Pericarditis crónica

Pericarditis crónica
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Pericarditis crónica. El espacio pericárdico contiene normalmente entre 15-50 mL de líquido. Se entiende por derrame pericárdico la presencia de una cantidad de líquido mayor. Cuando la duración del derrame es superior a 3 meses con características estables se considera crónico.

Clasificación

Las características del líquido pericárdico permiten clasificar a los derrames pericárdicos en:

Seroso

Serosanguinolento

Serofibrinoso

Hemorrágico

Quiloso

  • Idiopático.
  • Obstrucción linfática.

Colesterol

  • Idiopático.
  • Mixedema.

Cuadro clínico

Las características clínicas y hemodinámicas del paciente con derrame pericárdico crónico varían en gravedad y dependen del tiempo de acumulación del líquido y la distensibilidad del pericardio. Muchos pacientes son asintomáticos, o presentan disnea de esfuerzo, sensación de pesadez o llenura del tórax.

Los derrames masivos pueden acompañarse de tos, ronquera o disfagia, cuando se produce compresión de los nervios frénico, laríngeo recurrente o el esófago, respectivamente.

Exámen físico

  • El choque de la punta puede ser difuso o ausente. Puede palparse cuando el paciente está en posición supina, pero no cuando está sentado: en otras puede palparse con el paciente acostado y desaparece cuando adopta el decúbito lateral izquierdo.
  • Los ruidos cardíacos pueden estar amortiguados y varían su intensidad con los cambios de posición del paciente por la redistribución de líquido en la cavidad pericárdica.
  • En los grandes derrames suele producirse el signo de Ewart (matidez debajo del ángulo de la escápula izquierda ).
  • También pueden estar presente: ruido protodiastólico, roce pericárdico y pleural, e ingurgitación de las venas del cuello.

Exámenes complementarios

1. Radiografía de tórax

2. Electrocardiografía

3. Ecocardiograma

4. Estudio del líquido pericárdico

5. Biopsia de pericardio

Tratamientos

Establecido el diagnóstico etiológico el tratamiento de la enfermedad causal es el indicado. Si no se descubre una etiología concreta no se administrará tratamiento alguno pero se seguirá al paciente periódicamente. En los grandes derrames pericárdicos se realizará una pericardiocentesis y en caso de reaparición del derrame masivo se indicará una ventana pleuropericárdica o pericardiectomía total.

Fuentes

  • Milán Castillo, Dr. Reinaldo: Manual de Diagnóstico y Tratamiento en Especialidades Clínicas, Impreso por: Editora Política
  • Ramos Emperador, Dr. Carlos: Manual de Diagnóstico y Tratamiento en Especialidades Clínicas, Impreso por: Editora Política