grandes aldeas en Nuevo México y la zona arqueológica de Casas Grandes, en Chihuahua. Esta zona tenía una gran importancia debido a los eficientes sistemas hidráulicos con los que contaban. Su apogeo se dio entre 1205 y 1261, y fue abandonada hacia 1341.

El origen del área cultural oasisamericana tiene lugar unos dos mil años después de la separación de Mesoamérica y Aridoamérica. Algunos de los pueblos oasiamericanos practicaban el cultivo como una actividad complementaria de su economía de caza y recolección. Estos pueblos, entre los que se encuentran los pertenecientes a la Tradición del Desierto, llegaron a convertirse en verdaderos agricultores. El proceso de la introducción de la agricultura en la zona desértica del norte de México y el sur de los Estados Unidos fue gradual y dilatado: hacia el año 600 d. C. (periodo que coincide con la época del ocaso teotihuacano), algunos grupos habían adquirido recientemente las técnicas agrícolas.

Otras de interés

Se sabe de la práctica agrícola, por lo menos desde el año 3500 a. C., que es la fecha dada para los restos de maíz fósil encontrados en la Cueva del murciélago, Arizona. Dado que los restos más antiguos de maíz en Norteamérica datan del año 5000 a. C., parece que la hipótesis de la importación de la agricultura desde el sur es correcta. Lo que no es posible asentar aún es quiénes eran los portadores de la tecnología agrícola y qué papel tuvieron en el desarrollo de las altas culturas oasisamericanas.

Se proponen por lo menos tres hipótesis acerca del nacimiento de las culturas oasisamericanas. Una, de carácter endógeno, señala que se trata de un desarrollo cultural independiente que tiene sus raíces en la más remota antigüedad. Desde este punto de vista, favorecidos por un mejor clima (cosa realmente relativa, dado que la diferencia climática entre la zona oasisamericana y la aridoamericana no es tan evidente), los antiguos pueblos del desierto habrían podido hacer un descubrimiento de la agricultura similar al que ocurrió en Mesoamérica.

Áreas culturales

En el territorio abarcado por oasisamérica se desarrollaron tres grandes culturas: la Anasazi, la Hohokam y la Mogollón, que convivieron con otras culturas vecinas, con las que compartían rasgos culturales: Fremont, Pataya y Trincheras.

El inicio del período Pueblo está marcado por el desarrollo de la cerámica. La característica principal de esta es el predominio de piezas de color blanco o rojo con diseños en color negro. Durante la fase Pueblo I (700-900 d. C.), los anazasi desarrollaron sus primeros sistemas de irrigación, y sustituyeron su habitación semisubterránea de la fase anterior por casas construidas de mampostería. La fase Pueblo II (900-1100 d. C.) está marcada por la construcción de grandes obras de arquitectura, entre las que destacan los multifamiliares de varios pisos, construidos algunos de ellos en los acantilados. La siguiente fase, Pueblo III (1100-1300 d. C.) fue el escenario de la máxima expansión de la agricultura anasazi y de la construcción de grandes redes de comunicación regional que finalmente se vendrían abajo en la fase Pueblo IV, cuando el sistema se contrae, los grandes centros quedan en el abandono y muchos de los habitantes de la región vuelven a una economía basada en la recolección y la cacería.

El mayor apogeo de los oasisamericanos ocurrió durante el siglo XIV y XV. En este tiempo, los asentamientos principales de esta cultura crecieron en población, tamaño y poder. Paquimé, en Chihuahua, fue quizá el mayor de ellos. Dominaba una región serrana en la que se han descubierto varios sitios arqueológicos conocidos como casas acantilado, puesto que fueron asentamientos construidos en las cuevas de difícil acceso de la vertiente oriental de la Sierra Madre. Paquimé sostenía relaciones comerciales con la Mesoamérica nuclear, a la que proveía de minerales preciosos como la turquesa y el cinabrio. Controlaba también el comercio de ciertos productos de las costas del golfo de California, especialmente de conchas de la especie Nassarius. Paquimé recibió una fuerte influencia de sus socios mesoamericanos, como demuestra la presencia de canchas de juego de pelota y de restos de animales de la región tropical centroamericana, como guacamayas.

Decadencia

Los motivos de la decadencia de la cultura anasazi son aún desconocidos. Se asocia este hecho con la prolongada sequía que asoló la región entre los años 1276 y 1299. El período comprendido entre estas fechas y la llegada de los españoles a Arizona es profundamente desconocido. Cuando los europeos llegaron a las tierras de la región anasazi, ésta estaba poblada por los indios pueblo, que no conformaban una unidad étnica: entre ellos se encuentran los zuñi, sin parientes próximos; los hopi, hablantes de una lengua uto-azteca; los tewas y tiwas eran tanoanos y los navajos, atapascanos. La llegada de estos últimos es un misterio, lo único que se sabe es que procedían de Canadá, y que eran un grupo de cazadores que terminó por asimilarse a la cultura de los nativos oasisamericanos.

Fuentes

Braniff, B. (2001). La Gran Chichi de meca. En: Arqueología Mexicana. 9(51). sep. - oct . México : Editorial Raíces - Instituto Nacional de Antropología e Historia. Cano, O. (2001). Paquimé y las casas alcantilado. En: Arqueología Mexicana 9(51) sep. - oct. México : Editorial Raíces - Instituto Nacional de Antropología e Historia.